Cowboy Bebop

Viajar por el espacio tras la busca de criminales recorriendo ciudades exóticas y ambientes decadentes suena como una premisa bastante atractiva sobre la cual desarrollar un videojuego, especialmente si este está basado en uno de los mejores animes del mercado.

Cowboy Bebop, pese a su embarazoso título, es uno de los mejores animes de los últimos años: presentada en Japón en 1998, esta serie de veintiséis episodios (y posteriormente una película cuyo título venía de una canción de Bob Dylan, Knocking on Heaven's Door) destacaba por una galería carismática de personajes, unos episodios generalmente autoconclusivos originales y convincentes, un sentido del humor fino, una trama de fondo oscura y fatalista al estilo film noir, unos fantásticos diseños, una animación de lujo y una banda sonora fabulosa compuesta y parcialmente interpretada por la aclamada Yoko Kanno (y sus negros), compositora (con sus negros) también de la música de series como Record of the Lodoss War o La Visión de Escaflowne.

Todos estos elementos, sumados a una de las direcciones más cuidadas que se han visto, hicieron que Cowboy Bebop acabase siendo considerada tanto por la crítica como por el público como una de las mejores series de anime de todos los tiempos, y como apunte personal se debe decir que- de todas las series de animación nipona que ha visto el redactor de este artículo- Cowboy Bebop es  la mejor de todas.

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El videojuego aquí tratado es el segundo que aparece basado en esta serie, siendo el primero un shooter especial estilo Starfox aparecido en Japón a la vez que la serie, del cual lo más destacable es la belleza de la portada, pues tal juego no estaba precisamente dotado de grandes gráficos, originalidad o cualidades jugables. Este nuevo título de acción, desarrollado por Banpresto, ocurre a ras de suelo y sin el uso - hasta que se confirme lo contrario- de naves espaciales.

Siguiendo la idea de la serie, que gira en torno a un grupo de cazarrecompensas especiales, podremos controlar a los tres personajes principales de esta, es decir, Spike Spiegel, Jet Black y Faye Valentine (aunque no hay que descartar la posibilidad de algún minijuego con Ed o Ein), y abrirnos camino a patadas y puñetazos por las hordas de enemigos que atacarán, al más puro estilo Final Fight.

Cada uno de los cazarrecompensas tendrá su estilo, de forma que las animaciones se ceñirán perfectamente a las vistas en la serie. Podremos optar por atacar a los enemigos mediante el uso de armas de fuego o mediante el combate cuerpo a cuerpo. Al final de cada nivel se nos dará una puntuación, y el uso del combate cuerpo a cuerpo está más premiado que los golpes a pistola, que además no parecen por ahora excesivamente efectivos, pues ni el control del arma es todo lo cómodo que se puede esperar (hay que mantener pulsado R2) ni los disparos requeridos para abatir a un enemigo son pocos. De esta manera, el uso de la pistola se limita más a posibles interacciones con el escenario, como el hecho de poder disparar a elementos que hagan que las cosas vayan a nuestro favor: por ejemplo, un tiro al soporte de un contenedor de agua sobre un edificio hará que este aterrice sobre las cabezas de los personajes hostiles.

La mecánica de los combates se presenta mucho más evolucionada. Los golpes básicos los daremos con un botón, pero mediante los otros que enlazaremos en secuencias podemos realizar diversos combos seguidos hasta terminar con el enemigo. Enlazar todos los golpes con el ritmo adecuado obviamente lleva a golpes bastante espectaculares, acompañados de su pertinente efecto gráfico de desenfoque.

Sin embargo, y como punto negativo, según las opiniones de aquellos que han probado el juego - que se encuentra todavía en una etapa más o menos temprana de desarrollo- el control entre personaje y personaje es demasiado parecido, siendo las principales diferencias la velocidad o fuerza de los golpes, ya que obviamente Jet  será más lento pero más fuerte que Faye. Es de esperar que más adelante se solucione este problema, sería interesante que cada personaje estuviese dotado de habilidades únicas.

Los escenarios son coloridos como en la serie, aunque quizá da la sensación de que hay algo de barroquismo en el color. Por otro lado, y a pesar de que todavía no se ha mostrado nada de la banda sonora, cabe decir que la música corre a cargo de Yoko Kanno (y sus negros) lo que es sinónimo de calidad, por lo que parece que al menos este apartado está asegurado.

En conclusión, aunque Cowboy Bebop sigue estando bastante verde, parece una apuesta bastante buena, y además se basa en una licencia excelente, pero a la cual va a ser difícil hacerle justicia. Los detalles que se conocen son pocos, y quedan por mejorar algunas cosas, pero el planteamiento es prometedor, cosa que hace que sea merecedor de ser tenido en cuenta, y cabe esperar buenos resultados.

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