Me he pasado todo el fin de semana jugando a Marvel Rivals y tengo claro por qué es todo un éxito

Marvel Rivals ha llegado a PC, PlayStation 5 y Xbox Series X|S sin apenas hacer ruido, y en la recta final del año, una época en la que no es habitual lanzar videojuegos de alto perfil. No obstante, esta llegada casi por sorpresa ha puesto de manifiesto una gran realidad dentro del panorama actual de los videojuegos: los hero shooters no estaban muertos —ni estaban de parranda—, sino que hacía tiempo que no se veía una propuesta fresca y sólida dentro de este género tan saturado. Y si a una fórmula jugable solvente le sumas un elenco de personajes atractivos y reconocibles, es más fácil entender por qué Marvel Rivals está teniendo una acogida tan positiva durante sus primeros días, llegando a amasar 10 millones de jugadores activos durante sus primeras 72 horas.

Marvel Rivals ha tenido un timing de lanzamiento perfecto tras el fracaso de Concord, en un punto en el que Overwatch 2 está de capa caída

Pongamos los puntos sobre las íes: Concord será recordado no solo como uno de los mayores fracasos de PlayStation, sino también como uno de los mayores ridículos de la industria de los videojuegos. Se trataba de un hero shooter que, en un mercado liderado por múltiples alternativas gratuitas y de calidad como Overwatch o Valorant, fue lanzado a un precio de 39,99€. Al margen de esta gran barrera de entrada, no se trataba de un título especialmente original debido a sus mecánicas de juego. Y, como “guinda” para el pastel, el diseño de sus personajes fue uno de sus aspectos más polémicos.

Los héroes y heroínas de Concord fueron diseñados con el claro objetivo de alinearse con políticas ESG, siguiendo un enfoque inclusivo. No obstante, esto se percibió como algo forzado o excesivamente deliberado que, irónicamente, provocó un efecto contrario al pretendido y que en última instancia se consideró un intento comercial de capitalizar una agenda progresista más que una integración natural dentro de la narrativa o la estética del videojuego. Esa fue la puntilla final para Concord, que no contaba con el respaldo de una jugabilidad sólida que pudiese paliar el efecto negativo de este aspecto tan polémico.

Este título cerró sus servidores tras llevar apenas dos semanas en activo desde su lanzamiento en agosto de 2024, y el coste estimado de este hero shooter se estima que fue de alrededor de 400 millones de dólares. Muchos consideraron que este fracaso se debía a un interés decreciente de las audiencias en el género, prefiriendo enfocarse en otros tipos de juegos en alza como los battle royale, con Fortnite y Warzone como sus máximos exponentes. Pero, en diciembre de 2024, llegó Marvel Rivals, y demostró no solo que el género no está muerto, sino que sigue siendo posible lanzar alternativas de calidad en un terreno donde la competencia es muy feroz.

Seamos honestos: Marvel Rivals no es 100% original, y muchos de sus elementos recuerdan mucho a Overwatch, principalmente en lo que a las mecánicas y flujo jugable de ciertos héroes se refiere. Pero Overwatch también bebía bastante de Team Fortress 2, considerado uno de los padres de los hero shooters, por lo que ser un producto derivativo no supone un problema siempre y cuando se mejore lo ya existente. Por tanto, el éxito de Marvel Rivals tiene que ver, por un lado con un timing de lanzamiento perfecto, y, por otro, con un valor añadido a lo que cabe esperar de un título de estas características. Las armas y acciones de los héroes y villanos de Marvel en el juego casan muy bien con sus descripciones y los poderes y habilidades que hemos visto decenas de veces en distintos medios como cómics, películas, series e incluso otros videojuegos.

Marvel Rivals ha llegado a PC, PS5 y Xbox Series X|S unos pocos meses tras la debacle de Concord, y en un punto en el que Overwatch 2 no pasa por su mejor momento. En el título de Blizzard son muchas las promesas incumplidas, incluyendo la cancelación del Modo Héroe PvE que, para empezar, era una de sus principales razones de ser. Por otra parte, su transición de un modelo de pago a un sistema free to play con temporadas y pases de batalla a lo Fortnite fue muy polémico, especialmente porque este cambio en el modelo de negocio supuso el cierre del primer Overwatch, forzando a todos los jugadores a jugar a su “secuela” sí o sí. El nuevo hero shooter de Marvel, en cambio, es gratuito desde el día 1, sin visos de que este modelo vaya a cambiar a largo plazo, lo cual en última instancia resulta una propuesta más clara y con la que los jugadores pueden estar más tranquilos y cómodos si deciden implicarse con este título empleado en él su tiempo y su dinero.

Por otro lado, otra de las grandes razones del éxito de Marvel Rivals tiene que ver, efectivamente, con el diseño de sus personajes. De lanzamiento, no solo hay un gran número de héroes y villanos reconocibles que son controlables como el Capitán América, Spider-Man, Hulk o Tormenta de los X-Men, sino que su diseño tiene un gran equilibrio entre la fidelidad a su representación en los cómics y un gran atractivo visual propio. No solo eso; muchos de ellos poseen, además, aspectos adicionales basados en películas concretas como el Lobezno de ‘Deadpool y Lobezno’.

Mientras que Concord te proponía manejar a personajes francamente feos y con diseños cuestionables, todo ello en pos de una pretendida inclusividad, en Marvel Rivals se tiene la posibilidad de controlar a un amplio elenco de héroes y villanos con buenos diseños y, en el caso de los personajes con rasgos humanoides, atractivos. No en el plano sexual, pero sí en el sentido más estricto de la belleza artística entendiendo a estos avatares virtuales como ideales del cuerpo masculino y el femenino: gran estatura y capacidades atléticas, una musculatura impresionante y, en definitiva, rasgos idealizados solo alcanzables tras muchas horas de gimnasio y estricta dieta.

Durante estos últimos años, es como si se nos hubiese olvidado que, para muchos, los videojuegos son una válvula de escape o un mero entretenimiento con el que pasar el rato y desconectar de la vida cotidiana. A este respecto, Marvel Rivals es muy honesto con lo que ofrece: combates por equipos de héroes y villanos queridos —o infames— de Marvel. Sin moraleja u otro mensaje subyacente. No pretende convencerte de que es bueno porque apela a tal o cual colectivo; simplemente lo es porque sus desarrolladores han tenido claras sus prioridades: ofrecer, en primer lugar, un producto de calidad donde prácticamente todos sus aspectos han sido tratados con gran mimo y esmero.

Teniendo en cuenta todo esto, Marvel Rivals ofrece una de las mayores fantasías de poder del panorama actual de los videojuegos, permitiendo encarnar a héroes y villanos musculosos, atractivos, y físicamente impresionantes que permiten que los jugadores se sumerjan con facilidad dentro de su universo. Estas representaciones sirven, además, para evocar la imagen tradicional de los superhéroes y supervillanos en su forma más pura y épica, sin caer en representaciones estereotipadas o forzadas. Además de esto, Marvel Rivals no hace alarde de ser inclusivo o progresista por encima de todo —como fue el caso de Concord—, sino que se centra en los valores clásicos de lo que hace que estos personajes sean apreciados: su poder, su capacidad para hacer el bien —o el mal— y su imponente presencia.

La representación en ficción de distintos tipos de cuerpos, historias, orígenes y contextos diversos no es algo negativo, pero utilizarlas como bandera sin añadir algo más de sustancia o sin que surja de manera orgánica dentro del contexto o narrativa de una obra de ficción no solo es ofensivo, sino que es, además, una táctica indecente que simplemente atiende a razones económicas, obviando la total falta de preocupación por las problemáticas que dicen ser tratadas.

En última instancia, Marvel Rivals, desarrollado por la compañía china NetEase Games, ha sido lanzado en el momento perfecto, cuando gran parte de su posible competencia se ha visto salpicada por problemas tan graves que han propiciado incluso cierres de juegos y estudios. Su futuro pinta brillante si sus responsables siguen centrándose en lo que han demostrado que mejor se les da: ofrecer un juego divertido y visualmente atractivo.