Este es el motivo que da el director de ‘El Juego del Calamar’ del contundente y desesperante final de su temporada 2

‘El Juego del Calamar’ es uno de los grandes éxitos de la historia de Netflix que con su segunda temporada ha vuelto a destacar a lo grande consiguiendo datos históricos nunca vistos hasta ahora en la plataforma. Un fenómeno global que ha dejado a millones de espectadores con la miel en los labios debido a un final contundente y ante el que podemos esperar cualquier cosa en la que será su temporada final.

Hwang Dong-hyuk, creador y director de la serie, habló con Variety sobre el motivo por el que esta segunda temporada termina donde termina, cerrando un punto de máxima tensión, pero dejando a todos los espectadores llenos de incertidumbre: “Cuando escribí por primera vez la historia de las temporadas 2 y 3 era un arco argumental largo. Y originalmente planeaba escribir esta historia en un lapso de unos ocho o nueve episodios, pero una vez que terminé la historia, llegó a tener más de 10 episodios, lo que me pareció demasiado largo para contenerlo en una sola temporada”.

Una segunda temporada llena de dolor para Seong Gi-hun

El creador de la serie continuó explicando el motivo de su final, declarando que “quería tener un punto adecuado en el que pudiera dar un cierre como segunda temporada y luego seguir adelante con la tercera”. Una temporada 2 que se basó en mayor medida en los múltiples intentos de su protagonista, Seong Gi-hun, para detener el mortal juego.

“Si nos fijamos en la historia de Gi-hun, todos los intentos que hace para detener el juego: el primero, conseguir mercenarios e intentar colocar un dispositivo de rastreo, fracasa; el segundo, intentar convencer a la gente de que vote para poder abandonar el juego, también fracasa; y el tercero y último, reunir a la gente y provocar la rebelión, también fracasa. Y ese fracaso lleva a Gi-Hun a un punto aún más bajo al final de la segunda temporada. Así que todos sus fracasos le llevan a esta pesada, pesada crisis de tener que perder a su mejor amigo, Jung-bae, a manos de El Líder”.

Por último, concluye que la segunda temporada cierra una parte del arco de su protagonista: “Si pensamos en el viaje de Gi-hun, pensé que era el momento adecuado para poner punto y final a ese largo arco de la historia. Y a partir de ese momento, en la tercera temporada, con ese sentimiento de culpa y de fracaso que pesa sobre él, ¿cómo va a continuar Gi-hun su misión? Esa es la historia que seguirá desarrollándose”.