Dr. Mario 64 nos ha trastocado horas de sueño... y a los que nos rodean

Es puro vicio. Dr. Mario 64 ha pasado muchos filtros antes de ser aceptada como recomendación. No por estar dedicado para adultos, sino porque quien debió darnos la aprobación se pasó la noche jugando a esta maravilla que para muchos es desconocida, pero que ahora no podemos parar de jugar. Dr. Mario 64 tiene la mejor adicción del Tetris clásico con el buen hacer de la Nintendo de principios de siglo y esa combinación nos ha quitado horas de sueño.

No negaremos que desconocíamos la existencia de Dr. Mario 64. De hecho, para nosotros era un personaje más de la plantilla de Super Smash Bros.. Sin embargo, hemos pasado de temer sus pastillas en el juego de lucha a aficionarnos al juego que le hizo debutar. Probamos Dr. Mario 64 un día cualquiera en una casa cualquiera sin esperarnos nada y acabamos perdiendo la noción del tiempo por tanto el enfrentamiento entre nosotros como por el bucle jugable que lo compone.

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Sus mecánicas son sencillas y super conocidas: junta 4 colores en horizontal o vertical para destruir el virus y quién antes acabe con todos los virus gana. Esta premisa tan sencilla como el mismismo Tetris te mantiene enganchado pero ahora en forma de pastillas en Dr. Mario 64. Gracias a su opción multijugador nos tiene noches y noches en vilo pidiendo a nuestra compañera una partida más antes de irnos a dormir. De hecho, tiene más modos como el de destruir virus en específico para lograr la victoria, un juego más rápido que el mencionado anteriormente.

Aficionados a las pastillas

Dr. Mario 64 tiene modo historia y dura apenas unas 3 o 4 horas dependiendo de nuestra habilidad. Lo cierto es que el enemigo final es uno de los más duros que nos hemos enfrentado y un duro desafío para los aficionados del Tetris. Derrotarlo sería más sencillo si no fuera porque (igual que ocurre en el multijugador) con cada combo de dos o más grupos envías aleatoriamente más fichas a nuestro rival. La probabilidad de que te beneficie es de una entre un millón. Lo más probable es que caiga siempre donde peor te venga.

¿Lo que necesitábamos o lo que queríamos?

Es frustrante (más si juegas con personas reales a tu lado que se ríen de nuestra desgracia), pero es tan adictivo que tenemos una relación amor-odio con Dr. Mario 64. Solemos ser bastante tranquilos y pacíficos, pero ni jugando con las personas más tóxicas de League of Legends hemos tenido tantas ganas de arrancar los joysticks. Y aún así, siempre resuena: “¿Una partida más?”

El juego es eso, sin más, pero si la persona que nos enseñó Dr. Mario 64 lleva más de 200 horas jugadas a ese único juego en Nintendo Switch Online (y nosotros estamos por el camino) lo convierte en un videojuego que no sabíamos si recomendaros o no. El tiempo es cada vez más valioso, pero lo es más esa pastilla roja doble que nos hará ganar la partida.

5 motivos para jugar Dr. Mario 64

Dónde puedo jugar Dr. Mario 64

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