Impresiones finales de Dragon Quest III HD-2D Remake. La mejor manera de jugar al clásico

Un periplo hacia lo desconocido, un mundo al borde del cataclismo. Dragon Quest III HD-2D Remake encarna el espíritu aventurero de los JRPG de antaño. El clásico de Enix logra transmitir la épica de una historia de héroes y villanos, que se sostiene no tanto en guiones intrincados y personajes profundos, sino en la exploración de su mundo de fantasía. El título, que salió originalmente en la SNES de Nintendo, representó un paso adelante con respecto a las entregas anteriores, ya que fue la primera en aparecer en una consola de 16 bits. Más de 35 años después, Square Enix lo recupera en esta fantástica versión remozada.

Hace unos meses, MeriStation tuvo la oportunidad de probarlo por primera vez. En nuestras impresiones destacamos que el juego se ve y se juega mejor, todo ello sin sacrificar la estructura jugable del original. El motor de los HD-2D Remake encaja a la perfección con este tipo de títulos bidimensionales porque consigue realzar los gráficos y añadir iluminación y efectos tridimensionales muy vistosos. A cada juego que sale, la tecnología mejora y su aspecto se refina un poquito más.

Monstruos a la gresca y un objetivo en el horizonte

La nueva demo se presentó en Gamescom y ya hemos jugado a esta build, que arranca en el coliseo de la ciudad de Romaria, un lugar inspirado en Italia, lo que se refleja en los giros lingüísticos de los personajes. Las localizaciones y las traducciones de Final Fantasy y Dragon Quest suelen estar muy cuidadas y esta entrega no es una excepción, chistes y modismos incluidos. Los héroes interactúan con la gente del coliseo y participan en varios combates en la arena de monstruos. Para ello, seleccionamos a los bichos que hemos cazado, armamos nuestras escuadra y pagamos la cuota de inscripción. No manejamos directamente a las criaturas, pero en ‘Monstruos a la Gresca’ —así se denomina el modo— elegimos las tácticas y los propios contendientes eligen sus movimientos en función de la estrategia elegida. Si sobreviven a las distintas rondas, recibiremos recompensas en forma de dinero y objetos.

A veces, jugar a la demo de un JRPG puede desorientar, más que nada porque es complicado situarse dentro de la historia y saber cuál es el siguiente paso a dar. En este juego, los objetivos se indican de forma general, por lo que no siempre se especifica el destino. Lo más lógico es acudir a la sala del trono de Romaria, donde el rey nos espera impaciente. Al parecer, un ladrón conocido como Luis Candelas ha robado un objeto de vital importancia. Como cabría esperar, encomienda su recuperación al grupo.

El hecho de que el título no te dé todo mascado incentiva la exploración. Por eso, nada más salir del castillo preguntamos a los ciudadanos en busca de pistas que nos puedan orientar. Descubrimos que el susodicho ladronzuelo se ha atrincherado en una torre lejana, de modo que preparamos las piezas de equipamiento y nos disponemos a realizar los preparativos para el viaje. Antes de acudir al destino, nuestros héroes inspeccionan las zonas aledañas y descubren que la frontera está cerrada. Quizá si cumplen el encargo les dejen pasar.

Estas son algunas de las novedades de Dragon Quest HD-2D Remake

Como en todo JRPG, el sistema de combate es uno de los eslabones que unifica el conjunto de sistemas. Desde el lanzamiento de la versión de SNES ha pasado tanto tiempo que Square Enix ha efectuado algunos ajustes. Si bien las luchas siguen siendo aleatorias, la velocidad de lo combates es ajustable y se han añadido otras mejoras de calidad de vida, como la posibilidad de guardar partida en cualquier iglesia. Si preferimos manejar solo al héroe principal, es posible establecer las rutinas del resto de compañeros gracias a un sistema de tácticas.

Ya lo comentamos en las primeras impresiones, pero la interfaz se ha renovado y la gestión de los menús es más ordenada y limpia. Además, los desarrolladores han implementado marcadores, que se pueden colocar en el mapa. Una de las novedades de esta build es la clase adiestrador de monstruos, que permite reclutar bestias y aprender sus habilidades. Apenas hemos podido explorar las posibilidades, aunque parece que va a ser un personaje muy poderoso.

Al final de la demo, los héroes se enfrentan al desafío de una mazmorra. De diseño bastante tradicional, se trata de una torre de varios pisos, por lo que tenemos que llegar a la cima. Encontramos objetos, pequeños secretos y luchamos combate aleatorio tras combate aleatorio. En lo más alto nos aguarda Luis Candelas, que nos tiende una pequeña trampa antes de la lucha final. Vamos con un nivel 14 y el ladrón no supone un gran desafío, si bien este villano no es nada comparado con lo que vendrá más adelante.

Tras jugar otra hora más, nos queda más claro todavía que Dragon Quest III HD-2D Remake es el título ideal para los amantes de los JRPG clásicos. Sigue siendo el mismo juego, pero se han ajustado sus sistemas principales y ofrece lo que uno puede esperar de un título de SNES adaptado a los tiempos modernos. A falta de probarlo en profundidad, se erige como uno de los JRPG más esperados del año.

Dragon Quest III HD-2D Remake saldrá a la venta el próximo 14 de noviembre en PS4, PS5, Xbox One, Xbox Series X, Xbox Series S, Nintendo Switch y PC. Junto a la primera y a la segunda entrega compone la trilogía de Erdrick, que no quedará incompleta porque Square Enix ha anunciado el desarrollo de Dragon Quest I & II HD-2D Remake.