El iPhone 5G está en marcha, pero tardará en llegar
La tecnología de conectividad de alta velocidad llegará tarde a los teléfonos de Cupertino.
Este año no se habla de otra cosa en telefonía que no sea el 5G. El nuevo estándar de conectividad está muy cerca y es, posiblemente, mucho más asequible que fabricar un teléfono plegable. De hecho, ya hay compañías que han creado las antenas compatibles con esta nueva tecnología y también terminales que disponen ya de estos chips. Pero en el caso de Apple es distinto. Los de Cupertino quieren hacer sus propios chips, pero tardarán más en lanzar un iPhone 5G.
No habrá iPhone 5G hasta 2025
en un momento en el que la tecnología avanza a pasos agigantados cada año cuesta pensar que algo tardará más de un año o dos a lo sumo en llegar. Cada empresa tiene en mente los planes de su nuevo teléfono incluso antes de comenzar a fabricar el que van a lanzar antes que el que proyectan. Algunos se la juegan confiando en nuevas y revolucionarias funciones que, al final, acaban marcando la pauta de lo que hará el resto.
Apple es una de esas compañías y nos ha demostrado que sabe cómo crear tendencia. En su momento el sensor de huellas, Face ID, el notch… y así podríamos seguir con un largo etcetera. También es sabido que muchos de los componentes de su iPhone son propios como es el procesador A12 Bionic que monta el iPhone XS actualmente. Pero puede que en su última innovación se les vaya el tiempo en el desarrollo y es que sus teléfonos 5G no llegaría hasta 2025.
Las antenas son de los componentes más difíciles de fabricar y también los más caros de un terminal, dos motivos por los que CNET apunta a la tardía llegada del chip.
El doble filo de no tener un iPhone 5G este año
Parece que los de Cupertino se tomarán su tiempo para fabricar los chips de conexión para sus iPhone 5G. Este asunto tiene ahora mismo una doble cara y es que por un lado sus competidoras ya están poniendo en venta sus propios terminales con 5G. Puede que los más fans se mantengan hasta 2025 con las ganas de disfrutar de esta conectividad, aunque quien sabe si los tiempos de espera son menores.
Por otro lado, hay que tener en cuenta que el 5G no es el estándar mundial. Es decir, hay países, sin ir más lejos España, donde algunos usuarios todavía trabajan con un teléfono que solo alcanza el 3G. El Gobierno no tiene prisa en incorporar esta nueva Red, mientras que otros como Donald Trump quieren ya el 6G. Con esta dualidad, la jugada de los de Cupertino tendrán que pensar si pedir ayuda de algún fabricante para ponerse a la altura de sus rivales o por el contrario aguantar a tener listo su propio chip.