La impresionante imagen cercana de una estrella muriendo que sirve para saber más sobre su ciclo de vida

El último suspiro de una estrella es uno de los fenómenos más impresionantes del cosmos. Más allá de ser el mero final de su existencia, este evento ofrece pistas valiosas sobre los ciclos cósmicos que rigen la formación y la transformación de las galaxias, ayudándonos a desentrañar los misterios del universo. Una imagen cercana de una estrella muriendo, capturada por telescopios avanzados, muestra al astro en las últimas etapas de su vida, un proceso fascinante y a menudo invisible desde la Tierra. Esta instantánea es de gran importancia, pues representa una oportunidad única para estudiar cómo las estrellas nacen, viven y mueren, ayudándonos a comprender mejor los ciclos cósmicos que forman y transforman las galaxias.

Así es la primera imagen cercana de WOH G64, una estrella a punto de morir

El pasado 21 de noviembre de 2024 se pudo reconstruir la primera imagen cercana de la estrella WOH G64, que se encuentra en proceso de colapso y “muerte” tal y como informa ScienceNews. Este astro, que tiene un tamaño de alrededor de 1.500 veces nuestro Sol, se sitúa a 160.000 años luz de la Tierra. Su ubicación es la Gran Nube de Magallanes, una pequeña galaxia que orbita alrededor de la Vía Láctea, que es donde se ubica el Sistema Solar.

Hasta ahora, WOH G64 parecía imposible de fotografiar, ya que habría requerido un telescopio de más de 100 metros de longitud como mínimo para tal fin. No obstante, se ha podido recrear una imagen de esta estrella a punto de morir gracias a las imágenes parciales de cuatro telescopios diferentes de 1,8 metros de largo. El resultado nos permite apreciar con gran precisión el aspecto que tiene una estrella masiva que está agotando su combustible nuclear y atravesando las etapas finales de su evolución previas a su eventual colapso o explosión. WOH G64 se muestra emitiendo materiales como gases y partículas de polvo de estrellas que sugieren que está en esta etapa evolutiva.

Esta instantánea es esencial para poner en contexto el ciclo de vida de las estrellas: desde su nacimiento hasta que, en función de su categoría, definida por rasgos como su masa y tamaño, agotan su “combustible” y eventualmente explotan pudiendo formar agujeros negros o estrellas de neutrones, o simplemente enfriándose gradualmente y apagándose con el paso del tiempo como en el caso de enanas blancas como el Sol.

Es importante señalar que la imagen que vemos de WOH G64 fue tomada hace 100.000 años debido a la distancia de la estrella. Esto significa que, en el presente, la estrella podría haber dejado de existir, pero no podremos saberlo hasta dentro de miles de años, ya que la luz que nos llega es la que salió de ella hace tanto tiempo.

¿Qué sucede cuando las estrellas mueren?

Cuando una estrella llega al final de su vida, el tipo de muerte que experimenta depende de su tamaño y masa. Las estrellas más pequeñas, como el Sol, pasan por una fase de expansión antes de expulsar sus capas externas, creando una nebulosa planetaria. El núcleo restante se convierte en una enana blanca, una esfera densa de carbono y oxígeno que, con el tiempo, se enfría y se apaga. En cambio, las estrellas más grandes explotan en una supernova, un estallido de gran magnitud que libera una cantidad de energía colosal.

Estas explosiones pueden dar lugar a la formación de un agujero negro, una región del espacio con gravedad tan fuerte que nada, ni siquiera la luz, puede escapar de ella. Otra posibilidad es que los restos de una supernova formen una estrella de neutrones, un objeto extremadamente denso donde los neutrones se compactan en un volumen reducido.

Las supernovas, además de marcar el fin de una estrella, son fundamentales en el ciclo de formación de nuevos elementos químicos. Durante estas explosiones, se pueden crear elementos pesados como el oro y el uranio, los cuales luego se dispersan en el espacio, enriqueciendo las futuras generaciones de estrellas y planetas, e incluso propiciando el origen de la vida tal como la conocemos.