Activision rechazó una nueva IP del creador de Dead Space
Glen Schofield habla sobre su salida de Activision y de Sledgehammer Games, estudio que fundó junto a Michael Condrey y revela esta anécdota.
Tras su salida de Activision, Glen Schofield ha confesado que recientemente presentó una nueva idea a la compañía, una nueva IP, peor fue rechazada. Sobre ello y su marcha ha reflexionado en un encuentro con Game Informer.
El motivo de su marcha: era el momento de partir
El cocreador de Dead Space y de Sledgehammer Games junto a Michael Condrey, encargados de desarrollar Call of Duty: Advanced Warfare y Call of Duty: WWII, anunció hace un año que se marchaban de ambas para emprender nuevos retos profesionales; sin embargo, no quedó muy claro el motivo real de esa ruptura profesional, aunque consta que fue de forma amistosa.
Tal como cuenta, hubo un momento en que comenzaron a trabajar en una nueva propiedad intelectual. Ya no formaba parte de Sledgehammer Games, pero sí de Activision. Esta fue la gota que colmó el vaso: había que cambiar de aires. “No la aceptaron, pero debieron haberlo hecho”, comenta Schofield. “Es difícil hacer que funcione una gran nueva IP. Tienes que invertir tiempo, dinero… todas esas cosas. Dedicamos mucho tiempo, esfuerzo y también dinero; pero simplemente no funcionó. A veces duele, pero tengo más ideas en la cabeza, así que está todo bien”, finalizaba.
“Al ver que no aceptaron este proyecto me di cuenta de que era la hora de irme de Activision", continúa sincerándose. “No tengo rencor; todos los años que pasé ahí fueron realmente fantásticos. De verdad, disfruté”, finaliza. No ha trascendido qué tipo de juego tenía en mente ni el género al que se iba a enmarcar.
Lo que sí sabemos es que Condrey ha fundado hace solo unas semanas un nuevo estudio junto a 2K Games en Silicon Valley donde trabajarán en nuevos proyectos, un equipo que conta de muchos veteranos de la industria.
- Aventura
- Acción
Una gigantesca astronave minera deja de comunicar con la Tierra tras entrar en contacto con un extraño artefacto en un planeta distante. El ingeniero Isaac Clarke se embarca para repararla y descubre un horrible baño de sangre la tripulación de la astronave cruelmente masacrada e infectada por una malvada presencia alienígena. Desde este momento, Isaac se encuentra aislado, atrapado y en una lucha desesperada por sobrevivir.