¿Quiénes es Arondir y los elfos silvanos de Los Anillos de Poder?
Repasamos quiénes son los misteriosos elfos que protegen a los humanos en la serie de El Señor de los Anillos y el romance entre Arondir y Bronwyn.
Una de las tramas protagonistas de los primeros episodios de Los Anillos de Poder tiene que ver con el romance prohibido entre Arondir, un elfo silvano, y Bronwyn, la curandera de las tierras del sur. Los escarceos entre ambos tienen lugar mientras Arondir y el resto de su división permanecen destinados en el pueblo de Bronwyn. Ahora bien, ¿qué hacen allí? ¿Por qué esa rivalidad entre los humanos y los orejas puntiagudas? ¿De dónde salen dichos personajes y qué papel juegan en el Legendarium de Tolkien? Vamos a descubrirlo.
¿Quiénes son los elfos silvanos?
A menudo veréis que Arondir es descrito no sólo como un elfo, sino como un elfo silvano. Y os preguntaréis, ¿qué diferencias hay? ¿Qué otros elfos silvanos conocemos? Es más sencillo de lo que parece. Los elfos silvanos, también llamados elfos del bosque, se diferencian de los altos elfos por su procedencia y la conexión que ésta les otorga con la naturaleza. En El Hobbit: La desolación de Smaug, cuando Bilbo y su compañía ingresan en la tierra de los elfos silvanos, Beorn los describe como "menos sabios" que el resto de elfos, más predispuestos a la política, "pero más peligrosos", más diligentes y hábiles en combate.
Su letalidad queda clara en El Hobbit: La Batalla de los Cinco Ejércitos, en el que vemos en acción a un batallón de elfos silvanos dirigido por el Rey Thranduil, quien también deja clara su relación con la naturaleza al aparecer a lomos de un ciervo gigante. Y por supuesto su mayor icono hasta la fecha es Tauriel, el personaje interpretado por Evangeline Lilly. Aunque en esa batalla también luchó junto a ellos y les debe su formación y gran parte de sus movimientos de combate, Legolas nunca ha sido considerado un elfo silvano por motivos de ascendencia.
¿Quién es Arondir de Los Anillos de Poder?
Por desgracia, Arondir y Bronwyn son personajes creados única y exclusivamente con motivo de la serie y no salían en las historias del Tolkien, así que su historia está por escribir. (Aquí repasábamos qué personajes son originales y cuáles de los libros). En cualquier caso, las relaciones entre elfos y humanos no son nuevas en la Tierra Media. En la trilogía de Jackson asistimos al amor entre Arwen y Aragorn, siempre censurado por Elrond, y en las películas del Hobbit se fue incluso más allá, y en vez de humanos, la pasión surgía entre Tauriel y un enano, Kíli.
Arondir y el resto de elfos silvanos fueron dispersados por la Tierra Media siguiendo órdenes del Gran Rey Gil-Galad, quien temía que Sauron tomara el relevo de Morgoth y sometiera al continente convirtiéndose en su nuevo Señor Oscuro. Temen que los orcos proliferen y que los humanos permitan campar a sus anchas y crecer al cambiaformas. Los años de paz han hecho que los humanos vean esta ayuda y protección adicional con rencor, como si estuviesen escalvizados, vigilados y siendo infravalorados por los elfos.
La serie arranca en un momento interesante, justo aquel en el que los humanos, tras dejar claro que no quieren seguir acogiendo a los elfos en sus tierras, ven como estos se marchan y retiran, y lo hacen justo en el momento en que el mal resurge y los necesitan. Queda descubrir en el resto de capítulos de Los Anillos de Poder si la relación entre Arondir y Bronwyn es capaz de florecer en ese clima hostil y si ambas razas son capaces de superar sus diferencias para luchar contra la nueva amenaza en ciernes.