Deutsche Bank lanza la primera tarjeta de crédito ‘smart’ con pantalla
La tecnología MOTION CODETM permite que el código de seguridad CVC se modifique para ser más seguro.
Aunque desde hace un par de años son muchos los que ya llevan las tarjetas de crédito escaneadas y metidas dentro de sus móviles, hay quienes se resisten a esto y siguen pagando con ellas en vez de con el smartphone. La última gran evolución que tuvieron fue cuando pasaron de usar la arcaica banda magnética a tener un chip NFC. Pero lo que propone la tecnología MOTION CODETM es asentar un nuevo estándar: una tarjeta de crédito con pantalla y código CVC cambiante.
Tarjeta Calma Deutsche Bank
El código CVC es ese pequeño número de tres cifras que suele venir en la parte de atrás de las tarjetas, y que sirve a modo de confirmación de seguridad sobre la validez de la misma. Por tanto, saberlo equivale a poder usar una tarjeta de la que se conozcan otros datos como la numeración y fecha de caducidad.
Por ello, Deutsche Bank y Mastercard lanzan la Tarjeta Calma Deutsche Bank, la primera de su clase que incorpora la tecnología MOTION CODETM en España y que permitirá que el código de seguridad cambie cada cuatro horas, incrementando significativamente la seguridad.
La tecnología MOTION CODETM es un sistema denominado Código de Seguridad Dinámico, por el que el CVC cambia aleatoriamente cada cuatro horas mediante un complejo algoritmo que sólo conoce la entidad emisora de la tarjeta. La parte trasera de la tarjeta cuenta con una pantalla extraplana en la que el CVC se va modificando. Esto permite aumentar la seguridad especialmente en las compras por internet, ya que invalida clonaciones o robo de datos en las transacciones online y en comercios.
Un código CVC que cambia cada 4 horas
Además de la última tecnología en seguridad, la Tarjeta Mastercard Calma Deutsche Bank incorpora una serie de servicios añadidos para que el titular realice sus compras online con total tranquilidad, como un seguro por el que en caso de robo o atraco devolverá el importe de las compras. Asimismo, se reembolsará también al cliente el importe de la transacción realizada por internet en caso de disconformidad o de no entrega del producto.
Y al estilo de las webs de venta más populares, la tarjeta ofrece también una garantía de mejor precio: Si el titular de la tarjeta encuentra el bien adquirido a menor precio en otro establecimiento, se le devolverá la diferencia del importe entre ambos productos. De momento hay que ser del Deutsche Bank para tener una, pero ¿cuánto tardaremos en ver al resto de entidades bancarias adoptar este sistema?