Gaming Club
Regístrate
españaESPAÑAméxicoMÉXICOusaUSA

Bethesda, músculo para Xbox

Guerra de carteras. La batalla de Sony y Microsoft por la compra de estudios

En este vídeo, repasamos algunos de los últimos movimientos realizados por las compañías en pos de conseguir los mejores estudios internos.

Guerra de carteras. La batalla de Sony y Microsoft por la compra de estudios

Tras las peleas por los teraflops, un nuevo contrincante se ha unido a la guerra de consolas para a ver quién tiene más estudios. Todo esto viene a raíz de la reciente noticia en la que PlayStation compró Housemarque, estudio responsable del más que notable Returnal en respuesta a las compras que realizó Microsoft el año pasado.Todos estos movimientos tan llamativos parecen haberse convertido en norma tras la creciente compra de estudios por dos de las tres grandes empresas de la industria del videojuego. Así pues, desde Meristation hemos querido hacer un repaso de las compras más destacadas, así como reflexionar sobre cómo nos afectará todo esto a los consumidores. Aunque esto pueda parecer bastante reciente, todo esto se remontaal E3 de 2018 cuando Microsoft anunció por todo lo alto la compra de estudios de renombre como Ninja Theory, Playground Games o Undead Labs, estudios responsables de Hellblade, Forza y State of Decay respectivamente. Sí, si queréis podemos remontarnos a mucho antes con Rare en 2002 o de otras compras menores de ambas compañías, pero creemos que este y la posterior compra de Obsidian meses después fue el detonante de todo.

Marcamos aquí el punto de inicio porque veníamos de una Xbox One que no tuvo grandes exclusivos por los que sacar músculo. De hecho, esta fue una de las grandes críticas de sus usuarios, así como uno de los grandes motivos de su relativo fracaso. En un intento a la desesperada, Phil Spencer fue el encargado de anunciar la llegada de estos estudios como inversión de futuro y tranquilizar a su público. No obstante, esto no fue suficiente. Algunos títulos como We Happy Few no salieron como se esperaban y la secuela de Hellblade 2 les llevó más tiempo del que esperaban.Sony no se amedrentó ya que gozaban de un gran estado de forma con Horizon Zero Dawn y God of War como grandes estrellas de 2017 y 2018 respectivamente y su inminente llegada a las 100 millones de PS4 vendidas. Sin embargo, no quisieron quedarse atrás y respondieron en 2019 con la compra de Insomniac Games, responsable de juegos de éxito como Ratchet and Clank.

Una dura competición

Este apabullante éxito de la competencia no amedrentó a Phil Spencer y tras una grandísima campaña de marqueting del Game Pass, en 2020 se conoció la compra que hizo tambalear la industria del videojuego al completo. Microsoft compraba Bethesda. No solo eso, sino que se hacía al completo con Zenimax Studios, aunque en grandes rasgos, Bethesda era el gran nombre tras ser estudio responsable de sagas tan aclamadas como The Elder Scrolls, Fallout y Doom. Microsoft no solo acogía grandes sagas, sino que además las incluía en GamePass ese mismo año.Las preguntas surgieron a borbotones: ¿Qué iba a pasar con las exclusividades como Deathloop? ¿The Elder Scrolls VI no saldría para PS5? ¿Hasta qué punto va a seguir comprando Microsoft? Preguntas que afortunadamente algunas se fueron respondiendo y otras siguen en el limbo. Solo el futuro dirá, pero esta compra fue tan sonada como la de Rare en 2002.Hasta el momento, todas las compras habían sido de estudios menores o que habían mantenido una larga relación con la compañía como ocurrió con Sony e Insomniac Games. Sin embargo, Bethesda era una de las grandes desarrolladoras encargadas de nutrir el catálogo de todas las plataformas. Hasta la compra de Microsoft.

El último gran movimiento y respuesta de Sony ha sido la compra de Housemarque, desarrolladores del fantástico Returnal y otros títulos arcade como Super Stardust. Sin embargo, la cosa no pareceacabar aquí ya que la propia Sony podría haber filtrado la compra de Bluepoint, responsables de los excelentes remakes de Shadow of the Colossus y Demon’s Souls.Para más inri, Sony no parece haber acabado y confirmó lo que, a priori, parece una compra menor. Si a posteriori analizamos la compra de Nixxies Software, esta desarrolladora está especializada en traer juegos de consola a PC, por lo que la externalización y llegada de exclusivos de consola a PC por parte de Sony parece algo inevitable.A modo de resumen, Xbox compra estudios menores pero de renombre como Obsidian y PlayStation responde con Insomniac Games.

El único sentido que vemos en todos estos movimientos es la idea de generar beneficios independientemente de la plataforma en la que juegues, algo que Microsoft lleva años haciendo y Sony empieza a dar sus primeros pasos hacia una dirección que Nintendo se niega a tomar. Sin embargo, PlayStation participa en un juego que no puede ganar.Xbox es solo la división de videojuegos del gigante que es Microsoft, una de las empresas con más dinero del mundo. En su contraparte, PlayStation es la marca que más beneficios está repercutiendo en Sony, aunque Microsoft prácticamente podría comprar cualquier otra empresa dado el capital que maneja.Para ir acabando, una nueva batalla entre dos grandes marcas multimillonarias ha empezado: la guerra de la billetera. En esta batalla tan cruda en la que ninguno de nosotros tenemos vela en ese entierro actuaremos de meros espectadores y disfrutaremos de los beneficios que nos repercuta esta competencia. Por consiguiente, las exclusividades temporales y de consola serán más frecuentes, aunque, con un poco de suerte, tarde o temprano todos podremos disfrutar de los videojuegos que queramos y hacer de nuestro medio algo mejor.