Alucinaciones, kaijus y zombis: la Campaña de Call of Duty Black Ops 7 es mejorable, pero no tan atroz como muchos la pintan

Tras varias semanas de incertidumbre, Call of Duty: Black Ops 7 ya está entre nosotros. Aunque en líneas generales es un juego sólido, es evidente que su modo Campaña es el más flojo de su amplia oferta de contenidos. Las numerosas y surrealistas situaciones que vivimos, que vienen contextualizadas dentro de la trama, han alienado a gran parte de los jugadores. Si bien es cierto que la historia del juego dista mucho de las de los mejores Call of Duty, no es tan mala como muchos afirman sin haber jugado a fondo.

Nota del autor: en este texto intentaremos reducir al mínimo los spoilers sobre el modo Campaña de Black Ops 7, pero aun así puede haber alguno. ¡Estáis avisados!

La Campaña de Call of Duty: Black Ops 7 está llena de momentos y situaciones surrealistas, aunque tiene su justificación

Estos días seguramente os hayáis topado por redes sociales como X (antes Twitter) con clips de vídeo de la Campaña de Black Ops 7 que muestran situaciones totalmente disparatadas. Enfrentamientos contra zombis, escenarios distorsionados que parecen sacados de una pesadilla, o un enorme kaiju de Harper —el personaje interpretado por Michael Rooker— han provocado todo tipo de reacciones de incredulidad entre los fans. Pues bien, sabed que todo esto es completamente verídico, y es contenido de la historia de este nuevo Call of Duty.

Ahora bien, todo esto tiene un contexto muy particular: tras la primera misión de la Campaña, Mason y su equipo quedan expuestos a la Raíz, el mismo potente agente químico de Black Ops 6 que provoca alucinaciones severas. El hecho de que el escuadrón esté conectado entre sí vía implantes cerebrales es lo que provoca que estas alucinaciones sean, además, compartidas.

Este contenido sería sorprendente y subversivo de no ser porque la cuestión de las alucinaciones es un tema más que manido en la franquicia. Hace ya quince años, el primer Black Ops nos sorprendía con el tema de los lavados de cerebro y el programa MKUltra de la CIA, y cómo afectaba a su protagonista, Alex Mason. Por su parte, Black Ops III era una historia ambientada en una distopía futurista cyberpunk con toques de terror psicológico. Y, más recientemente, tanto Black Ops Cold War (2020) como Black Ops 6 (2024) también han ido por estos derroteros.

Es decir, el problema es doble: por un lado la historia se recrea en demasía en el pasado, revisitando momentos y personajes de juegos anteriores con la excusa de la “alucinación colectiva”, y, por otra parte, estas numerosas secuencias lisérgicas efectivamente pausan el avance del grueso principal de la trama. Mientras que los personajes están atrapados en uno de estos “sueños lúcidos”, la historia simplemente no avanza.

El modo historia de Black Ops 7 no es un Call of Duty al uso, y esto también juega en su contra

Tampoco ayuda el hecho de que la jugabilidad clásica de Call of Duty, que sin ir más lejos estaba presente en la Campaña de Black Ops 6, haya desaparecido casi en su totalidad de la Campaña de esta nueva entrega. Más que ante un Call of Duty, estamos ante un looter shooter a lo Destiny o Borderlands, dado su marcado uso de elementos propios del género como rarezas de las armas, o enemigos que actúan como esponjas de balas ya que usan tablas de daños similares a las de estos FPS-RPG.

Todo parece ser derivado del nuevo modo Endgame/Objetivo Final, que sí que cuenta con todas estas mecánicas elevadas a la enésima potencia, y donde funcionan muy bien. Lamentablemente, por lo que hemos podido comprobar queda patente que ha habido un desvío de recursos desde la Campaña hacia Endgame, incluyendo muchas misiones que quedan afincadas dentro del enorme mapa de Avalon, de este otro modo de juego.

En otras palabras, aunque es de agradecer que hayan añadido el modo Objetivo Final, que es un extraction shooter bastante sólido, esto en ningún caso debería haber sido en perjuicio de la Campaña de Black Ops 7. Para muchos jugadores, el modo historia sigue siendo uno de los pilares fundamentales de la franquicia, y dado el retorno de David Mason como protagonista tras más de diez años sin saber de él, muchos fans tenían las expectativas muy altas por la trama del juego.

Aun así, la Campaña de Black Ops 7 sigue siendo muy divertida, especialmente con amigos

Pese a que la trama cojea, la experiencia de juego es muy divertida, especialmente con amigos. Los fans más agoreros no han tardado en acudir a la red social de turno a lapidar excesivamente la Campaña de Black Ops 7, con argumentos tan inconsistentes —o directamente falsos— como que es “la peor de toda su historia”. Sin ir más lejos, es bastante superior que la malograda Campaña del Modern Warfare III de 2023, que sí que marcó un mínimo histórico, con misiones cortas, narrativa casi inexistente y un diseño francamente perezoso.

La trama de Black Ops 7 quedaría situada de manera más justa en la mitad de la tabla, no tan abajo como la Campaña de Modern Warfare III (2023), pero desde luego bastante lejos de otros modos historia top de la saga como Call of Duty 4: Modern Warfare, Call of Duty: Black Ops o Call of Duty: Black Ops II. Tiene destellos de brillantez, como la misión que comienza en el crucero de Hijacked —el mítico mapa multijugador—, pero efectivamente podía haber dado más de sí.

En última instancia, se trata de la enésima demostración del guerracivilismo y la polarización extrema presente en redes sociales desde hace algún tiempo. Apenas hay lugar para la crítica argumentada, y en su lugar se premian las reacciones viscerales, extremas, y no informadas, desplazando por completo a las críticas sosegadas y basadas en la experiencia de primera mano. Todo es o blanco, o negro; no puede haber grises. Como siempre, os recomendamos que, si podéis, juguéis y juzguéis por vosotros mismos para crearos vuestra propia opinión en lugar de dejaros llevar por lo que digan terceros.