Sunset Overdrive, Impresiones Gamescom

A la Gamescom viaja el equipo de Insomniac Games con un Sunset Overdrive capitaneado por Ted Price, uno de los pocos diseñadores que saben lo que es trabajar para las dos grandes de la industria –antes de Playstation, ahora en Xbox–. El juego de acción en tercera persona exclusivo de la nueva generación de Microsoft llegará a las tiendas este año, el 28 de octubre, y formará parte del selecto club de videojuegos que cuentan con el máximo apoyo de la compañía de Redmond. Fruto de esta relación nace la Xbox One Edición Especial de Sunset Overdrive que se lanzará por 399 euros incluyendo un ejemplar del juego y extras.

Los esquemas básicos que componen Sunset Overdrive se resumen en una sensación: frenetismo. La demo para un jugador mostrada en el evento germano nos trasladó a Sunset City, urbe de corte futurista ubicada temporalmente en el año 2027 en la que se produce una plaga de mutantes provocada por los efectos secundarios de una bebida energética.  El caos presenta un mundo abierto urbanita donde la partida jamás es horizontal gracias a la versatilidad del movimiento del personaje, que debe cumplir los objetivos mientras despacha enemigos saltando y colgándose para deslizarse por cables. Es un shooter con plataformas.



La mejor manera de comprender cómo funciona Sunset Overdrive es entendiéndolo como un híbrido entre inFamous, el último Devil May Cry y Bulletstorm: saltos, disparos y exceso de balas con chascarrillos. Nuestro personaje, un ex empleado de FizzCo, la empresa de bebidas responsable del caos, es un Tarzán moderno, un hombre capaz de encaramarse a una montaña rusa, derrapar por sus raíles y acabar saltando a la azotea de un edificio de decenas de plantas con el impulso de un globo hinchable. Sunset Overdrive no solo rompe la horizontalidad frecuente de los shooters, sino que también recupera ese sabor arcade donde lo que importa no solo es sobrevivir, sino matar cuantos más enemigos mejor.

Aquí también entra en juego el estilo. La cantidad de armas disponibles en la partida y la originalidad de las mismas, todo un sello de la casa Insomniac (Ratchet & Clank, Resistance), hacen que las partidas sean divertidas y cómicas. Utilizando el clásico menú circular (GTA, Mass Effect) podemos cambiar en todo momento de armas. En la variedad está el gusto: desde un lanzador de discos que amputa miembros hasta un bazooka de ositos explosivos parlanchines, sin olvidar la espada láser, el disparador de fuegos artificiales y la incineradora, entre otras muchas que podremos seleccionar para configurar al gusto el personaje.





Tener una selección de armamento tan inverosímil y a la par destructiva no nos hará invencibles. De hecho, en la demo caímos presa de los mutantes un par de veces al no controlar la potencia de fuego real del armamento. En Sunset Overdrive es fundamental medir las distancias, no disparar cuando el enemigo está demasiado cerca con el arma indebida y saber saltar en el momento oportuno. Los cambios de armas se realizan con unos segundos de tiempo-bala de margen para efectuar la decisión, por lo que la tensión que provoca el acoso de los enemigos se nos deja respirar durante unos breves instantes.

La munición viene de la mano de la creatividad y de los escenarios en Sunset Overdrive. La demo, cien por cien estable en lo técnico, nos colocó en el parque de atracciones de Sunset City, donde la invasión de mutantes estaba extendida y debíamos enfrentarnos a varias hordas de enemigos básicos y a un enemigo de mayor tamaño, algo así como un gigante cuya reacción principal era embestir al personaje. Saltando, enganchándonos de las cornisas, volando sobre los cables y usando elemento del escenario para impulsarnos (globos, rejillas de aire acondicionado, etc.) se concede un toque innovador a un género con poco movimiento.





Pero si algo tiene Sunset Overdrive además de una enorme originalidad en cuanto a armas y diseños de personajes y escenarios, es un sistema de juego que acentúa el tono arcade por encima de lo serio y nos lleva a jugar de manera estilosa para acumular puntos con muertes, acrobacias y movimientos imposibles entre efectos de sonidos de bonus por conseguir objetos y chascarrillos del personaje, personalizable con estos puntos que obtendremos. Todo en un hilo argumental que no se toman en serio ni en Insomniac.

Sunset Overdrive tiene una buena base para convertirse en uno de los grandes de Xbox One en el cierre del 2014. Insomniac Games posee plena carta blanca para cumplir con una de las tareas que mejor sabe hacer: diseñar momentos absurdos, y de eso en este juego de acción en tercera persona con tintes arcade habrá para parar un tren. Que lo consiga dependerá de cómo sepan trabajar en el modo para un jugador, que se presume como un producto altamente rejugable, y en su modo multijugador Chaos Squad para ocho jugadores. Será a finales de octubre cuando nos dejemos embriagar por esta refrescante shooter.