Assassin's Creed Odyssey: el misterio del Culto de Kosmos
Son invisibles ante los ojos de la gente común, pero están infiltrados en todas las capas de la sociedad e influyen en el devenir de los conflictos.
Nota Importante: Este artículo contiene destripes de la trama principal. Está escrito con una partida de Kassandra como protagonista.
La Grecia Clásica estaba trufada de esoterismo. Muchos de sus cultos tenían que ver con sus dioses. Decía Hesíodo que “hay, sobre la tierra fecunda, treinta mil Inmortales que, por el poder de Zeus, vigilan a los hombres mortales”. ¿Pero cómo conocer la voluntad de los dioses en su condición de simple mortal? A través de los cultos oraculares. En Assassin's Creed Odyssey, el detonante argumental es precisamente una consulta al oráculo, que determina el destino de Alexios, Kassandra y Esparta.
Nada escapa de los tentáculos de Kosmos
El Oráculo demanda un sacrificio humano, el de un bebé espartano. Nadie se resiste, excepto su madre Mirrine y su vástaga, la pequeña Kassandra. El niño, en los brazos de un sacerdote, está a punto de ser lanzado hacia los abismos del monte Taigeto. Sin embargo, la muchacha se resiste y empuja al hombre, que cae con el bebé. Entonces, la acusan de asesina y el populacho exige un tercer sacrificio. Es el propio Nikolaos, su padre, el toma a Kassandra y extiende el brazo. Llora la muchacha, su destino parece la muerte. La mano de Nikolaos se afloja y la pequeña se despeña ladera abajo.
Para cualquier persona normal, caer desde una altura de cientos de metros es una muerte segura. Para Kassandra y Alexios, de la sangre de Leónidas y de la Primera Civilización, no es el final, sino el principio del despertar de sus poderes, unas habilidades que siglos más tarde servirán a la Orden de los Asesinos para acometer sus misiones contra la Orden del Temple.
El destino de ambos niños está escrito en piedras diferentes. Uno se convertirá en una misthios, una mercenaria que tomará los hábitos heroicos para vivir una aventura sin igual a lo largo y ancho del Hélade. El otro, se educará en un entorno dominado por una misteriosa sociedad secreta conocida como el Culto de Kosmos.
El hilo argumental de Assassin's Creed Odyssey se hilvana en el contexto de la Guerra del Peloponeso, donde el Culto actuó en las sombras. Ya lo hizo durante las Guerras Médicas, un conflicto que tuvo lugar contra el enemigo Persa y que unió a las distintas facciones griegas para aplastar al invasor común. Sin embargo, Kosmos era partidario de Jerjes y movió los hilos necesarios para que Esparta no participara en una de las grandes batallas que se avecinaban. La pitia, el Oráculo, dictaminó, siempre bajo la influencia de la sociedad secreta, que si los espartanos acudían al campo de batalla, Esparta caería a menos que su rey muriera. Después de una acalorada discusión, Leónidas y un intrépido ejército de 300 soldados hicieron caso omiso de las advertencias y murieron en la Batalla de las Termópilas. Ese sacrificio, no obstante, unió de nuevo a los griegos, que derrotaron a Jerjes en la Batalla de Salamina, algo que contradecía los designios Kosmos.
Al finalizar la guerra, sin un enemigo común, el culto puso en movimiento sus maquinaciones. La alianza entre Esparta y Atenas se hizo añicos y comenzaron los años de intestina guerra civil entre los pueblos helenos. Allí, infiltrados en todos los ámbitos de la sociedad, a veces en la figura de un respetable político, otras en la de un mercenario o una sacerdotisa de los dioses, los miembros enmascarados movían los peones de ajedrez a su antojo.
El esoterismo griego
Lo cierto es que en la Grecia de nuestros antiguos, lo mistérico estaba en boga. La profesora Elena Gallardo señala las diferencias entra religiones: “Los cultos públicos de ceremonias grandiosas eran siempre algo fríos e impersonales: se dirigían a los dioses en aras de la prosperidad colectiva, pero no se interesaban lo suficiente por la felicidad individual en esta vida y en la otra; incluso el culto de los muertos se preocupaba por el alimento de las 'sombras', aunque no garantizaba la felicidad en el más allá”. En cambio, “frente a esto, las religiones mistéricas prometían una inmortalidad dichosa, al margen de todo concepto de conducta meritoria o pecaminosa; su finalidad era la salvación individual de los hombres”.
Según la profesora Gallardo, hubo dos cultos principales en la Grecia Clásica: “Los misterios de Eleusis, culto relacionado con una serie de ritos que pasan por ser los más antiguos del mundo griego, cuyo santuario está dedicado a Démeter, y el oráculo de Apolo en Delfos”. El Culto de Kosmos es evidentemente una invención al servicio de la ficción narrativa. Dentro del juego, Kosmos surgió como una escisión díscola del Culto de Hermes. Esta organización nació tras un encuentro entre el filósofo Pitágoras y Hermes Trismegisto, que no hay que confundir con el dios del mismo nombre, al que se le rendía culto en la Grecia histórica (aunque se le asoció con él). “El nombre por el que era conocido de forma común era Hermes Trimegisto, Mercurius ter Maximus o Hermes 'Tres veces grande'. Se le llamaba Hermes por ser el primer hombre inteligente del mundo, que transmitió los conocimientos” al resto de los seres humanos. Su figura estuvo ligada al ocultismo y apareció en textos egipcios.
El Culto de Kosmos representa a sus integrantes como miembros de una sociedad oculta. Todos ellos esconden el rostro tras una espantosa máscara teatral y visten largas togas de color oscuro. Cuando Kassandra se infiltra en uno de sus rituales, ve con horror la violencia y los sacrificios que se realizan con total impunidad. A través de esta organización, Ubisoft aprovecha para introducir el elemento fantasioso. Algunos de los miembros guardan fragmentos de un antiquísimo dispositivo de los isu, los Homo Sapiens Divinus, criaturas que son tenidas por dioses, pero que en realidad estaban allí antes que los humanos.
El linaje del rey Leónidas es especial. Sus nietos, Kassandra y Alexios, poseen poderes especiales. La muchacha, que conserva la lanza de su abuelo, la recibe de Mirrine. En el corazón de la sociedad secreta, descubre que su hermano Alexios se ha convertido en una especie de elegido. Ahora, ya como Deimos, tendrá que buscar si hay alguna forma de librarle del influjo del Culto. Habida cuenta que Kosmos orquestó el asesinato de su familia, asesinarlos será una de nuestras misiones principales.
Una de las novedades interesantes de Assassin's Creed Odyssey es la introducción de una mecánica específica para ello. Tenemos a nuestra disposición una infografía en forma de árbol que muestra todos los miembros del Culto descubiertos. Antes que nada, deberemos desenmascararlos, pero no será tarea sencilla. Ubisoft ha diseñado un sistema de pistas, por lo que tendremos que recorrer las tierras griegas, investigar la casa de líderes y asesinar a otros integrantes para completar las pesquisas. Además, de algunos podremos obtener las piezas que nos servirán para fortalecer la lanza de Leónidas.
Si el Culto de Kosmos ha sido capaz de filtrarse por todo el Hélade y manejar a las gentes como marionetas, ¿será posible desmantelarlo? Difícil, sobre todo después de descubrir que Kosmos no es más que uno de los predecesores de una Orden que en el universo de Assassin's Creed llega hasta los tiempos actuales, la del Temple.
- Aventura
- Acción
Assassin's Creed: Odyssey, desarrollado y editado por Ubisoft para PC, PlayStation 4, Xbox One y Stadia, es una nueva entrega de la popular saga de aventura y acción Assassin's Creed en la que esta vez viajamos hasta la antigua Grecia. Pasa de la marginación a la gloria embarcándote en una odisea para descubrir los secretos de tu pasado y cambiar el destino de la antigua Grecia.