Nier Automata no está de relleno en Switch: lo hemos jugado y nos ha sorprendido

2017 es sin duda uno de los años más importantes de Nintendo, momento en el que publicó Nintendo Switch junto a Breath of the Wild. Pero ese año fue especialmente prolífico y se lanzaron algunos de los mejores videojuegos de los últimos tiempos. Dos de ellos, Nier Automata y Persona 5, llegarán por primera vez a la consola híbrida de Nintendo este otoño. Y en el caso del juego de Square Enix y Platinum Games, podemos decir que el port va en serio. Si alguien esperaba algo para salir del paso, puede tranquilizarse. Lo hemos jugado y nos ha sorprendido.

No vamos a descubrir ahora Nier Automata y todo lo que supone a nivel narrativo o en lo jugable. Uno de los mejores títulos de la última década que ha sido venerado en todas las plataformas en las que ha salido. La llegada a Switch se planteó con un pequeño arqueo de ceja pensando que a ver como salía. Las especificaciones técnicas nos hablaron de 1080p en Dock y 720p en portátil pero 30 frames por segundo. ¿Y bien?

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Vaya por delante que nada es mejor que jugar a Nier Automata a 60 frames por segundo. Y que eso lo hemos podido hacer también en Steam Deck. Ok. Pero tras jugar a la versión de Switch en el Square Enix Plays 2022 en Londres, podemos decir que la entrega que llegará para la consola de Nintendo es resultona y convincente. Lo primero que pensamos en coger la consola en modo portátil fue: "Ostras, pues se ve muy bien". Y esa sensación no desapareció en toda la sesión que hicimos.

La parte que hemos podido jugar es toda la referente a la introducción, que va desde los inicios a bordo de la nave en modo shoot'em up hasta el final en el que acabamos luchando con un robot gigante y 2B y 9S se acaban autoinmolando.

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Eso significa que hemos tenido tramos en los que hemos luchado con varios robots a la vez (dentro y fuera de la fábrica), que hemos luchado con un enorme robot gigante con sierras en las manos que ocupan toda la pantalla y que en todos esos casos, el framerate se ha mantenido estable -alguna caída hemos visto, pero menor- y la resolución se ha mantenido sólida.

Hemos jugado en una Switch Oled y el título luce especialmente bien en esta máquina. Tanto en las escenas como en el fragor del combate todo nos parece que aprovecha las capacidades -ya limitadas a estas alturas- de la máquina en lo que de momento parece ser un buen port. Los colores, el juego de blancos y negros y los efectos nos han hecho asentir con la cabeza, la verdad. Si se mantienen los FPS estables seguirán siendo 30fps, pero será una experiencia de juego sólida para quienes no lo puedan jugar en otro sitio.

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Más que lo técnico, los joy-cons

De hecho, lo que menos cómodo nos ha parecido de Nier Automata en Switch ha sido precisamente los joy-cons. Como sabéis, se hace un uso constante de los botones superiores y los gatillos mientras disparamos con el pod, esquivamos... Y ahí es verdad que el control se nos ha hecho algo más incómodo, pero no es tanto cosa del juego sino de los propios mandos (y eso en dock con un Mando Pro no hay problema). En todo caso, es una percepción más personal y de tacto que puede cambiar según cada uno.