El Dakar limita la velocidad de las motos a 150 km/h

El mismo día que acabó el Dakar 2005 en una mesa de la terraza del Hotel Meridien, un oasis en el caos de la capital de Senegal, el presidente de la organizadora de la prueba, Patrice Clerc, explicaba que su idea era reducir la velocidad en las motos para aumentar la seguridad. Esa era la ecuación, inversamente proporcional, que hacía el francés.

Ayer se presentó la edición 2006 de la prueba africana y, además del cambio de ciudad de salida, de Barcelona a Lisboa, la principal novedad deportiva es la limitación de la velocidad en las motos a 150 km/h. Así las máquinas de 900cc que volaban sobre el desierto a más de 180 km/h tendrán que dejar de hacerlo. Con esta medida la organización pretende, además de reducir la velocidad, igualar la diferencia que separaba a las 450cc de las motos de mayor cilindrada. Para controlar esta limitación, cada una de las motos dispondrá del correspondiente GPS y al final de la jornada se aplicará la sanción pertinente a aquellos pilotos que sobrepasen el límite.

La nueva norma provoca discrepancias entre los pilotos. Y es que mientras Marc Coma se muestra razonablemente disgustado, su compañero Isidre Esteve considera positiva esta decisión. "Es un cambio radical y se arriesgará más en las zonas técnicas. Es una limitación excesiva. Podría haber sido a 160 o así, pero no a 150. Veremos qué sucede", explicaba Coma, subcampeón de la última edición.

Mientras Esteve, cuarto clasificado a orillas del Lago Rosa, era algo más benévolo: "Está claro que había que hacer algo después de los accidentes del año pasado y es una medida lógica. Todo lo que se haga para mejorar la seguridad es bueno. Está bien que no hayan bajado la cilindrada a 450cc".