Warhammer 40.000: Dawn of War II - Retribution
- PlataformaPC8.5
- GéneroEstrategia
- DesarrolladorRelic Entertainment
- Lanzamiento04/03/2011
- TextoEspañol, Inglés
- VocesEspañol, Inglés
- EditorTHQ
Al Emperador lo que es del Emperador
Vuelve Warhammer 40.000 con su nueva expansión de Dawn of War II. Una vez superadas la campaña inicial y su ampliación en Chaos Rising, ha llegado la hora de medir nuestras fuerzas en la nueva trama argumental de Retribution.
El universo de Warhammer 40.000 vuelve a las pantallas de nuestros ordenadores gracias a una nueva expansión de Dawn of War II. Si disfrutaste con la campaña original y su primera ampliación, Chaos Rising, no podrás dejar pasar la oportunidad de medir tus fuerzas contra el resto de facciones de esta fantástica ambientación, seguida por miles de fans desde su versión en tablero hasta su adaptación al videojuego.
Porque para poder hablar de Warhammer 40.000 es necesario referirse a su versión inicial como wargame'. Game Workshop ha sido una compañía que ha sabido marcar tendencia en la explotación de sus licencias, contando con dos grandes universos: Fantasy y 40.000. Ambas ambientaciones son en esencia similares, salvando que una se ubica en un mundo de fantasía épica y la segunda, que es la que nos interesa para el análisis de hoy, posee un argumento de ciencia ficción trabajado a lo largo de ediciones y ediciones de su wargame', libros de ejército correspondientes e incluso novelas.
Dawn of War II, al igual que su predecesor, no fueron las primeras incursiones de la franquicia en el mundo de los videojuegos, pero sí que son las adaptaciones más modernas de este juego. Las dos versiones han sido aplaudidas tanto por los seguidores del wargame' como por los amantes de los juegos de estrategia en tiempo real, y es que el universo de Warhammer 40.000 se prestaba a grandes éxitos. Distintas facciones perfectamente definidas y con una esencia única en cada una de ellas, así como una historia de guerras y eternas confrontaciones entre las razas que habitan los muchos mundos de este universo.
Chaos Rising. La ampliación trajo consigo nueva campaña y nuevas facciones para el regocijo de los fans, que veían como las opciones se iban ampliando. Siguiendo la estela del buen trabajo realizado con Chaos Rising, Retribution quiere repetir fórmula para continuar alargando la vida de un título que ya cuenta con dos años de vida, pero que sigue cautivando. Y una vez más, nos encontramos ante una ampliación stand-alone' que nos permitirá participar en la nueva campaña aunque no poseamos una copia de Dawn of War II.
Haberse aprendido la fórmula del éxito no implica que uno deba asustarse de los posibles cambios, o al menos esto debe de ser lo que ha pensado Relic Entertainment. Una de estas modificaciones la encontramos en el mismo modo de campaña, que en esta ocasión nos va a permitir completarla con cualquiera de las facciones integradas en el juego. De esta manera, y sin importar nuestra preferencia a la hora de escoger ejército, podremos seguir la historia con ligeras variaciones en función de la raza escogida, en lugar de limitarnos a una campaña predefinida para una única facción.
Los escenarios de la campaña, al igual que en anteriores ocasiones, siguen a mitad de camino entre la estrategia en tiempo real más purista y la más orientada a la acción rápida. Aunque se quiera criticar la ausencia de una gestión de recursos más completa, hay que recordar que Warhammer 40.000 no es un wargame' con gestión de recursos, sino que cada participante se limita a comprar una cantidad de unidades con unos puntos determinados y pone sus miniaturas en la mesa. A este efecto, la fórmula usada por Relic Entertainment se queda a mitad de camino, demostrando ser lo suficientemente fiel al juego original.
Aún así, en esta nueva campaña tendremos la posibilidad de reclutar unidades en mitad de la refriega, con lo que se abre un nuevo componente estratégico ausente en las entregas anteriores y que proviene directamente del modo multijugador del título. Esta novedad tiene el efecto de añadir una nueva variable a la hora de decidir la forma de resolver una misión, y quita algo de importancia a la esencia táctica en la que se basa Warhammer 40K. Aún así, como juego de estrategia en tiempo real, parece que la idea responde sin demasiadas pegas, y se adapta muy bien al funcionamiento esperado en la campaña.
Esto no quita que la acción se siga centrando en la figura de las unidades únicas o héroes. Su resistencia sigue siendo mayor y su capacidad de abatir enemigos es envidiable, a lo que tenemos que unir las habilidades especiales de cada uno. Cada facción cuenta con su grupo de personajes únicos, que irán recopilando puntos de experiencia para seguir mejorando sus características y adquiriendo nuevas habilidades especiales. Asimismo, es posible que en una fase nos encontremos con algún objeto que pueda ser portado por alguno de ellos, recibiendo una bonificación y permitiendo cierto grado de personalización del héroe.
La unión de los héroes y las escuadras tradicionales con la posibilidad de reclutar nuevas unidades durante la partida tiene un resultado inmediato: mayor cantidad de tropas que interviene en una batalla. De esta manera, los enfrentamientos durante la campaña pueden llegar a ser tan espectaculares como los de las partidas multijugador. Por supuesto, esto significa que muchos verán el camino despejado, se dedicarán a producir unidades en exceso y a avanzar con la idea de aplastar a todo el que se cruce en su camino lo que supondría un tremendo error para los que sucumban a esta tentación.
A nivel multijugador, la principal novedad es la posibilidad de tomar parte en partidas cooperativas para superar la trama de la campaña, compartiendo facción. Sin embargo, en lo que a las partidas enfrentadas se refiere, no encontramos novedades salvo la incorporación de la facción de la Guardia Imperial y sus inquisidores. Se mantiene el modo de mapas Final Battle', que nos permite escoger un héroe para soportar las acometidas de hordas de enemigos durante tanto tiempo como podamos. Perfecto para zanjar de una vez las discusiones con nuestros amigos sobre que héroe es más poderoso.
Incluir una nueva facción siempre es un trabajo arriesgado, sobre todo porque será una de las primeras a poner a prueba en las partidas contra otros usuarios. Afortunadamente, los Guaridas Imperiales se han incluido de manera acertada junto al resto de bandos, de manera que no notaremos ningún desequilibrio ni a favor ni en contra de estas nuevas tropas. En cuanto nos acostumbremos un poco a sus unidades y a las habilidades de los héroes de su bando, podremos manejarlos como si llevasen en el juego desde el lanzamiento de Dawn of War 2 hace un par de años.
Técnicamente, Retribution mantiene el nivel de calidad que se ha podido disfrutar durante toda la saga. Los modelados de las unidades recrean fielmente sus correspondientes miniaturas del wargame', y seguimos contando con la posibilidad de personalizar su aspecto con el modo de pintado de unidades. Las texturas se han mejorado para dar lugar a escenarios mucho más detallados que antes, con lo que el aspecto general gana un poco respecto a las versiones anteriores. Realizar estas tareas sin una modificación real del motor gráfico del juego es una tarea ardua, y hay que reconocer el mérito de Relic Entertainment para aumentar la calidad.
El juego se distribuirá completamente doblado y traducido, y de forma bastante acertada dicho sea de paso. Con todas estas características se intenta mantener un nivel de calidad digno de la saga, y es que la adaptación de este wargame' no se merecería menos teniendo en cuenta de que este país cuenta con una gran legión de seguidores de este hobby. Puede que quienes busquen un RTS más puro sigan sin ver claras las opciones de Dawn of War 2: Retribution, pero tampoco puede decirse que ese sea el campo de batalla en el que el título de Relic Entertainment quiera medirse.
Finalmente, seamos amantes de esta saga o no, solamente queda asegurar que nos encontramos ante un título que está sabiendo alargarse a buen ritmo y con un gran nivel, sabiendo mantener los aspectos más aplaudidos e innovando lo suficiente como para no quedar relegado al cajón de los juegos más antiguos de dos años. Aún así, cabe preguntarse si Relic Entertainment no estará dejando pasar demasiado tiempo y el momento de plantearse una tercera entrega del juego debería irse acercando. Desde luego, si se aplica todo lo aprendido volverá a ser un éxito.
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del género. Está bien cuidado a todos los niveles. Cómpralo.