Es el mejor momento para jugar a Assassin’s Creed Syndicate: motivos para regresar a la Inglaterra victoriana

Este año se ha cumplido el décimo aniversario de Assassin’s Creed Unity, un juego tan espectacular en términos gráficos como problemático en su lanzamiento. Un año después de su llegada, Ubisoft Quebec comercializó Assassin’s Creed Syndicate, título que salió a la venta sin los errores de rendimiento de su antecesor. Ambientado a finales del siglo XIX, en plena Revolución Industrial, los desarrolladores recrearon la Inglaterra victoriana con todo lujo de detalles. En muchos sentidos, Syndicate fue la consecución de la fórmula clásica, aunque salió en una época de desgaste de la marca, un aspecto que se reflejó tanto en la opinión de los jugadores como en los análisis profesionales. Casi una década después, Ubisoft ha anunciado una nueva (y anhelada) actualización para el juego.

Aunque el título se lanzó para PS4, Xbox One y PC, las consolas actuales son retrocompatibles. Sin embargo, la versión de PlayStation 5 arrastraba un problema de parpadeo muy molesto que lo hacía injugable. Así estuvo durante bastante tiempo, hasta que los franceses decidieron ponerse manos a la obra y parchearlo. Lo que pocos esperaban es que a estas alturas publicaran una actualización para mejorar su rendimiento en PS5, Xbox Series X y Xbox Series S. A través de un comunicado en su página web, Ubisoft ha anunciado que Assassin’s Creed Syndicate funcionará a 4K/60 FPS en estas plataformas, motivo de peso para que los que no lo hayan probado se animen, pero también para que los que lo hicieron regresen a las humosas calles londinenses.

Dos personajes principales

Por primera vez en la saga, Syndicate permite manejar a dos personajes diferentes. Los protagonistas son los hermanos Frye, miembros de la Orden de los Asesinos e hijos de un maestro de la Hermandad. Mientras que Jacob tiende más a los encuentros violentos directos, Evie prefiere el sigilo y la mente lúcida. A diferencia de Assassin’s Creed Shadows, cada uno de los personajes tiene asignadas misiones específicas, por lo que hay algunas tareas que han de hacerse con uno de los dos protagonistas. Cierto que el árbol de habilidades no se diferencia demasiado —solo hay alguna habilidad específica para cada uno—, pero ambos tienen sus peculiaridades, sobre todo en cuestiones de personalidad.

Mecánicamente se conserva la sencillez del combate, mientras que el parkour resulta muy fluido y gratificante. También mejora la escalada y se incluye un nuevo medio de transporte, los carros de caballos. Manejarlos no es tan sencillo como parece, ya que es fácil provocar el caos, atropellar a inocentes y acabar con varios policías disparando contra el personaje.

Guerra de bandas

El mundo abierto se divide en distintos barrios controlados por una banda criminal liderada por los templarios. Los protagonistas constituyen la banda The Rooks para hacerles frente, reconquistar el territorio y arrebatar Londres a esta peligrosa hermandad. Tras realizar diversas misiones (como las de salvar a los niños de las fábricas), el líder desafía a Jacob y Evie y se produce una guerra por el territorio.

Assassin’s Creed Syndicate esboza muy bien los problemas de la época: la esclavitud que propugnaban los empresarios, el trabajo infantil, la lucha de clases y la pobreza que imperaba en esta ciudad revolucionada por la industrialización. El juego incluye asimismo a personajes históricos como Carl Marx, Charles Darwin o la propia reina Victoria, lo que da una visión más global de la época.

Assassin’s Creed Syndicate marcó el final de la fórmula clásica hasta Assassin’s Creed Mirage. Los siguientes títulos —Origins, Odyssey, Valhalla y Shadows— han apostado por mundos más abiertos y mecánicas RPG.