Suerte, y al toro

Un juego consolidado

El 9 de Octubre de 2001, salía a la venta un ambicioso proyecto de juego de Rol multijugador llamado Dark Age of Camelot (aunque en España tuvimos que esperar 2 años más para tenerlo entre nosotros), un juego basado en las míticas tierras de los tres reinos: Albion, Hibernia y Midgard y las leyendas artúricas. Desde su salida al mercado, el programa desarrollado por la compañía Mythic Entertainment cosechó grandes éxitos, convirtiéndose en una gran alternativa a juegos del calibre de Ultima Online, EverQuest o Asheron's Call.

Hoy, unos cuantos más tarde, llega hasta nuestras manos su quinta expansión, Labyrinth of the Minotaur, y lo hace con un único objetivo; que los aproximadamente 12.000 usuarios que juegan diariamente a Dark Age of Camelot puedan seguir disfrutando de unos de los MMORPG más consolidados del mercado.

Todo para el usuario

El género de los juegos de Rol multijugador es un mercado complicado, y la cosa se pone todavía más difícil si de lo que estamos hablando es de una expansión, ya que hay que tener en cuenta si las novedades que ofrece el nuevo título son suficientes como para satisfacer a una gran comunidad de jugones ávidos de horas de juego y novedades. Hay que buscar satisfacer las necesidades de los más expertos y a su vez incluir los suficientes atractivos como para captar a nuevos jugadores.

Pero esto es algo de lo que pueden sentirse orgullosos los chicos de Mythic, ya que con el paso de los años la relación que la compañía y los usuarios mantienen es tan cercana, que esta última expansión se ha creado para intentar satisfacer todas las sugerencias que recibían por parte de toda la comunidad de usuarios. Por lo que el juego está desarrollado basándose en las necesidades de los jugadores de Dark Age of Camelot.

Además, por si todo esto fuera poco, se pueden descargar de forma gratuita todas las expansiones (incluida esta última) en la propia web del juego, permitiendo a los usuarios además solicitar las cajas de los juegos para complementar la jugoteca, para ofrecer la posibilidad de poder probar el juego durante 14 días, sin gastarnos ni un solo euro. Eso sí, una vez vencidos esos 14 días si queremos seguir disfrutando de Dark Age of Camelot deberemos de pagar por las licencias del juego y también una cuota mensual, que es de 12 € al mes, aunque hay diversas ofertas en su página web.

En esta edición en particular, el nivel gráfico es notable, por encima de todo, se han intentado suavizar todavía más las texturas y aunque en algunos aspectos muy concretos se pueden apreciar ligeros errores gráficos, el aspecto general del laberinto y de los personajes es bastante bueno.

A pesar de que hoy en día hay títulos que superan gráficamente a Labyrinth of The Minotaur, el juego de Mythic luce lo bastante sobrio como para hacernos sentir satisfechos del nivel gráfico del juego.

En el apartado sonoro, se ha seguido la línea del apartado gráfico, intentando utilizar sonidos más nítidos y con menos ‘ruido' que en anteriores expansiones. Se han añadido algunos efectos nuevos para los combates y se han mejorado algunos ya existentes. Destacar también que se han añadido nuevas músicas para las nuevas zonas, y que se han añadido también antiguas melodías ya existentes, pero con mayor calidad sonora que las mismas que aparecían en títulos anteriores. Un notable para los efectos de sonido y la música de Labyrinth of The Minotaur.

Si conoces la saga, la jugabilidad te resultará muy familiar, ya que es prácticamente la misma que en las anteriores entregas y muy similar a la de la mayoría de MMORPG. Dispondremos de una vista en primera persona, otra en tercera persona y una cámara fija, aunque la más recomendable sea la vista en tercera persona.

Destacar el RvR (reino versus reino) que le ha distinguido de otros juegos, que no es otra cosa que la batalla entre los tres reinos diferentes que aparecen en Dark Age of Camelot.

Por lo tanto, Labyrinth of The Minotaur sale al mercado sin grandes novedades en cuanto a jugabilidad respecto a anteriores entregas, algo que los más veteranos agradecerán, al no tener que cambiar sus hábitos de juego, adquiridos durante todos estos años.

Bajo este argumento, se nos presenta la nueva expansión de Dark Age of Camelot, que presenta las suficientes novedades como para aventurarnos a decir que se trata de la mejor expansión aparecida del juego, por encima de todas las demás. Se trata de una versión que trata de pulir detalles y de ir mejorando aspectos que no eran lo suficientemente buenos. El laberinto del minotauro no trata de revolucionar el concepto de juego sino que lo que busca es mejorar y pulir aquellos aspectos que todavía eran mejorables.

Además una nueva clase se ha incluido en el juego, el Kan-Laresh, una clase combatiente fiel al dios Laresh. Manejan nuevas técnicas, desconocidas en el resto de reinos, y que tiene 5 disciplinas diferentes de especialización. Aparte de los minotauros, otras razas como los britanos, los celtas y los escandinavos tienen las habilidades necesarias para convertirse en un Kan-Laresh.

También hay una nueva clase de objetos mágicos: los objetos místicos. Estos se colocan en un nuevo emplazamiento del personaje, situado entre el collar y el peto. Los objetos místicos se dividen en tres niveles, según sus características, podemos encontrarnos con objetos místicos menores, superiores y mayores. Los iremos consiguiendo a la vez que vayamos acabando con los enemigos, algunos de ellos serán poseedores de estos objetos, por supuesto, cuanto más fuerte sea el enemigo al que derrotemos mejor será el objeto místico que nos dejará tras su muerte. Estos objetos otorgarán al jugador poderes inéditos hasta la fecha y un buen puñado de bonificaciones.

Esta nueva extensión ha sido creada para los jugadores de nivel más alto, gracias a las nuevas búsquedas de nivel campeón planteadas en el laberinto y sus alrededores, lo que ha provocado que los chicos de Mythic hayan incluido 5 niveles adicionales y la posibilidad de conseguir nuevos títulos, que son: campeón de nivel 6, aliado de los minotauros; campeón de nivel 7, campeón legendario; campeón de nivel 8, campeón idolatrado; campeón de nivel 9, héroe eterno y campeón de nivel 10, héroe supremo. Todos estos niveles y títulos novedosos, serán especialmente del agrado de los jugadores más veteranos de Dark Age of Camelot.

Y además se ha prometido que prácticamente mensualmente se irán añadiendo contenidos arguméntales al juego, que harán que este MMORPG tenga un argumento mucho más profundo y maduro que la mayoría de juegos del mismo género. Pese a que esté en principio ideado para jugadores de nivel alto (se recomienda un nivel 45 como mínimo) se ha incluido un sistema de aumento rápido de experiencia, para que los más noveles puedan ponerse rápidamente a punto y puedan disfrutar igualmente del juego.

Tras ellas, todo un entresijo de pasillos y salas en las que se encuentran las reliquias. Cada reliquia tiene unas características propias. Cualquier personaje que tenga una reliquia se beneficiará de sus poderes una vez esté fuera del laberinto. La fuerza de estos objetos se divide en tres niveles: las reliquias de primer nivel, aquellas que afectarán únicamente a su portador; las reliquias de segundo nivel que afectan a un grupo y finalmente las de último nivel que afectan a una zona entera.

Un aspecto importante de las reliquias es que para que podamos seguir beneficiándonos de sus poderes deberemos de matar y matar, ya que las reliquias requieren sangre de los enemigos y sino satisfacemos sus necesidades de sangre regresarán a su lugar de origen.

Y la verdad es que una vez metidas muchas horas de juego en Dark Age of Camelot, uno no entiende el por qué este juego no tiene la misma aceptación y popularidad que el por otra parte genial juego de Blizzard. Y es que reúne todos los requisitos necesarios que todo buen juego de Rol multijugador necesita: un universo atractivo, una capacidad de personalización del personaje casi infinita, una gran variedad de misiones diferentes, un argumento interesante y una buena organización en cuanto a servidores online se refiere.

Pese a todo ello World of Warcraft tiene muchísimos más usuarios, y una comunidad de jugadores que crece y crece. Aunque en favor de Dark Age of Camelot hay que decir que los usuarios son muy fieles al juego de Mythic Entertainment.

Por lo tanto, si te gusta el rol masivo multijugador, tanto World of Warcaft como Dark Age of Camelot son excelentes opciones, por lo que a la hora de elegir tendrás que tener en cuenta determinados factores personales que hagan que te decantes por uno u otro. Los dos merecen la pena.

Tal vez la mejor expansión de Dark Age of Camelot aparecida hasta la fecha. Una mazmorra enorme (la más grande del juego), numerosas e interesantes novedades, misiones de nivel campeón requeridas por los usuarios, una nueva raza, nuevos objetos, un nuevo giro de guión…y todo unido a lo que ya ofrecía Dark age of Camelot hace que esta quinta expansión reúna los alicientes necesarios como para atraer a una comunidad fiel de usuarios, que cada noche se reúne en los diferentes servidores del juego.

Y todo a un precio asequible, aunque por supuesto hay que pagar una cuota mensual, de 12€ al mes (para más información sobre el resto de ofertas mirar en su página web) y luego lo que vale cada determinada licencia de los juegos, que no es demasiado viendo como está el mercado de los videojuegos.

En conclusión, nos encontramos ante un MMORPG consolidado, con años de experiencia, con una comunidad de usuarios grande y fiel y con una compañía comprometida con su juego y con las necesidades de sus usuarios. Un juego en constante actualización y evolución, y una gran alternativa al actual dominio que ejerce en el sector World of Warcraft.