Avance
After Us, impresiones. El Viaje de Gaia
El estudio afincado en barcelona, Piccolo Studios, prepara una aventura repleta de sensibilidad medioambiental
El planeta ha muerto, sólo queda los restos de una civilización que no supo conservar lo que tenía. Como Gaia, el espíritu de la luz, es nuestra misión salvaguardar en el arca el espíritu de los seres de la naturaleza para conservar la luz del mundo que fue. Ese es el argumento que se deduce del preciosista proyecto barcelonés de parte de Piccolo Studios, un juego cuyas convincentes impresiones iniciales se mantienen a lo largo de la demostración que hemos podido probar.
El atractivo evidente de After Us está en su arte y en el planteamiento de ese mundo demacrado por el que la luminosa Gaia se mueve a duras penas. La base jugable está principalmente puesta en el movimiento y el plataformeo, con un poco de acción que a su vez está centrada en la esquiva y la evasión. Si a eso le sumamos un elemento de exploración y narrativa, encontramos un juego de aire evocador, de los que piden ser jugados con los cinco sentidos para captar cada momento del sentido artístico que se le pretende dar.
El comienzo es idílico, con una joven Gaia disfrutando de su paraíso particular con la esencia de los animales libres a su alrededor. Pero estos, de repente, comienzan a desaparecer y su madre le pide que tome su corazón y se arme de valor para liberar las esencias de las criaturas atrapadas en el mundo. De aquí pasamos a un escenario muy diferente, un vertedero de vehículos corroídos y carreteras distorsionadas que nos marcan el tétrico camino por el que tenemos que avanzar en nuestra búsqueda.
Un plataformas preciosista
After Us se muestra comprometido con su identidad como plataformas 3D, dándole a Gaia una buena colección de herramientas de movimiento: salto, doble salto, capacidad de planeo después del doble salto, un impulso en el aire, carrera para saltos más largos (y de menos altura). Además, la protagonista es capaz de lanzar una poderosa descarga de vida a su alrededor, con la que puede hacer brotar la vida alrededor unos segundos, llenando los tristes escenarios de luz y vegetación momentáneamente. Lejos de ser algo cosmético, esta habilidad permite a Gaia limpiar zonas de un líquido negro y espeso que obstaculiza su paso -lo que por momentos nos recordaba un poco a la mecánica de Mario Sunshine-, además también le permite hacer brotar árboles fijos en ciertos puntos.
El plataformeo parece ser el elemento principal de After Us, aunque también hay lugar a la exploración. El mapa no es estrictamente lineal y las rutas a los puntos en donde se encuentran las almas de las criaturas desaparecidas no siempre son tan evidentes, así que toca observar y experimentar un poco. Hay numerosos peligros alrededor de Gaia y la muerte está siempre a la vuelta de la esquina, ya sea por caídas o por meternos donde no debemos.
Artísticamente, las primeras impresiones son una delicia. El personaje de Gaia cuenta con un gran diseño y una convincente expresividad, que contrasta con los tristes escenarios por los que pasa, repletos de simbolismo. En un punto por ejemplo, encontramos a una masa de gente congelada y ennegrecida, en posición de adoración alrededor de lo que parece una torre de extracción de petróleo sobre la que vuelan bolsas de plástico que nos atacan si no las esquivamos. No dudamos de que será una de las muchas alegorías ecologistas que nos encontraremos en After Us. Se nota además que es un juego pensado 100% para la actual generación, por lo que tiene la riqueza de efectos y la densidad de detalles necesaria para darnos paisajes que nos invitan a capturar a cada paso.
El juego llegará a los usuarios el próximo 23 de mayo para PS5, PC, Xbox Series X y Series S.