Darksiders 3, regresa el apocalipsis

Cuando THQ dio carpetazo final a su historia, Nordic Games se tiró a la piscina y adquirió la compañía. Junto a esta no sólo se llevaba la marca como tal, sino también todos los videojuegos que eran de su propiedad. Y en ese pack, cómo no, estaba la serie Darksiders.

Los dos primeros Darksiders fueron buenos juegos y contentaron tanto a público como a crítica especializada. Sin embargo, si THQ quedó en números rojos fue porque sus principales títulos no vendieron. Y eso le ocurrió a Darksiders, sobre todo la segunda entrega (la primera respondió bien en tiendas).

Teniendo esto como telón de fondo, a todos nos sorprendió cuando THQ Nordic comunicó que Darksiders 3 estaba en desarrollo. Fue una de esas noticias que coge a todos de improviso, ya que las posibilidades de que se lleve a cabo son tan mínimas y exiguas que ni se tienen en cuenta. Pero se hizo.

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Este Darksiders 3 juega en una liga especial. Una que ya inaguró Hellblade de Ninja Theory: el del producto triple A e indie, es decir, el indie triple A. Estos se caracterizan por tener valores de producción muy altos, pero sin llegar a las cotas de los triples A. Darksiders 3 es justo eso, una apuesta por planos muy concretos y brillar en ellos.

Por ejemplo, el apartado gráfico de lo que pudimos ver en Alemania no destacaba a nivel técnico. Sin embargo, se apostaba por una estética muy singular y particular. Gracias a ello, se suplían las carencias técnicas con una paleta de colores muy cercana a lo cartoon. Parecida a la de los anteriores, pero sin serlo. Parecida a la estética animada, pero también sin serlo. “Es un estilo artístico diferente: no es gracioso, pero tampoco es serio”, nos comentaban sus creadores durante la demostración. Una fusión de conceptos que lucía bien en pantalla y mejor que en el primer vídeo mostrado meses atrás, todo sea dicho.

No obstante, Darksiders nunca se ha caracterizado, precisamente, por ser un alarde técnico, sino por su combate e historia. Empezando por este último punto, en Darksiders 3 controlamos a Furia, uno de los Jinetes del Apocalipsis. Su historia tiene como punto de partida una trama paralela a lo que sucede en el primer juego, por lo que muchos elementos pueden sonar a los jugadores.

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Gracias a sus poderes de fuego y su ínclita violencia, Furia puede realizar devastadores ataques. Y aquí entra otro punto importante: Darksiders 3 vamos a tener de nuevo infinidad de combos y ataques. Es más rápido y frenético, gracias sobre todo a la especie de látigo con el que cuenta Furia.

Este elemento da mucho juego en las peleas, ya que aporta frescura y originalidad a los combos realizados. Además, hay que agradecer el trabajo que se está realizando, al menos en lo visto en la demostración jugable: se mueve de manera estable, fluida y sin problemas, algo vital en un hack and slash.

Todo esto se complementa con el toque plataformas que siempre ha tenido la saga. No obstante, hay una diferencia: se han introducido las variantes de mundo abierto, pero sin serlo. Y sacamos declaraciones textuales: “Cuando dices mundo abierto la gente piensa en GTA, pero esto no es GTA. Imagina que tienes una mesa y el mundo abierto es la mesa entera. Darksiders sería sólo el centro, pero ramificado como un árbol de arriba hacia abajo”.

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Con esta comparación, los creadores querían introducir el mapeado construido. Furia se va a poder ir moviendo a través del escenario como si estuviera recreado en diferentes niveles. Cada parte tiene sus propios secretos, sus objetivos secundarios, su manera de entender la historia.

Además, una de las señas de identidad que quieren para esta tercera parte es la dificultad. No va a existir un HUD o elementos que recalquen adónde tiene que ir el jugador. La idea es que explore, que experimente por sí mismo cada uno de los puntos que tiene el escenario. ¿Es complejo y puede ser un hándicap? La respuesta es “sí”, pero es una decisión premeditada y consensuada por todo el equipo.

Darksiders 3 se postula para finales de año como una gran alternativa a todo el conglomerado de videojuegos triple A que inundan las estanterías en esas fechas. Tiene dura competencia y no lo va a tener sencillo, pero sabe que cuenta con una nutrida base de fans muy fiel. Y lo mejor de todo: también puede servir como punto de introducción para los que no estén acostumbrados a Darksiders.

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