NBA 2K26 nos está dando motivos para creer que puede romper la mala racha de la saga

Los juegos de NBA 2K (y de cualquier saga deportiva en general) siempre han sido como las actualizaciones de Windows. Una de cal y otra de arena con muchas entregas insulsas entre las que de verdad hacen cambios. Cuando se da con la tecla, la compañía responsable se dedica a vivir de las rentas durante unos años. Cuando no, los usuarios se ven condenados a media generación de decepciones. Y es justo en esa situación en la que estamos inmersos ahora.

La franquicia lleva sin superar el 80 en Metacritic desde NBA 2K19 y ha venido dilapidando poco a poco su prestigio hasta tocar fondo con NBA 2K21 y NBA 2K24, dos de los mayores batacazos de su historia. Sendos rapapolvos (con una media de 68) encendieron todas las alarmas y obligaron a Visual Concepts a redoblar esfuerzos. Evidentemente, el estudio no pudo solucionarlo todo de una temporada a otra, pero aquel tanking al menos les permitió encontrar a su próximo número 1 del draft, por así decirlo. Hablamos del sistema ProPLAY, la característica que este 2026 parece haber entrado en su prime y que apunta a cambiar la mala racha.

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“El mayor cambio desde NBA 2K21″

Introducido por primera vez en NBA 2K24, el ProPLAY Motion Engine va a dejar de ser un rookie para echarse a la saga a la espalda. Esta tecnología, que a grandes rasgos copia los movimientos de los jugadores reales, ya no implementará aspectos concretos de su repertorio (como el dribbling en la entrega del curso pasado), sino que en NBA 2K26 los quiere abarcar todos. Absolutamente todos. Con o sin balón. En ataque y en defensa. Desde la desarrolladora aseguran que va a ser “el mayor cambio en el sistema de movimiento desde NBA 2K21″.

Visual Concepts quiere que las novedades no solo se noten a los mandos, sino que también se vean a simple vista. Se ha propuesto como objetivo que NBA 2K26 ofrezca los movimientos más precisos y realistas que jamás haya tenido la saga. Para ello, sus creadores nos han explicado que han prestado especial atención al tren inferior de esos alienígenas a los que vemos por la tele cada madrugada. Con el ProPLAY, han tratado de que sus réplicas virtuales pisen, salten y cambien de dirección tal y como lo hacen ellos. Planean que digamos adiós a todas esas veces en las que parecían levitar y deslizarse por la cancha como si fueran en patines.

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En aspectos como el tiro, por ejemplo, la introducción de este nuevo ProPLAY subido de vueltas hará que cada lanzamiento tenga una animación acorde a lo que nosotros hacemos con el joystick. Y no nos referimos a que se hayan copiado los cuatro movimientos insignia de las estrellas de turno, como antaño. Lo que decimos es que ahora podremos materializar cada tipo de jump shot que se nos pase por la cabeza. O al menos eso nos garantizan. Se terminó lo de limitarnos a ver una y otra vez el mismo tiro con la única diferencia de la velocidad a la que suelta la bola nuestro rival.

La era de los grandotes

A propósito de los tiros, tres novedades. La primera, la importancia de los hombres grandes. Tradicionalmente, la saga de 2K ha tendido a preferir el backcourt de los equipos y muchos (entre los que nos incluimos) estábamos hartos de verla presumir de haber calcado los step-back de Curry o Haliburton. Consciente de la situación, la entrega de este año traerá un nuevo y flamante repertorio de movimientos al poste basados en los más famosos de la historia de este deporte. Entre eso y la nueva altura máxima de Mi JUGADOR (2.23), Mike Wang, gameplay director del juego, vaticina el uso de más pívots y ala-pívots que nunca en los modos online.

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En cualquier caso, esto no quiere decir que hayan descuidado a los ‘pequeños’. Ni muchísimo menos. La segunda novedad es que NBA 2K26 permitirá, por primera vez en la serie, combinar los distintos lotes de finalizaciones bajo el aro. Antes tú elegías un tipo de bandeja y eso determinaba (y limitaba) tus acciones al aproximarte a canasta. Ahora el editor de Mi JUGADOR permitirá mezclarlas todas y crear un MVP que tan pronto te acaba con una de las gráciles dejadas de Steph como tira un euro-step de Harden, te define parándose como Shai o incluso se gira y te lanza a media vuelta de una forma que ni Jokic. Van a crearse auténticas bestias.

Y como tercera y última novedad, el regreso del green o miss universal. Adiós a las canastas con tiros en blanco. Da igual que no claves el movimiento correcto con el joystick. El tempo sigue siendo importante, pero con el timing bastará. No sabemos cuántas entregas durará esta vez (o cuántos meses...), pero se promete que estará en todos los modos (incluidos los competitivos). La ventana de acierto variará según en cuál estemos y según la dificultad. Ah, y lo mejor de todo: se han quitado los fallos obligatorios. Si metes 17 triples seguidos, ole tú. La consola ya no te colará una chufla que tú nunca erraste “porque lo dice la estadística”.

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Dicen que la NBA no se gana solo en la cancha, sino también en los despachos. Es allí donde se confeccionan las plantillas y se hacen malabares financieros. En los juegos de la saga ocurre algo parecido. Todas esas novedades citadas están muy bien, pero además del gameplay, lo que diferencia a una entrega buena de una mala son las opciones del parque o el modo Mi EQUIPO. Eso y las posibilidades de sus editor. Es en ellos donde solemos pasar más de la mitad de nuestro En ese sentido, 2K26 pinta a ser uno de los más sólidos en ese aspecto.

Quien dice sólido dice accesible también. Por ejemplo, ahora al entrar en Mi JUGADOR, las estadísticas no abrumarán y exigirán estudiar cada número durante horas. Siempre podremos seguir empezando de cero, pero NBA 2K26 incluye la posibilidad de consultar las builds de los jugadores que más te gusten de la liga para ver sus cifras e “inspirarte”. También contará con varios arquetipos ya construidos por posición. Es más, a partir de la segunda temporada, serán los mejores creadores de la comunidad los que ofrezcan esos modelos. Incluso viene con un con glosario de términos y un equipo de scouting para ayudarnos a elegir insignias y atributos. Sumado al modo Learn, aprender nunca fue tan sencillo.

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El primer juego deportivo en romper la barrera del género

De Mi EQUIPO qué decir. Esta entrega se animará con lo que ningún otro deportivo se había atrevido a hacer. Juntará a hombres y mujeres. Estrellas de la NBA y de la WNBA compartirán cancha y va a tocar conocerse a Angel Reese y Lisa Leslie tan bien como a Jalen Brunson y Nikola Jokic. Veremos cómo sale, pero lejos de ser la única novedad, habrá 2 versus 2 por primera vez y será aquí donde ahora se juegue el modo Equipo All-Star. Todo eso por no hablar del regreso más esperado, el de la Sunset Beach de NBA 2K15. Los parques nocturnos llenos de neones estaban en la lista de deseos desde hace varias ediciones.

Y hasta aquí la recapitulación de todo lo que ha fichado NBA 2K en la agencia libre de este año. El repaso a todos los movimientos que ha hecho para tratar de pasar la barrera de los 80 con la entrega de esta año. No son pocos e incluso los que está por ver que no salgan mal (la WNBA en Mi EQUIPO, los nuevos pívots de 2.23 con súper movimientos, el siempre polémico green o miss del que dependen los tiros) se agradecen al apostar por algo fresco y novedoso.

Estamos seguros de que también queréis saber qué sensaciones nos ha dejado el juego tras pasar varias horas con él y cómo ha confrontado Mike Wang las preguntas sobre todas las espinas que tenemos clavadas de estos últimos años, pero para eso, os animamos a estar muy atentos mañana a la portada de MeriStation. Porque este fin de semana de NBA 2K26, nuestra Summer League particular, acaba de empezar.

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