Se cumplen 25 años de ‘Eyes Wide Shut’, la obra más polémica y controvertida de Stanley Kubrick

Stanley Kubrick dejó este mundo el 7 de marzo de 1999, algunos meses antes del estreno de su obra póstuma ‘Eyes Wide Shut’. Esta cuenta, principalmente, una relación de pareja idílica que se ve amenazada por el descontrol, los celos y el libertinaje de ambos, especialmente por parte del doctor Bill Harford (Tom Cruise). Junto a Nicole Kidman, que era su mujer en ese momento, protagonizaron una de las cintas más controversiales de los últimos tiempos debido a los temas que toca. Kubrick tiene en su haber películas no muy convencionales y que escapaban del guion del Hollywood de su época, como ‘La naranja mecánica’, pero con ‘Eyes Wide Shut’ llegó a otro nivel. Hoy, 25 años después de su estreno en España, la cinta sigue siendo motivo de discusión por lo que se ve en pantalla y por la muerte del propio director meses antes.

Donde termina el arcoíris

De primeras, el argumento de la película es muy simple. Alice (Kidman) y Bill (Cruise) son una pareja que vive en Nueva York y que son invitados a una fiesta de Navidad organizada por uno de los pacientes de Bill, ya que este es médico. En ella, Alice y Bill son seducidos por un par de jóvenes modelos y por un doctor húngaro, respectivamente. Cuando llega la noche, ambos hablan sobre temas íntimos y Alice le confiesa que ha pensado dejar seriamente a Bill al fantasear con un oficial de la Marina que conoció en vacaciones. Angustiado, Bill se va de la casa de madrugada para atender a un cliente. A partir de aquí, nada es como parece en la película y nos metemos de lleno en un terreno completamente desconocido.

Visualmente, la película juega principalmente con dos colores; el rojo y el azul. Cada uno tiene un simbolismo propio en ‘Eyes Wide Shut’. El rojo representa todo lo relacionado con lo pasional y visceral, además del peligro. Por el contrario, el azul es la nobleza, la sinceridad, la honestidad y la tranquilidad. No obstante, Kubrick juega con ellos durante toda la cinta, ya que muchos de los objetos son de ambos colores. Cuando el rojo y el azul se juntan se produce la locura total, llevando a los personajes alrededor de un viaje del que no pueden salir.

Y, claro, luego está el arcoíris. El arcoíris es el delirio final, el cual se muestra en dos ocasiones muy marcadas en la película. La primera de ellas es en la propia fiesta del principio, en la cual dos jóvenes intentan seducir a Bill llevándolo “donde termina el arcoíris”, una insinuación sexual que tendrá su rima más adelante. La segunda vez en la que se explicita es en la tienda de disfraces, la cual se llama literalmente ‘Rainbow’. En cuanto uno va entrando en la película, se irá dando cuenta de lo que esconde este establecimiento.

Nick y la orgía

En la fiesta inicial, Bill se encuentra con un antiguo compañero, Nick, el cual ahora es pianista. Estos se encuentran en un bar un tiempo después y, sutilmente, Nick le revela que toca usualmente en un lugar con los ojos tapados, ya que algo horrible ocurriría si viera algo. A Bill, que sucumbió a la locura aquella noche tras la confesión de Alice, quiere llegar al fondo de la cuestión. Lo que sucedió después es una de las mejores escenas de la historia del cine. Stanley Kubrick consigue poner al espectador en una situación de tensión constante mientras no pueden creer todo lo que están viendo.

La mansión enorme, la orgía a escalas nunca antes vistas, las máscaras sacadas de la película más terrorífica que uno se pueda imaginar y el descubrimiento de Bill por parte de los líderes son imágenes que están en el imaginario colectivo del cine en general. Además, la música de acompañamiento parece que es una asesina en sí misma que va a atrapar a Bill en su viaje por las calles de Nueva York. Martin Scorsese, que ha puesto en escena la Gran Manzana en gran parte de sus películas, dijo que la representación de Nueva York por parte de Kubrick se parecían más a un sueño de lo que es la ciudad que a las calles reales de Nueva York.

Esta escena ha sido controversial ya que desde muchos sitios se ha declarado que la muerte del director estaba relacionada con ella, ya que mostraba el poder de esta especie de logia en la sombra y la cantidad de personalidades importantes que pertenecen a ella. Sin embargo, nunca se ha demostrado que todo esto estuviera ligado. Lo que sí es cierto y bien sabido por todos es que ‘Eyes Wide Shut’ es una de las mejores películas de Stanley Kubrick.

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