La editorial de los libros "Elige tu propia aventura" demanda a Black Mirror: Bandersnatch
La plataforma no tenía los derechos para hacer aparecer los libros en su película y la editorial asegura que está manchando y denigrando su nombre.
Decía Oscar Wilde que "hay solamente una cosa en el mundo peor a que hablen de ti, y es que no hablen de ti". Y todos hemos oído alguna vez eso de que "no hay publicidad mala". Pero seguro que a pesar de ambas frases hechas, a Netflix no le va a hacer ninguna gracia el motivo por el que su nombre ha irrrumpido de nuevo en titulares y secciones de noticias.
La editorial Chooseco LLC, encargada de la publicación de los libros "Elige Tu Propia Aventura", ha demandado a Netflix por Black Mirror: Bandersnatch, una de las sensaciones de estas Navidades. En la demanda se asegura que Netflix "se aprovechó y benefició" de las ideas de los libros y que si bien la compañía empezó a negociar con ellos por su licencia en 2016, nunca llegó a concretar nada.
"Está causando confusión y manchando, denigrando y debilitando la marca Elige tu propia Aventura". Chooseco asegura que Black Mirror: Bandersnatch está relacionando su serie de libros con "temas oscuros y violentos" que no tienen nada que ver con la colección literaria.
¿Qué es Black Mirror: Bandersnatch?
Bandersnatch es la primera película interactiva de Netflix. La primera película de la plataforma que nos permite tomar distintas decisiones a lo largo de la historia. Decisiones como si el protagonista acepta un trabajo, qué cereales toma al despertar, si mata a alguien (o no)... etcétera. A lo largo de la cinta hay momentos en los que aparecen dos opciones en pantalla, entre las que deberemos escoger con el mando a distancia o el touchpad/ratón de nuestro ordenador. O con el dedo, que en esto de Netflix también se valen tabletas e incluso teléfonos.
El último capítulo de la serie creada por Charlie Brooker es por tanto un heredero más de los libros Elige tu propia Aventura, muy populares en la década de los ochenta. En ellos saltábamos a una página u otra en función de las decisiones que tomábamos conforme avanzábamos en la lectura.
No es la primera polémica que rodea a Black Mirror: Bandersnatch. Muchos seguidores de la industria del videojuego se preguntaron si no era también un sucesor de los videojuegos de Quantic Dream y Telltale, y si el éxito y los halagos que se llevaba no se los había merecido el videojuego antes. Como nadie les reconocía, no se tardó en considerar Black Mirror: Bandersnatch un insulto a los videojuegos. Una serie que se llevaba el mérito por algo que estos lograron hace mucho tiempo.
Aunque como nos encargamos de demostrar en su día, es todo lo contrario. Black Mirror: Bandersnatch es una carta de amor a los mismos.