La polémica por el restrictivo DRM incluido en Spore, que ha sido objeto de múltiples quejas debido a las restricciones que plantea a los usuarios, ha motivado la presentación de una demanda contra EA por parte de varios compradores norteamericanos del juego. En esa demanda, se afirma que "aunque se dice a los consumidores que el juego utiliza tecnología de control de acceso y protección anticopia, no se les dice que esta tecnología [SecurROM] es realmente un programa independiente que se descarga, instala y opera en su ordenador. Una vez instalado, se convierte en una parte permanente de los programas del usuario. Incluso aunque el usuario desinstale Spore totalmente de su ordenador, SecurROM permanece en el ordenador a menos que el consumidor borre totalmente el disco duro formateándolo o lo sustituya."
En la demanda se acusa a EA de ocultar "intencionadamente" que el juego utiliza SecurROM y que este programa no sólo influye en el funcionamiento del ordenador, sino que además transmite información a EA sobre el usuario. Por el momento, la compañía norteamericana no ha efectuado ningún comentario oficial al respecto.