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Ibai, crítico con los jugadores de esports: cobran mucho, no trabajan duro y no dan resultados
El ridículo de los equipos de esports europeos y norteamericanos ante los coreanos ha hecho explotar a Ibai, que se queja de su falta de profesionalidad.
Ibai como pocas veces le hemos visto. El streamer ha narrado estos días el Mid-Season Invitational, uno de los torneos más importantes de League of Legends, y ha terminado de lo más cabreado con la actuación de los equipos europeos y norteamericanos, completamente barridos por los coreanos. Tras la derrota de Mad Lions (uno de los conjuntos más punteros del viejo continente) frente al T1 de Faker (considerado el mejor jugador de la historia), Ibai ha estallado, no tanto por el resultado, sino por el cómo ha sido. Una paliza en menos de una hora que le ha llevado a soltar un discurso que ha calado hondo en la comunidad.
“Ostia, tío, es muy duro. Chavales, sinceramente, yo poco más puedo hacer. Me gustaría tener el dinero del contrato de Cristiano Ronaldo en Arabia Saudí para intentar ayudar, pero no se puede hacer más. Realmente esta diferencia es abismal y aburrida. Los que seguís el LoL desde hace años sabéis que llevamos aguantando esto más de una década. Se puede perder, se puede ganar, pero que te acaben una partida a nivel profesional en 16 minutos... Es demasiado. Estamos muy lejos de poder ganar. Y es la misma sensación que teníamos hace siete, ocho, nueve años. Parecía que la diferencia se había reducido un poco gracias a un bajón que tuvo Corea en los años 2018, 2019, cuando China empezó a dominar y Europa tuvo el mejor roster de su historia, el de G2. Pero desde 2020 vuelve a haber una gran diferencia”.
Pero lo peor venía cuando los componentes de Mad Lions hacían acto de aparición tras la partida entre risas y como si nada. “Dirán que mejor reír que llorar, si esta me la conozco yo. Para mí hay que tener un mínimo de respeto por la gente que te está viendo. Te lo puedes ahorrar. Me sorprende que te salga el gesto de reírte. A mí me ganan y estoy jodido, jodido, jodido. Puedes reírte irónicamente si te han robado, pero yo creo que hay que exigir unos mínimos. Esta gente está cobrando 500, 800 mil euros al año, un millón, un millón y medio. Hay profesionales de todo tipo, psicólogos deportivos, analistas, entrenadores, segundos y terceros entrenadores. Tampoco te están pidiendo que estés obligado a ganar, pero como mínimo que des una imagen decente, tanto Norteamérica como Europa”.
Su solución es clara: más seriedad y profesionalidad. “Estoy de acuerdo en que el problema es de mentalidad. Al final, el gran problema que tiene Europa es la falta de profesionalidad de sus staffs técnicos. Muchas veces son un auténtico cachondeo. Es muy difícil dar con alguien que sea muy muy bueno y esté preparado. Es muy difícil dar con un jugador que es profesional. Tú, lo siento mucho, si eres un jugador profesional que esta cobrando 600 o 700 mil euros año, y no es por lo que ganas, porque lo que ganas te lo mereces, estás en la máxima competición europea y te lo has ganado, pero tú no puedes levantarte a las dos y media de la tarde. Tú no puedes faltar a un entrenamiento. Tú no puedes insultar a tus compañeros. Tú no puedes faltar el respeto al entrenador Son unos mínimos que hay que cumplir como en cualquier trabajo”.
Él mismo se sentía ofendido. “Es una falta de respeto para todo el mundo que tiene un trabajo y sin más. Vives en una casa, te levantas a la una de la tarde, entras enfadado, pierdes una y te cabreas todo el día. Sí que hay psicólogos deportivos, pero no son magos, no te arreglan la vida, tienes que poner de tu parte, ir, escuchar, mejorar ciertas actitudes. Yo soy el primero que a mí me jode perder. Yo qué cojones hago si no puedo manejar el puto ratón. Si no veo de un ojo y soy un mierda, un analfabeto, desagradable y feo. A mí me encantaría poder ganar, pero no puedo hacer nada. Me jode venir aquí cada año y que me repasen. A mí este rollo de que por perder un partido esté fuera del todo mentalmente, pues mejóralo. Mejora eso. Aprender a gestionar la rabia y la derrota. Sólo hay que pedir unos mínimos”.