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Ciencia y tecnología

ROBÓTICA

Este robot soluciona un cubo de Rubik con una sola mano

Si, los robots son capaces de resolver un cubo de Rubik en segundos, pero este lo hace con un brazo robótico.

Este robot soluciona un cubo de Rubik con una sola mano

Puede que muchas compañías de robótica se centren en crear aparatos que solucionen la vida de los humanos, pero otros parece que los crean por propio entretenimiento. Y es que nos hemos encontrado con que Open AI ha fusionado la inteligencia artificial con la robótica para crear una mano robótica que soluciona un cubo de Rubik.

Tarda, pero lo hace

Los cubos de Rubik son de los puzles más populares del mundo: un cubo con caras que hay que rotar para que cada una tenga su propio color. Los hay simples de cuatro secciones, de nueve o incluso con formas cada vez más extrañas, desde pirámides hasta estrellas o incluso con engranajes. Pero el Rubik tradicionales el que manda, el que te puede llevar a lo más alto si eres todo un portento en velocidad y ejecución del algoritmo.

Todavía no han llegado a este punto, o quizás no lo pretendan, pero lo cierto es que la compañía Open AI ha creado una mano robótica que te soluciona un cubo de Rubik. Si, hemos visto grandes duelos entre el hombre y la máquina en este apartado, pero lo cierto es que resolver un artefacto de este estilo sin que se te caiga es toda una hazaña ya tengas un brazo de carne y hueso o mecánico.

La muñeca se encarga de hacer un juego giratorio sobre su propio eje, mientras que los dedos son los que se encargan de girar cada sección para que todas cuadren. de esta forma no solo se mueven las secciones del puzle, sino que también se cambia el eje del aparato.

Todo esto lo consigue gracias a un nuevo sistema inteligente que han denominado Automatic Domain Randomization (ADR). Este software aprende desde un entorno controlado para conocer cómo se resuelve el problema y una vez comprendido todo el software se encarga de aprender cómo solucionar otros problemas de forma aleatoria. En este punto se empiezan a generar nuevos entornos en la Red neuronal y es donde la máquina aprende de verdad. En resumen, el brazo primero sigue un aprendizaje controlado, después empieza a buscar las soluciones por su cuenta y en este punto es capaz de generar nuevos entornos de forma aleatoria y resolverlos de forma exitosa.

De momento tarda bastante en resolverlo, pero a una mano es cuestión de habilidad más que de rapidez y este brazo robótico sabe cómo manejar el cubo a la perfección.