Misa de Medianoche: todo lo que debes saber del nuevo fenómeno de Netflix

Netflix lleva varios años poniendo toda la carne en el asador para meterse en el bolsillo a los aficionados a la series. Obras como The Witcher, El Juego del Calamar o La Maldición de Hill House han desatado un auténtico fenómeno de masas, y Misa de Medianoche, la nueva producción de Mike Flanagan, no iba a ser para menos. Se trata de una miniserie de terror psicológico que cuenta con 7 capítulos de aproximadamente una hora de duración. Te contamos los motivos por los que deberías darle una oportunidad.

Misa de Medianoche: ¿de qué trata la historia?

Tal y como su propio nombre indica, la religión tiene un gran protagonismo durante el desarrollo de la historia. Crocket Island es territorio de tradicinón cristiana en su gran parte; asistir a misa es innegociable para sus habitantes, aunque todo comienza a cambiar en cuanto el Padre Paul hereda el el testigo de Monseñor Pruitt. Sin embargo —y sin entrar en spoilers—, hay muchas sorpresas y no son pocos los subgéneros que Flanagan toca conforme se desarrolla el guion. Temáticas como la culpa y el pesar, el odio o la xenofobia están presentes y se desarrollan conforme vamos conociendo a todos los personajes. El punto de partida nos presenta a Riley Flyyn, un joven atormentado por su implicación en un homicidio por imprudencia que perdió la fe durante su estancia en la cárcel. Varios años después regresa a la isla con la intención de rehacer su vida, aunque las cosas han cambiado mucho desde su marcha.

Mike Flanagan, una figura contrastada en el género

El escritor, director y productor estadounidense se ha convertido en uno de los rostros más populares entre los amantes del terror. Aunque su obra más aclamada es, sin lugar a dudas, La Maldición de Hill House, Flanagan lleva muchos años aterrorizándonos a través de la pantalla: Oculus, Hush, Ouija: El origen del Mal, El Juego de Gerald y Doctor Sleep demuestran que no solo sabe cómo ponernos los pelos de punta; también dejan patente su capacidad para abordar todo tipo de subgéneros.

La sutileza en lugar del susto fácil

Al igual que vimos en La Maldición de Hill House, la atmósfera de terror de Misa de Medianoche se cocina a fuego lento; los sustos o jumpscares se pueden contar con los dedos de una mano. En su lugar, Flanagan ha sido capaz de crear un ambiente en el que la tensión, que va de menos a más, puede cortarse con un cuchillo. La historia, inquietante y repleta de giros de guion, pone sobre la mesa varios temas muy interesantes, los desarrolla sin quedarse a medio camino y termina dando forma a un círculo que se cierra a la perfección.

Crocket Island y sus habitantes

Todo lo que sucede en la historia se concentra en una pequeña —y humilde— isla llamada Crocket Island. En ella apenas viven decenas de personas y en eso reside una de las claves del éxito de la serie: la apuesta por una cantidad reducida de personajes, entre los que prácticamente todos podrían ser protagonistas. Ver el primer capítulo es más que suficiente para que los conozcamos a casi todos y nos familiaricemos con ellos.

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Ciencia, religión y diferencias culturales

Más allá de la piedra angular de la historia, el desarrollo de la misma nos plantea diversos puntos de vista sobre temas sensibles que, a veces, es necesario abordar. Crocket Island es una aldea pequeña en la que no vive demasiada gente, pero entre ella podemos encontrar elementos tan interesantes como la enésima batalla entre religión y ciencia, además del choque cultural que existe entre personas con diferentes creencias. En este sentido, Flanagan ha dado en el clavo a la hora de tratarlos de manera natural, sin dar lugar ni a momentos incómodos o forzados, ni a que el argumento se diluya y vea peligrar su ritmo.

Misa de Medianoche: reparto completo