Sea of Thieves: The Legend of Monkey Island hace honor a su nombre

Sea of Thieves es un mar de posibilidades para las aventuras más inesperadas. A lo largo de los cinco años que lleva desde su lanzamiento, ha encontrado la forma de mejorarse y seguir ofreciendo experiencias satisfactorias a sus usuarios. En una época en que el futuro está en el juego como servicio, el título de Rare ha encontrado su lugar en un mar donde es matar o morir. Esto no se debe sólamente a un constante mantenimiento y a las actualizaciones que el título ha recibido, sino a las sorpresas y colaboraciones que ha tenido en el camino.

Hace un par de años, fuimos sorprendidos con una colaboración que nadie esperaba, pero le quedaba como anillo al dedo. La aventura con Piratas del Caribe soltó los gritos y conmoción de más de un fan de la atracción de los parques de Disney y de las películas que inspira, y vaya que fue un viaje que supo mezclar ambos universos de una forma sumamente sencilla. Este año, y siendo más discreto, sus desarrolladores anunciaron una colaboración con uno de los títulos clave de piratas en el mundo de los videojuegos: The Secret of Monkey Island. Previo a su lanzamiento, tuvimos la oportunidad de jugar el primero de los tres episodios con los que contará esta aventura y estas son nuestras impresiones.

La Leyenda de Monkey Island

Pero primero, hay que hablar un poco de qué es Monkey Island. Siendo sinceros, es una franquicia que tal vez es vieja y desconocida para nuevas generaciones, pero que su relevancia en la historia de los videojuegos es de suma importancia. La historia sigue a Guybrush Threepwood en convertirse en el mejor pirata de una versión muy particular y diferente del Caribe. La franquicia se trata de una aventura gráfica que sigue el formato del point-and-click, el cual usaba en muy innovador mouse -para ese entonces- para tomar decisiones, investigar, resolver acertijos, entre otras cosas. La franquicia cuenta con un estilo muy particular, con un humor que va del sarcasmo al uno muy simple, y en ocasiones rompiendo la cuarta pared para poder rayar en lo absurdo.

¡Mira detrás de ti, un mono de tres cabezas!

Teniendo este pequeño contexto, continuemos. Al igual que los Tall Tales de Piratas del Caribe, podremos activar la historia de Monkey Island en un nuevo puesto en la playa de algunos de los Puestos de Avanzada que hay en el mapa. Desde aquí comenzamos con las referencias a Monkey Island, pues lo activaremos con Kate Capsize, personaje clave de Monkey Island 2. Aquí es donde nos enteramos de la conexión entre Sea of Thieves y estos invitados, partiendo a través de los mundos para llegar a nuestro destino: la isla Mêlée.

A partir de este momento, y sin dar ninguna revelación importante, Sea of Thieves se convierte en una carta de amor a esta franquicia. Y es que la gran mayoría de las mecánicas, armas o herramientas que usualmente usamos quedan de lado ante lo que se sucede con esta historia, volviendose una experiencia que emula los elementos de una aventura gráfica de antaño, donde tendremos que ir hablando con los varios personajes que encontremos, obteniendo información, encontrando otros items, haciendo una cadena de favores y solucionando acertijos para poder seguir avanzando en la historia. Y es que al llegar a la isla Mêlée, nuestro objetivo principal será llegar a la casa del Gobernador y conocer al famosisimo Guybrush Threepwood, una tarea que no será tan sencilla.

Y es aquí donde la isla Mêlée cobra su esplendor. Para aquellos que jugaron Secret of Monkey Island, por fin podrán recorrer este lugar en particular completamente en 3D. El nivel de detalle es impresionante, desde el Bar SCUMM con los personajes totalmente recreados, hasta la iglesia o la mansión del gobernador están fielmente llevados a un ambiente totalmente actualizado.

A lo largo de la aventura tuvimos que realizar varias actividades, desde escuchar una enorme cantida de línea de diálogo (siendo una de las grabaciones más largas para una aventura de Sea of Thieves), conseguir dinero para comprar un disfraz, servir grog especial, visitar la prisión, engañar guardias entre otras actividades. Es importante destacar que estas líneas de diálogo cuentan con el mismo humor característico de la serie haciendo que todas las situaciones sean súmamente divertidas. Algo que también llamó la atención fue que gran parte de nuestro movimiento fue sencillo, teniendo que ir y venir, regresar, volver a hablar otra vez con algún personaje y hasta en algunos casos nos terminamos adelantando a algunas pistas o peticiones que presentaba el juego.

Estas actividades, en un principio, pueden ser complicadas considerando que vienen adaptadas de un juego que es para un sólo jugador, y Sea of Thieves te permite realizarlo hasta con una tripulación de 4 jugadores. Es normal que haya una posibilidad que quieras leerlo o investigarlo todo. Dentro de nuestra prueba, lo jugamos entre 2 y pudimos irnos repartiendo actividades, y aunque no escuchamos al 100% todas las líneas de diálogo de todos los personajes, ayudó a que la aventura fuera un poco más rápida y sencilla de realizar.

Junto a esta aventura, también la tienda dentro de Sea of Thieves, el Emporio del Pirata, se actualiza con algunos cosméticos como trajes inspirados en LeChuck, el gran villano de la serie, así como un paquete para personalizar tu barco, así como algunos recuerdos que se puede desbloquear después del paseo en la isla Mêlée.

En las cerca de 2 horas que dura esta primera aventura, uno puede darse cuenta del cariño y atención de detalle que el equipo de Rare tuvo con esta expansión. La enorme cantidad de diálogos e Easter Eggs que tiene esta aventura tiene lo suficiente para satisfacer a aquellos jugadores que han controlado piratas en los videojuegos desde hace ya algunas décadas. Aún sin ser fan o conocedor de Monkey Island, queda más que claro el trabajo y cariño que se tuvo en este primer capítulo, y hasta curiosidad de conseguir algunas de las versiones más recientes de esta franquicia.

El primer Tall Tale de The Legend of Monkey Island ya está disponible en Sea of Thieves a partir de hoy, 20 de julio,, con otros dos más llegando más adelante.