¿A qué juego hoy?
ABZÛ, un respiro submarino para relajar cuerpo y mente
El juego del director artístico de Journey, Matt Nava, sigue siendo una experiencia gratificante con una estética que no pasa de moda
Matt Nava se hizo un nombre en el videojuego gracias al personal e icónico trabajo realizado para ThatGameCompany, en donde cautivó al público con una particular sensibilidad a la hora de dar forma a Flower y, muy especialmente, a Journey, que todavía hoy se mantiene como un brillante ejemplo de como la estética puede mantener vigente un juego al margen del avance gráfico y tecnológico. Más tarde decidiría establecerse por solitario y crear Giant Squid, siendo ABZÛ su opera prima y otro gran ejemplo de estética sobre tecnología gráfica bruta.
A pesar del cambio de estudio, el instinto jugable de Nava estaba ligada a la clase de experiencias en las que había participado en el estudio de Jenova Chen: contemplativas y evocativas, ignorando el concepto de reto o desafío para crear una experiencia de fricción mínima en el que el foco principal estuviera puesto en la experiencia audiovisual. En ABZÛ no puedes morir, no puedes perderte con una exploración limitada y controlada, con una dirección clara en todo momento que no pone cortapisas a nuestro fastuoso viaje submarino.
Una belleza que no cesa
La historia de ABZÛ es tan minimalista como la propia experiencia jugable. Comenzamos poniéndonos en el papel de un buzo, aparentemente desmayado en el mar. Una vez despertado, comenzamos un viaje de descubrimiento en el que la razón de ser del protagonista, sus orígenes y propósito, se narra de forma velada a través de pequeñas escenas y detalles del fondo submarino que recorremos sin limitaciones de oxígeno. Los controles se limitan al movimiento libre debajo del agua, un movimiento de propulsión y algunas marcadas interacciones, por lo que resulta totalmente intuitivo y accesible para todo el mundo.
Dejadas en la esquina consideraciones jugables y narrativas, el verdadero propósito de ABZÛ es capturar nuestra imaginación a través de su sobresalientes cualidades audiovisuales. En lo visual, el mundo creado por el estudio de Santa Monica es una auténtica delicia de principio a fin. Constantemente vamos cambiando de escenarios y situaciones, ya que la propia linealidad de la experiencia nos empuja imperceptiblemente a ir avanzando de forma constante. Hay toda clase de escenarios submarinos repletos de fauna y flora marina, además de elementos artificiales como ruinas y otros elementos más vinculados con la historia y el viaje personal del protagonista.
La variedad de situaciones, elementos, colores y sensaciones resultan abrumadoras, con diferentes cambios rítmicos y tonales que mantienen el interés. El viaje está repleto de momentos memorables, como cuando entramos en una corriente submarina, avanzando rápidamente junto a miles de otras criaturas al son de una música que gana intensidad. O cuando compartimos espacio con gigantescas ballenas, nadando a su lado y escuchando sus cantos. La animación está a la altura del encomiable trabajo visual, formando un conjunto que nos regala constantemente los ojos. El hecho de que hayan pasado ya casi ocho años desde su lanzamiento no le ha quitado ni un ápice de belleza o interés a su maravillosa concepción.
Al mismo nivel de excelencia se muestra la banda sonora de Austin Wintory, que repetía junto a Nava después de ser ambos partícipes de esa cumbre sensorial que fue Journey. La música, con una clara vocación submarina, acompaña a la experiencia en todo momento, contribuyendo a una inmersión constante en donde se recrea sensaciones de quietud, asombro y contenida emoción, perfectamente a la par con cada momento. No en vano fue una de las mejores bandas sonoras de su año, estando nominada en su categoría a “Mejor Álbum de Banda Sonora Original” en la Game Audio Network Guild en 2017, nominada en los Premios BAFTA de Juegos 2017 en la categoría de “Música”, y nominado en los D.I.C.E. a “Logro Sobresaliente en Composición Musical Original”, un galardón que le arrebataría Doom. Sí ganaría el premio de la International Film Music Critics Association en 2016 por “Mejor Partitura Original para un Videojuego o Medios Interactivos”.
5 motivos para jugar a ABZÛ
¿Dónde se puede jugar a Dead Island 2 y cuánto cuesta?
ABZÛ está disponible en PS4, PC, Xbox One y Switch, con un precio habitual de 20€ en todos los formatos si no está en rebajas. Forma parte del catálogo de Playstation Plus Extra, por los que los abonados a Extra o Premium tienen acceso inmediato a él tanto en PS4 como en PS5.
- Aventura
ABZÛ, desarrollado por Giant Squid Studios y distribuido por 505 Games para PC, PlayStation 4 y Switch, es una aventura inmersiva que se desarrollará en las profundidades marinas creada por el director artístico de Journey.