Crean una rueda de bicicleta imposible de pinchar: tecnología de la NASA
La misma tecnología que tienen las ruedas del Mars Rovers se aplicará a una rueda para bicicleta llamada Metl.
Un reventón en la rueda de la bici, ponerle un parche, a esperar que se seque, hincharla y a seguir tirando millas. O directamente tener que cambiarle el neumático porque no se puede arreglar. Esto es un clásico que lleva literalmente un siglo sucediendo a millones de personas. Pero, ¿y si tuvieras un par de ruedas que nunca, jamás, se te van a pinchar? Se llaman Metl, y saldrán el año que viene.
Ruedas de bicicleta Metl
Desde hace más de 50 años, la NASA ha incorporado su avanzada tecnología a los productos de uso cotidiano. Los materiales de la agencia espacial se han introducido en todo tipo de productos, desde colchones de espuma con memoria hasta sensores de imagen de teléfonos inteligentes y cámaras digitales.
Así que era cuestión de tiempo que su innovadora tecnología para neumáticos se sumara a la larga lista de productos derivados de la NASA. Una empresa llamada Smart está utilizando la tecnología de neumáticos de aleación con memoria de forma sin aire (SMA) -construida originalmente para los vehículos lunares y de Marte como el Mars Rover- para un neumático de bicicleta llamado Metl.
Compuesta por resortes interconectados que no necesitan ser inflados, Smart afirma que los neumáticos superelásticos están construidos como el titanio para resistir terrenos accidentados sin desinflarse. Esencialmente, espera que la perspectiva de un viaje sin pinchazos pueda atraer a los ciclistas con conciencia ecológica, hartos de tirar las cámaras de goma a la basura.
Ruedas de bici que no se pinchan
El Centro de Investigación Glenn de la NASA desarrolló originalmente el SMA modificando el típico material elástico de las ruedas neumáticas en aleaciones con memoria capaces de soportar fuertes tensiones y deformaciones reversibles. Para combatir los pinchazos, los ingenieros de la NASA se propusieron crear un neumático que se adaptara con flexibilidad a los terrenos lunares y marcianos irregulares y recuperara su forma original, sin dejar de ofrecer un mayor control. Naturalmente, todas estas funciones están relacionadas con el ciclismo todoterreno.
Como startup aprobada por la NASA, Smart ha trabajado estrechamente con la agencia espacial en su neumático Metl, que está previsto que llegue a los consumidores a principios del año que viene. Ya ha conseguido un socio en Spin, la empresa de motos eléctricas propiedad de Ford. Smart, cofundada por el campeón de Survivor: Fiji, Earl Cole, y el ingeniero de blockchain Brian Yennie, también prevé que sus neumáticos lleguen a los coches.
¿Qué os parece la idea? ¿Y para cuándo se adaptará a los vehículos de motor y se terminará de una vez el peligro mortal de los reventones cuando vas por la autopista en coche?