Final Fantasy VII Rebirth y el bug que hace imposible conseguir el platino a los jugadores que no tengan el juego físico

Final Fantasy VII Rebirth ha sido un enorme éxito de crítica y público, y ya pasado un mes desde su lanzamiento son muchos los que han podido terminar el juego de Square Enix y están tratando de lograr el platino completando todo lo necesario para ello. ¿El problema? Más allá de la dificultad y horas necesarias para lograrlo, un error en una misión secundaria del juego impide obtener el platino a los jugadores que tengan una copia digital del mismo. ¿Cómo es esto posible? Los jugadores con una copia física de Final Fantasy VII Rebirth han encontrado una solución, y esta no se puede obtener de otra forma que con el disco del juego.

El simulador arcade G-Bike es uno de los minijuegos que se encuentran en el Gold Saucer, y de cara al platino necesitaremos obtener la puntuación máxima en G-Bike. El problema es que actualmente el minijuego no reconoce nuestra puntuación, por lo que no es posible superar la más alta registrada. Un error que ha llegado con una de las últimas actualizaciones y que acabará solucionándose mediante algún parche, pero hasta entonces solo se puede solucionar desinstalando el juego, desconectando la PS5 de internet y volviendo a instalar el título mediante una copia física. Una vez se haya realizado, habrá que acceder a una partida guardada anterior al error y ya podremos superar este minijuego para lograr el platino.

Final Fantasy VII Rebirth y el formato físico

Un error que puede dar lugar al debate de la preservación del formato físico por encima de lo digital, y es que en casos como este se demuestra la importancia que puede tener el hecho de disponer de una copia física en propiedad por encima de lo digital. Los que posean Final Fantasy VII Rebirth en físico pueden a día de hoy superar este problema, mientras que los que tan solo optaron por el formato digital tendrán que esperar a que Square Enix solucione este error.

En el análisis realizado en Meristation se destaca que “Final Fantasy VII Rebirth es más y mejor, un producto que nace de la nostalgia, pero que sabe jugar con ella sin traicionar la esencia del clásico. Puede que su mundo abierto no sea innovador, que algunas tareas pequen de repetitivas, que haya secciones demasiado alargadas y que el motor gráfico se resienta ante el despliegue audiovisual del que hace gala, pero Square Enix ha creado un título lleno de detalles, de minijuegos variados, de amor por los personajes y su mundo”.