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Nintendo Switch 2 es retrocompatible con la primera Switch, pero no de serie: toca actualizar tu consola
Nintendo Switch 2 necesita una actualización de firmware crítica para poder desbloquear la función de retrocompatibilidad con los juegos de la anterior consola.
Llegó el gran día: desde el 5 de junio de 2025, Nintendo Switch 2 ya está en las tiendas, iniciando una nueva era para la Gran N. Entre sus funciones más esperadas está la retrocompatibilidad con los juegos de la primera Switch, pero hay un inconveniente: la retrocompatibilidad no está incluida de serie, sino que hay que actualizar la consola. Aunque la solución obvia es conectar la consola a internet, hay una vía alternativa para la actualización: el firmware incluido en algunos juegos iniciales como Mario Kart World.
Si quieres jugar a los juegos de la primera Switch en Nintendo Switch 2, primero debes actualizar tu consola
Con Switch 2 ya en las tiendas, podemos confirmar que, si bien la consola es retrocompatible con prácticamente todo el catálogo de la consola anterior, hay un gran inconveniente: la retrocompatibilidad no es una función incluida de serie en la nueva máquina. En su lugar, hay que activarla actualizando la consola.
El firmware con el que la primera hornada de consolas Nintendo Switch 2 ha llegado a las tiendas es el 19.0.0, pero, para poder jugar a los títulos de Switch 1, hay que actualizarlo a la versión 19.1.0. La solución más evidente es simplemente conectar la consola a internet, aunque hay una vía alternativa que puede ayudarnos en eventualidades como caídas de la red o viajes a zonas remotas y sin cobertura.
Ciertos títulos de lanzamiento, como Mario Kart World, incluyen en la tarjeta de juego la actualización de firmware 19.1.0, lo que posibilita jugar a juegos de Switch 1 en Switch 2 incluso sin la necesidad de conectarnos a internet. Que un videojuego incluya actualizaciones para el sistema no es algo infrecuente: es algo que se hacía en, por ejemplo, PSP. Muchos de los UMD de la consola de Sony incluían actualizaciones críticas para el sistema, que dotaban a la máquina de nuevas características al tiempo que corregían errores. Incluir estos parches en los juegos es una forma eficiente de mejorar el rendimiento y funcionalidades de la consola, independientemente de si sus usuarios tienen conexión a la red.
La retrocompatibilidad de Nintendo Switch 2 activada por firmware: un problema de cara a la preservación que afortunadamente ha sido solucionado
Que una función esencial de la consola quede bloqueada por firmware, máxime teniendo en cuenta el monumental éxito de su predecesora —Nintendo Switch acumula más de 150 millones de consolas vendidas en todo el mundo— es un grave problema. La retrocompatibilidad dota a Switch 2 de un catálogo increíble de más de 15.000 juegos desde su primer día en las tiendas, al hacer que funcionen en ella los juegos de la anterior Switch.
Por fortuna, la presencia de los parches críticos dentro de las tarjetas de juego de Switch 2 solventa un problema que podría haber sido irreversible, ya que, en un futuro, los servidores que albergan las actualizaciones de la consola se cerrarán. Esto representaría un grave inconveniente de cara al desbloqueo de todas las características de manera legítima a largo plazo. La solución presente no es la ideal, dado que se requiere al menos una tarjeta de juego de Switch 2, pero desde luego es mucho mejor que la alternativa, que sería la eventual pérdida de esta característica sin manipular la consola.
Un caso similar, aunque peor, es el hecho de que los lectores externos de discos de las consolas PlayStation 5 deben activarse a través de internet. De nuevo, el problema es evidente: sin conexión a la red, el lector queda completamente inservible, lo que hará que su uso en un futuro sea imposible.
Vivimos tiempos, sin duda, extraños en la industria de los videojuegos. Mientras que antaño, funciones como la retrocompatibilidad venían completamente garantizadas vía hardware, en el presente, las nuevas y más complejas arquitecturas dificultan garantizar esta compatibilidad de manera nativa, lo que repercute en un peor servicio para el usuario final. En resumen: Nintendo ha conseguido eludir un gran problema en potencia de cara al futuro de la máquina, cuando sea descontinuada, si bien es cierto que a través de una vía que puede no ser evidente a primera vista. Mediante la solución creativa de incluir el firmware necesario en algunas tarjetas de juego, es posible desbloquear la función de la retrocompatibilidad incluso en escenarios donde tengamos mala cobertura, o los servidores fallen... o hayan cerrado definitivamente.