‘Los caballeros oscuros de acero’. Unos Batman y Superman alternativos situados en la Edad Media

‘Los caballleros oscuros de acero’ arranca con una escena mil veces repetida, la destrucción de Kripton y la huida del planeta de una nave espacial. Su destino la Tierra, pero a partir de la página 4 el lector descubre asombrado que no está ante la historia de siempre: en el artefacto no viaja un bebé llamado Kal-L, sino sus progenitores y no ha aterrizado en Smallville sino en un lugar indeterminado cerca de un castillo.

En unas pocas viñetas Taylor descubre una nueva realidad, los personajes están en un reino de la Edad Media donde los El gobiernan como monarcas tras suceder a la dinastía Wayne. Un curioso cambio de papeles en los que hay tres príncipes: los hijos de los reyes, Kal-El y Zala, y un bastardo, Bruce Wayne.

Respetuoso con el universo DC

Aunque Taylor deforma a su antojo la realidad y los principales personajes de DC, el lector tiene en todo momento la sensación de encontrarse en territorio conocido. Es inevitable el juego de encontrar semejanzas y diferencias en ellos, pero Taylor va dejando migas que acercan a los héroes a su verdadera naturaleza. Batman es un justiciero que persigue a aquellos que practican la magia; Oliver Jonas Queen es un prodigioso arquero que vive en el bosque; Constantine es un asesor y profeta que ha anunciado el fin de los reinos... Y así vemos desfilar a Wonder Woman, Rayo Negro, Dick Grayson, Jason Todd, Tim Drake, Stephanie Brown, Lex Luthor, Banshee, Harley Queen, Alfred, Los Nuevos Titanes... todos ellos con roles bien distintos a los habituales.

Una gran guión

Taylor no se limita a enseñar versiones alternativas de sus personajes, sino que crea una buena historia con muchas dosis de intriga donde algunos de sus protagonistas no son quienes parercen ser. Durante los doce números que duró la miniserie da varios giros importantes de guion enfrentado al lector ante situaciones novedosas, como el origen kriptoniano de Batman. El no tener que ceñirse a un marco establecido le permite jugar con los personajes presentándolos desde prismas inéditos; por ejemplo, Harley Queen, la bufón del reino aquí es un elemento de estabilidad y sabiduría.

Un dibujo orientalizado

La joven artista indonesia Yasmine Putri es la encargada de llevar a buen puerto la mayoría del proyecto. Emigró a Estado Unidos en 2012 y tres años después ya era colaboradora de Marvel y DC, principalmente como portadista. Fan confesa del ‘Akira’ de Katsuhiro Otomo, su estilo tiene muchas influencias del manga: ojos grandes y expresivos, figuras esbeltas y un alto grado de detalle en el fondo de las viñetas. A ello añade algunas características propias del comic de superhéroes estadounidense: encuadres rompedores y atractivos, estructuras diversas para controlar el ritmo narrativo y un buen dominio de las secuencias de acción.

Conclusión

‘Los caballeros oscuros de acero’ son mucho más que los ‘What if?’ de Marvel, aquí hay un propósito de crear un universo diferente y persistente en el que lector reconoce a sus héroes, pero los disfruta de una manera diferente. La historia de conspiraciones palaciegas es lo suficientemente buena para que el lector avance a toda máquina para descubrir qué hay detrás de lo que se ve de primeras. Situar a Batman y Superman en la Edad Media es un acierto, como lo es cambiar un poco, o no tan poco, sus roles tradicionales. Un cómic que no entrará en la historia como uno de los mejores de ambos personajes, pero que su lectura resulta muy entretenida.

Ficha

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