Titan, así es el sumergible desaparecido durante la inspección del Titanic

La tragedia vuelve a 600 kilómetros al sureste de la costa de Newfoundland. Llevamos un día pendiente de lo que iba a ser una expedición de lujo para los tripulantes del Titan, el sumergible que ha perdido el contacto con la superficie a una hora y 45 minutos de su descenso para ver de primera mano el Titanic. Te contamos cómo es el sumergible al que han empezado las labores de rescate.

250.000 dólares por montarse en el Titan

La historia del transatlántico Titanic es una de las historias más célebres. Un barco gigantesco en su época que, por desgracia, quedó partido en dos en el Océano Atlántico dejando tras de sí miles de muertos en una fatídica noche de 1912. Sus misterios siguen en su interior, y la expectación por conocer más del naufragio atrae a muchos curiosos.

Sin embargo, solo unos pocos han tenido la ‘suerte’ de tener acceso al Titan, el sumergible que prometía echar un vistazo al Titanic de cerca. Por desgracia, la conexión se ha perdido y los equipos de rescate ahora trabajan a contrareloj con el fin de salvar a los integrantes de la expedición entre los que se encuentran el responsable de la compañía OceanGate Expeditions, Stockton Rush, y el explorador Paul Henry Nargeolet.

Cómo es el Titan

Titan es el nombre que recibe el sumergible al que los equipos de rescate están intentando acceder los servicios de rescate. Puede que sus seis metros de eslora sean mucho si los ves en la vida real, pero se quedan cortos en el vasto océano. El trabajo de la compañía ha sido posible gracias a la colaboración de entidades de renombre como la NASA o Boeing, quienes tienen experiencia en la fabricación de aeronaves.

La estructura estaba pensanda para aguantar nada menos que 4.000 metros de profundidad, lo que sería suficiente para ver el Titanic que está hundido a 3.800 metros. La diferencia no es mucha, pero se supone que aguantará. Otra de las empresas que ha estado presente es nada menos que Starlink, la empresa de Elon Musk que ofrecía el enlace de telecomunicaciones y que se perdió el pasado domingo.

Sin embargo, comparte dos curiosidades de lo más interesantes y tienen que ver con la forma de moverse y cómo es capaz de recibir las coordenadas. Empezamos por esto último, ya que el Titan no tiene GPS. Es el Polar Prince, el barco de superficie el que va guiando a la nave por el agua mediante nada menos que SMS, una práctica que llama la atención y que reduce la capacidad de encontrar el naufragio a la primera.

La segunda es sorprendente y es que cualquiera pensara que tiene un cuadro de mandos de lo más sofisticado, pero es todo lo contrario. Resulta que es un gamepad de la marca Logitech lo que utilizan para mover el Titan, lo que hace más intuitivo y sencillo el manejo de una nave tan grande. Recordemos que en este sentido no es la primera que tiene algo parecido, ya que 2018 ya hablábamos de submarinos nucleares que se controlaban con el mando de la Xbox.