Las nuevas tarjetas de Samsung podrán grabar hasta 16 años de video sin parar
Las nuevas tarjetas Pro Endurance de Samsung están pensadas para grabar horas y horas de video sin parar.
Samsung no solo se dedica al hardware más potente y popular como son los smartphones u ordenadores. La firma también pone en diferentes dispositivos otro tipo de aparatos más pequeños que ayudan al funcionamiento de estos aportando, entre otras cosas, capacidad de procesamiento y espacio. Aquí es donde entran en escena las nuevas tarjetas de memoria de Samsung pensadas para dispositivos de grabación constante.
Samsung presenta sus nuevas tarjetas de alto rendimiento para cámaras
El almacenamiento interno es de lo más importante para los usuarios de cualquier dispositivo. Todo el mundo elige su teléfono en base a ciertos parámetros y ver cuánto almacenamiento tiene es una parte muy importante, sobre todo si no hay una forma de ampliarlo físicamente.
En el caso de la gran mayoría de dispositivos Android todavía existe una bandeja para tarjetas MicroSD, pero estos no son los únicos que tienen acceso a este tipo de accesorios. Tenemos el caso de todos esos aparatos que solo tienen un trabajo como son las cámaras de video de todo tipo.
Para todas las que tienen un espacio libre para ello, podrán gozar de todas las posibilidades que el brinda la nueva gama de tarjetas Samsung Endurance Pro. La firma coreana sabe que el espacio es importante, pero hay otros factores determinantes a la hora de producir este tipo de chips.
Para empezar, el espacio es importante y en su caso habrá de 32, 64, 128 y 256 GB de espacio interno, algo que puede parecer poco incluso en los estándares más altos. Pero tengamos en cuenta que el objetivo es ponerlas en cámaras de todo tipo con puerto MicroSD, por lo que puede ser más que suficiente en la mayoría de los casos.
De hecho, la compañía promete hasta un máximo de 140.160 horas en el tope de espacio, por no hablar de sus resistencias. Y es que la gama Endurance se caracteriza por aguantar todo lo que le echen, desde imanes, Rayos X y temperaturas extremas. Otra promesa es el mantenimiento de hasta 16 años seguidos de grabación sin interrupción, por lo que con estas características casi compensa gastar el dinero en una tarjeta de 256 GB por 55 euros, lo que es muy interesante para estos aparatos multimedia.