Al creador de Spy x Family no le gusta Anya ni el resto de personajes: "no son lo que quería dibujar"
Tatsuya Endo admite que no siente ningún vínculo con Anya o la familia Forger porque nunca fueron lo que quería dibujar, sino lo que el mundo quería ver.
Pensábamos que todo el mundo estaba enamorado de Anya, pero parece que no, parece que hay una persona a la que no le gusta la familia Forger y es precisamente el creador de la misma. Tatsuya Endo, el mangaka tras Spy x Family, ha confesado que no siente ningún tipo de vínculo por los protagonistas de su obra más conocida.
"Tiré la toalla con la idea que quería dibujar. Me rendí y acabé dibujando lo que el mundo quería ver, no yo, y por eso no estoy muy unido a sus personajes". Endo reconoce que trató de agradar a su editor, quien no paraba de repetirle que los mangas que triunfaban combinaban personajes "cool" con otros "cute", por lo que cambió y cambió el diseño de Loid y Anya hasta convencer a éste.
El mangaka ya había dado rienda suelta al estilo que le gusta en varias de sus creaciones (Ishi ni Usubeni o Tetsu ni Hoshi, por ejemplo), pero ninguna de ellas había terminado de calar entre el público. Con Spy x Family ocurrió lo contrario, fue rendirse a lo mainstream y besar el santo.
Endo asegura tomárselo con humor, pero parece que todavía le carcome un poco por dentro. En el pasado también ha admitido que tampoco es que le gustan especialmente los espías, pero que la idea de tener una identidad oculta le gusta y se centra y aferra a esa emoción.
"Spy x Family es como un trabajo de rehabilitación para mí como mangaka", explica Tatsuya Endo, aclarando que su trayectoria le había sumido en una depresión a la que combate trabajando en la familia Forger, cuyo éxito le motiva a seguir adelante.
¿Merece la pena Spy x Family?
Elegido uno de los 5 mangas que debes leer este verano, Spy x Family narra la historia de Twilight, el mejor espía de Berlín en la Guerra Fría. En estos tiempos convulsos, a Twilight (también conocido como Loid Forger) se le encarga la misión más complicada de su carrera: formar una familia. Así podrá matricular a su hija en un colegio de élite, ir a recogerla al mismo y hacerse amiguito en ese momento de otro los padres con un retoño matriculado en el centro. No hay otro modo de aproximarse al objetivo de la misión. Pero claro, el problema está en que Loid tiene siete días para conseguir mujer e hija. Una urgencia que le llevará a una extrañísima huérfana con poderes telepáticos, Anya, y a casarse sin saberlo con una asesina profesional, Yor (alias Thorn Princess). Se forma así la familia… ¿perfecta?
Tanto el manga como el anime Spy x Family (de parón durante varios meses) parten de esa base para crear una comedia costumbrista en la que Loid, al contrario que Tatsuya Endo, va poco a poco desarrollando sentimientos hacia su familia “de pega”. Sólo Anya, quien puede leer la mente, sabe la verdadera identidad de Twilight y Yor, a quienes tratará de proteger y mantener unidos a su manera. El humor se esconde en el día a día de cualquier familia: entrevistas de admisión, clases de educación física, visitas al zoo y, en general, la rutina.
