Cómo limpiar y reparar los Joy-Con de Nintendo Switch
Te enseñamos cómo solucionar el llamado Joy-Con drit de Nintendo Switch si no se encuentra en garantía.
¿Tienes problemas de precisión con los Joy-Con de tu Nintendo Switch? A continuación te ofrecemos un completo tutorial para que puedas limpiar y reparar los Joy-Con si no se encuentran en garantía y como última solución antes de enviarlos al servicio técnico de Nintendo. Y es que muchos usuarios de Switch se han encontrado con varios contratiempos en el funcionamiento de los Joy-Con, especialmente con el izquierdo, a causa del llamado Joy-Con Drift. Eso sí, si tienes problemas con los mandos de Switch y aún se encuentran en garantía, lo ideal es que se encargue Nintendo de dichas reparaciones.
Cómo limpiar y reparar los Joy-Con de Nintendo Switch
El primer paso será comprobar la calibración de los Joy-Con con la consola para así descartar posibles errores de compatibilidad vía software; para ello dirígete a los Ajustes de la consola y accede a Controles y Sensores. Ahora pulsa sobre la opción Actualizar los Joy-Con y Recalibrar los sticks. Si el problema no se soluciona sigue leyendo.
El siguiente paso será limpiar el interior de los sticks, zonas que pueden llegar a acumular polvo y suciedad tras mucho tiempo de uso y que pueden afectar al correcto funcionamiento de los sticks. Para ello será necesario contar con unas pinzas metálica delgadas y algún tipo de limpiador de conctacto; el método es muy sencillo, puesto que tan solo tendremos que tirar el stick hacia arriba con las pinzas hasta destapar una superficie de plástico y aplicar ahí un poco de limpiador. Si el problema persiste sigue leyendo.
El tercer y último paso antes de enviar a reparar el Joy-Con averiado será intentar reemplazar el stick por nuestra cuenta. Se trata de una opción arriesgada y que debemos hacer solo si realmente nos vemos capacitados para ello; eso sí, se venden kits de reparación con todo lo necesario para llevar a cabo el proceso, aunque debemos tener un poco de mano para hacerlo correctamente.
Para ello debemos abrir el Joy-Con averiado con un destornillador de pequeño tamaño y desmontar su interior a través de varios pasos, como retirar la batería, descubrir la placa interna retirando un segundo protector de plástico, desconectar el stick de la placa y por último sustituirlo por el nuevo; debemos ser muy cuidadosos para no dañar ningún componente interno. Si así tampoco se soluciona el problema será el momento de enviar el Joy-Con al servicio técnico de Nintendo.