5 sagas muertas de Konami que deben volver

Generaciones de fans

Konami ha sido tantos años una marca relevante, que sin duda ha logrado dejar huella en varias generaciones sucesivas. Desde los jugadores de microordenador que pudieron descubrir éxitos como Penguin Adventure, Metal Gear y otros que comentaremos, hasta los habituales de recreativos con algunos de las adaptaciones más interesantes del panorama, como The Simpsons o TMNT. Tenemos que llegar, sin duda, también a los años 90’  y 2000, donde nuevos nombres como Silent Hill, Pro Evolution o la resurgida saga Metal Gear con sus Solid, se convirtieron en estandarte. Sin embargo, Konami hoy ya no es lo que era.

El catálogo habla por sí sólo, y los lanzamientos de Konami en los últimos tiempos, al menos en consola y PC, se han visto reducidos a su mínima expresión. El futuro no se presenta muy alentador, y por lo pronto sólo la continuidad de la saga PES, junto al experimento de Metal Gear Survive, parecen los planes claros de la marca en consolas, además de la nueva versión de Zone of the Enders: The 2nd Runner en 4K y VR.

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Sin grandes proyectos a la vista, de lo que no cabe duda es de que si la marca japonesa tuviese intención de volver al terreno del videojuego tradicional no necesitaría reinventar la rueda. Su tradición esconde algunas de las licencias más famosas de todos los tiempos, y ahí nos dirigimos, a cinco franquicias ahora inactivas, algunas desde hace décadas, y sin duda añoradas.

Silent Hill, Contra o Castlevania entre lo más evidentes

En primer lugar, la más evidente: Silent Hill. Con Akira Yamaoka en otros proyectos, y Keiichiro Toyama también envuelto en su Gravity Rush, el alma de los juegos originales está ya muy lejos de la saga de terror. Los grandes nombres de Konami en sus equipos de desarrollo han dejado la compañía paulatinamente a lo largo de la última década, por lo que esta situación con Silent Hill será una constante en absolutamente todos los juegos a mencionar. Sin embargo, el coletazo más reciente de la franquicia apuntaba, con Silent Hills, en una muy buena dirección: una idea completamente renovada para la saga, un cambio de aires, y un equipo de excepción a la cabeza del proyecto con Kojima y Guillermo del Toro como maestros de ceremonias. El conflicto de Kojima y Konami acabó con el juego cancelado, y desencadenó el enfado mayúsculo de Del Toro, que no perdió ocasión durante mucho tiempo para echar pestes de la compañía japonesa. Con esta cancelación, Silent Hill perdió cualquier oportunidad inmediata de retorno, mientras que de todas las licencias que hoy podemos poner sobre el tapete es una de las contemporáneas con una viabilidad más obvia.

Lo mismo cabría decir de Castlevania. Muchísimas sagas emblema trataron de ser renovadas durante la generación de PS3, Xbox 360 y Wii. La mayoría, como Bionic Commando, con muy poco éxito. Pero los Castlevania de Mercury Steam, especialmente el primero de ellos, son juegos con total sentido. Indudablemente revisionistas respecto a la franquicia de la que parten, pero incuestionablemente producciones muy interesantes. En un momento en el que Castlevania había encontrado la fórmula para los juegos en 3D tras años de intentos fallidos, Konami cortó por lo sano con la franquicia que hoy está desierta. El último reducto para el fan de Castlevania es el Bloodstained de Igarashi, uno de los más exitosos en Kickstarter, y ante el que es difícil no sentir cierto escepticismo en estos momentos.

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Sin la sonoridad mediática de Castlevania y Silent Hill, Contra ha sido una franquicia en constante movimiento desde el año 1987. Con origen en la época de los recreativos y los 8-bit, los Contra o Probotector nos han venido acompañando de manera prácticamente ininterrumpida. De por medio, experimentos de todo tipo y no pocos estudios implicados, pero en los registros más recientes obras como Contra 4 de WayForWard, que merece la pena recuperar, y, sin duda, el desafiante Hard Corps: Uprising de Arc System Works. Justo con la entrega de Arc System Works en 2011 la franquicia también paró en videoconsolas, y desde entonces, silencio. Sin embargo, la actualidad nos hace pensar en Cuphead, uno de los grandes lanzamientos del año. Un juego que toma muchísimo de la fórmula Contra, y que muestra que en el tiempo de los indies con el arcade de moda Contra sigue teniendo completo sentido.

Otros más lejanos, ya convertidos en clásicos de culto

De igual forma, el desarrollo independiente también enarbola la fórmula del lejano The Maze of Galious. Francisco Téllez, desarrollador español, cifra UnEpic como la obra que le ha puesto en el mapa. Un juego que, sin duda, encuentra el clásico de Konami para MSX como la principal fuente de inspiración. Si UnEpic ha funcionado entre crítica y público, ¿qué hace pensar que no habría hueco para la fórmula The Maze of Galious en la actualidad?

Por último, un par de juegos que todavía hoy merece la pena recuperar: Snatcher y Policenauts. Ambos de la mano, ambos bajo el sello de Kojima, y dos títulos que surgen de la necesidad. El director de Metal Gear, harto de que los programadores desconfiasen de sus instrucciones al ser él ajeno al perfil técnico, se escudó en el género de la aventura para tener el control total de los proyectos. Fruto de este giro surgen este par de juegos, que en la era de de las videoaventuras y los walk simulator tendrían también mucho que decir. En particular Snatcher, aprovechando que el Blade Runner vuelve a estar de actualidad.

Estos son sólo cinco ejemplos de añoranza, unos más evidentes y otros más lejanos. Una pequeña lista que se podría alargar mucho y en muchas direcciones, porque el catálogo de Konami es inabarcable.

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