Wasteland 3, mirando al pasado y al futuro

Vivimos tiempos difíciles. La crisis está cambiando el calendario de lanzamientos, y Wasteland 3 ha sido uno de los primeros afectados, retrasando su salida al 28 de agosto. Mientras llega la fecha, hemos podido degustar durante unas horas cómo será nuestra vida de ranger lejos del desierto. Coge ropa de abrigo que dejamos la calurosa Arizona para mudarnos a las frías tierras de Colorado. El futuro de los rangers depende de nosotros.

Tu gente de Arizona está pasando por dificultades y necesita urgentemente recursos. Un mandamás de Colorado llamado "Patriarca" promete acabar con nuestras penurias si le echamos una mano con sus tres hijos, quienes han sucumbido al lado oscuro y están causando el caos en la región. Por desgracia, no es la única contrariedad en el horizonte, ya que, tras poner un pie en el estado, los rangers sufren un brutal ataque que acaba con casi toda la expedición. Ese grupo armado es sádico y numeroso, y nos quiere ver en el hoyo. Son muchos los conflictos abiertos que hallaremos en nuestro nuevo hogar, y solo nuestra dilatada experiencia en combate es capaz de limpiar Colorado de malas hierbas.

La introducción nos situó en el nuevo mundo. Después de eso, fue momento de elegir los rangers que nos acompañarán en nuestras aventuras. El juego presentaba varias parejas predefinidas con habilidades equilibradas, pero nos inclinamos por la opción de crear nuestros personajes desde cero. Diversos menús para escoger nombre, género, voz y trasfondo. Luego, unos puntos para repartir entre habilidades y atributos. Si algo nos ha enseñado los títulos de Interplay/Inxile es que las habilidades conectadas a la persuasión, cerrajería, reparación e informática nos sacarán las castañas del fuego.

Una vez completado este paso, volvimos justo al momento después del prólogo. El jugador, a modo de tutorial, debe hacer frente a un grupo enemigo. Wasteland 3 mantiene el combate por turnos con puntos de acción (PA), eso significa que cualquier movimiento gastará un número específico de PA. La novedad introducida aquí es que cuando nos quedan pocos puntos, en vez de acabar el turno y perderlos, tenemos tres alternativas: elegir guardarlos para el siguiente turno, preparar una emboscada o bien realizar una acción de defensa. La cuadrícula de la zona de combate ofrece información relevante para no desperdiciar PA. Los espacios azules muestran hasta dónde puede moverse un ranger con PA suficiente para realizar un ataque, los naranjas cubren su área de movimiento y los rojos son el rango de alcance enemigo. Los rangers pueden caer en combate, pero en esta entrega tendremos un tiempo limitado para levantarlos. Otro de los cambios significativos respecto a Wasteland 2 es que ahora existe total libertad para escoger qué miembro del grupo ejecutará una acción, dicho en otras palabras: el sistema ya no se rige por un atributo para decidir los turnos. Por ejemplo, avanzamos con un ranger hasta una cobertura cercana, luego cambiamos a otro compañero y atacamos desde su posición, y regresamos al anterior para gastar sus puntos restantes. Esto puede dar mucho juego en combates más duros.

En Wasteland 3 cualquier movimiento en falso se paga caro, por esa razón es importante utilizar las coberturas parciales o totales. Los enemigos se posicionan entre ellas y van realizando su aproximación para tomar un buen ángulo. Lo ideal es estudiar el escenario y elegir sabiamente el camino para flanquearlos. Cuanto mejor sea nuestra posición mayor tanto por ciento de daño se nos marcará en pantalla. En la zona de combate observamos objetos beneficiosos para realizar daño de área, como los típicos tanques de combustible que al disparar explotaron menguando los PV enemigos y, además, aplicando daño de fuego. También fueron mortíferas nuestras granadas. Asimismo, las habilidades únicas de nuestros chicos funcionaron de maravilla, pero requieren de un tiempo de carga lento.

Sin embargo, antes de entrar en combate, es conveniente revisar nuestras casillas de acceso rápido (bombas y botiquines no pueden faltar) y la munición de nuestro inventario. Una vez se nos fue el santo al cielo y entramos a pelear sin munición de fusil de asalto, así que un ranger fue inservible durante esa contienda. Sobre el inventario, es importante destacar que en Wasteland 3 dispondremos de un inventario único para todos los miembros. Y una cosa más, no hay límite de peso, se puede cargar con toda la basura de Colorado.

Nuestro equipo puede tener un máximo de 6 miembros. El límite son 4 rangers y el resto de huecos están destinados a "camaradas", es decir, personajes del mundo que desean unirse al grupo. Estos individuos tienen personalidad propia y participan activamente en los diálogos. No estarán de acuerdo con todas las decisiones que tomemos, y no dudarán en realizar comentarios negativos sobre nuestros actos. La gestión de miembros del equipo está disponible en todo momento en nuestra base de operaciones.

Wasteland 3 es un RPG narrativo, eso quiere decir que disfrutaremos de relatos profundos durante nuestra estancia por Colorado. Nuestro diario se fue nutriendo de misiones principales y secundarias con sus respectivas decisiones morales. Una de gran magnitud nos sacudió al final de la beta, cuando en nuestra mano se debatía la vida de un traidor. ¿Matarlo ahí mismo o custodiarlo hasta la ciudad para que sea juzgado? Y si preferimos sentenciarlo ahí mismo, ¿rápido o lento y doloroso? Tomamos varias decisiones consecutivas que acabaron con el tipo agonizando lentamente a manos de una camarada que había sufrido las acciones del traidor. A continuación, un grupo de civiles nos atacó, por lo que no tuvimos más remedio que neutralizarlos. Al finalizar la misión, un mensaje inquietante apareció en pantalla: algunas facciones no perdonarán lo que has hecho. Recuerda: toda acción conllevará consecuencias en la trama.

El mazmorreo sigue presente en esta tercera entrega con instalaciones misteriosas repletas de bichos mutantes. La base de los rangers fue un pequeño aperitivo con puertas para forzar y ordenadores puñeteros que necesitaban de unos pequeños ajustes. También trampas por doquier, robots locos y sujetos sospechosos. Entre los restos de basura de otra época, nos topamos con cintas polvorientas que recordaban la caída de las bombas. Multitud de historias olvidadas aguardan en este tipo de soporte.

En el apartado visual observamos cambios moderados. La interfaz ahora ofrece un aspecto simplificado y limpio, deshaciéndose de aquellos elementos de metal desgastado clásicos que ocupaban permanentemente la zona inferior de la pantalla. No obstante, la excesiva simplificación afecta a los diálogos, ya que elimina el retrato de los personajes. A veces un NPC se encontraba de espaldas y no podíamos identificar su rostro en medio de una conversación. Los gráficos en general han subido un pequeño peldaño; más pulidos y mejores detalles. Destaca la vista en primera persona en los diálogos con personajes importantes, donde se muestran animaciones y modelos bastante bien realizados.

Wasteland 3 se vuelve más accesible en sus mecánicas así como en su apariencia. Añade combates por turnos más dinámicos y menos engorrosos, pero sin perder el espíritu estratégico. La historia tiene tintes más crudos y apunta hacia temas más sombríos en cuestión de decisiones. En comparación con entregas previas, se desdibuja levemente aquella línea que nos conectaba con los juegos de papel y lápiz con el fin de hacerlo más amigable de cara a recién llegados. Muy buenas impresiones en general, solo nos queda esperar hasta el 28 de agosto para disfrutar del juego completo.