Bungie retrasa el próximo parche de Destiny 2 para evitar el crunch

Los numerosos casos de explotación laboral —conocidos bajo la denominación de crunch en el entorno de los videojuegos— no han caído en saco roto. Cada vez son más los estudios que optan por modificar sus hábitos y sus tiempos de desarrollo para evitar las situaciones de trabajo extremas por parte de sus empleados. En una conversación en la GuardianCon, Bungie, el estudio detrás de Destiny 2, ha confirmado que el próximo parche se retrasará hasta el mes de julio para evitar el crunch.

Según el estudio, en una declaraciones que recoge GamesIndustry, la actualización no puede llegar más rápido si no se recurre a una situación de trabajo intensivo en horas extra. La empresa asegura que podrían pedir a sus empleados que trabajaran “muchísimo”, pero se preguntan: “¿Vale la pena hacerlo? ¿O es mejor preservar el equilibro entre la vida personal y laboral [de los trabajadores] y lanzarlo más adelante, en julio?”. De acuerdo con Bungie, “esta es la verdad 100% honesta”, que es siempre “un análisis de coste y beneficio para la gente que trabaja muy duro”.

Una filosofía de trabajo no se cambia en dos días

Bungie es, de hecho, una de las empresas que ha trabajado en erradir su propia cultura de crunch. Durante el desarrollo de Halo 2 casi destruye la compañía, desvela Bungie en palabras de Luke Timmins, ingeniero jefe: “Nunca he visto a personas trabajar tanto durante un año y medio”. Para Timmins, cuando una compañía está acostumbrada al crunch, es muy dificil revertir la situación. “Requiere cambios en la planificacion y en la cultura, algo que lleva mucho tiempo. Nos llevó años y muchos juegos desembarazarnos de la filosofía del crunch.

Destiny 2 abrió una nueva etapa para Bungie cuando se decidió romper el acuerdo que mantenía con Activision y recuperar la propiedad de la IP. Ahora, ya con libertad para desarrollar sus ideas sin las ataduras de un publisher, la compañía ha anunciado que el videojuego estará disponible también en Google Stadia.