Let's bomb the world!

¡Lo ha vuelto a hacer! La mascota de Hudson acaba de traernos otra aventura cargada de adicción y está dispuesta a demostrar que aún tiene mucho que decir en esto de los videojuegos. Ya podéis ir anulando las tareas que tengáis a corto plazo porque pocas horas os quedarán una vez os hagáis con este título.

Cada plataforma nueva que aparece en el mercado suele reunir, tarde o temprano, varias sagas con experiencia en visitar todo tipo de formatos. Una de ellas suele ser Bomberman, que vez tras vez se encabezona en demostrarnos que todo se resuelve a base de bombas. En esta ocasión alguien ha robado la estatua dorada de Bomberman que se encontraba en el país de nuestro protagonista. Al huir de tal fechoría, el ladrón dejó abierta la puerta interdimensional por la que escapaba, circunstancia que nuestro héroe aprovechó para seguirlo y entrar en una dimensión paralela. Aquí comienza ésta nueva aventura que aterriza en nuestras consolas. ¿Es lo suficiente original como para engancharnos una vez mas? Permitidme que os lo explique...

La historia se repite

El concepto de juego de la saga Bomberman es tan simple como adictivo. La misión de cada fase, si es que lo podemos llamar así, es destruir a todos los enemigos que en ella aparecen a base de explosiones provocadas por nuestras bombas. Una vez liquidados debemos buscar la puerta que nos llevará a la siguiente fase. A simple vista puede dar la sensación de ser tarea fácil, pero a medida que avanzamos los enemigos son mas numerosos y mucho mas rápidos. Básicamente éste viene a ser el esquema del juego, teniendo en cuenta que también incluye un modo multijugador muy recomendable.

g r á f i c o s

Lo primero que hay que destacar es que son muy simples. Y que son en dos dimensiones. Siempre ha sido así. Incluso cuando la potencia ha permitido recrear enormes mundos en 3D  y enemigos compuestos de tropecientos polígonos, Bomberman ha preferido mantener las formas y el espíritu que le ha permitido ser uno de los juegos mas conocidos y que en mayor número de plataformas ha aparecido de todos los tiempos. Así que una vez mentalizados sobre que tipo de juego veremos, debemos decir que sus gráficos podían haber sido mejores. Nos gustaría decir que son las mejores 2D del mercado de las portátiles y que se mueve realmente bien, pero os estaríamos engañando.

Debido al ya conocido problema de la pantalla de N-Gage (es muy pequeña, sí) tanto Bomberman como sus enemigos se ven diminutos. Las animaciones de nuestro héroe son un tanto artificiales, moviéndose francamente mal y con una lentitud que desesperará a los que están ávidos de acción frenética y desenfrenada.  Los escenarios son bastante variados puesto que visitamos varios mundos: el interior de un volcán, una selva e incluso el típico mundo helado en el que  resbalaremos en según que zonas. Pero pecan de monótonos y no son nada espectaculares.

Además, si comparamos este juego con otro Bomberman ya aparecido hace años en un soporte teóricamente inferior como es GBA, nos encontramos que el cartucho para la portátil de Nintendo es claramente superior en todos los aspectos incluido el gráfico. Este apartado, por desgracia de todos sus fans, se ha quedado a medio camino entre regular y malo.

m ú s i c a    y    s o n i d o   f x

La música que se escucha en el juego son las típicas melodías made in Bomberman. Temas alegres y despreocupados que en ocasiones se nos repetirán una vez tras otra hasta  instalarse en nuestras cabezas y dejarnos aburridos de ellos. Por suerte cambian con cada mundo nuevo, así que con un poco de suerte los oiremos poco rato. Teniendo en cuenta que apenas hay fx, debemos decir que están bastante bien conseguidos. Las explosiones de las bombas suenan bien y todos los sonidos que oímos al coger ítems y demás nos recuerdan a las viejas glorias de hace años. Poco mas se puede decir de este apartado, que aprueba pero sin destacar demasiado.

j u g a b i l i d a d

Llegamos al apartado líder de todos los Bomberman. Serán juegos con gráficos sosillos y música cursi pero la jugabilidad que tienen es de las buenas. Nuestro objetivo es borrar del mapa a todos los enemigos que haya en él. Para ello debemos abrirnos camino mediante la destrucción de los obstáculos que nos encontremos  en nuestro recorrido. El manejo de Bomberman es tan simple como moverse por el mapeado y poner bombas. El personaje se controla muy bien, aunque podemos tacharlo de ser un tanto lento. Incluso los habituales de los Bomberman lo encontrarán un pelín mas lento que de costumbre.

Los ítems que obtenemos al destruir parte del mapeado también serán mas escasos que en otros juegos de esta genial saga. Entre ellos podemos encontrar dinosaurios que nos servirán de montura aumento del  poder destructivo en nuestras bombas,  los que permitirán que pongamos mas de unas bomba de manera simultanea e aquellos que nos permitirán atravesar los obstáculos. Eso sí, cuando perdamos una vida, decir adiós a todo tipo de ítems que hayamos recolectado con tanto esfuerzo durante tantas fases porque los perdemos todos sin posibilidad de recuperarlos. La inteligencia de nuestros enemigos es otro punto un tanto oscuro. Tienen una rutina de movimientos que únicamente se altera con nuestra presencia y es muy fácil adivinar sus pasos y despistarlos.

La dificultad del juego está muy bien implantada puesto que con solo una partida controlaremos al personaje como si hubiéramos jugado toda la vida con él. Debemos decir que, a nivel general tanto las fases como los final bosses, no nos pondrán en muchos aprietos pero ocasionalmente nos quedaremos encallados en algún nivel. Con un poco de paciencia acabaremos saliendo del aprieto y pudiendo continuar adelante. El juego consta de 8 mundos con 5 fases cada uno, lo cual da un total de 40 fases que recorrer. Desde luego no son pocas aunque hay que decir que nos las pasaremos bastante rápido.

El versus de Bomberman

Si por algo destaca Bomberman aparte de su excelente jugabilidad , es por su  divertido y adictivo modo multijugador. Podríamos decir que ha sido uno de los juegos con modo multijugador que mas horas nos ha hecho pasar frente a nuestras consolas en compañía de unos amigos. Tardes irrepetibles de duelos multijugador a cuatro players o dos contra dos hicieron de este personaje un buque insignia en cuanto a juegos multijugador se refiere. Casi todo esto podremos repetirlo en nuestras N-Gage porque el juego trae modo multijugador mediante bluetooth, como viene siendo habitual. Y decimos casi todo porque, desgraciadamente, Hudson solo ha programado un modo multijugador para dos jugadores y no para cuatro como hubiéramos deseado y como realmente tenía que haber sido. Es una alegría a medias. Jugar a dos jugadores es muy divertido y es una experiencia que pocos juegos nos han permitido tener, pero un multiplayer a cuatro bandas hubiera hecho de este juego un referente en este apartado.

c o n c l u s i o n e s

Por fin ha llegado. Se ha hecho de rogar y nos a puesto muchas veces los dientes largos imaginándonos como seria competir con los colegas mediante el bluetooth. Muchos jugadores tenían altas esperanzas puestas en el juego. Decirles que no cambien de idea porque continuamos ante un gran título, pero que tras años en el mercado sin apenas evolución, puede parecer anticuado y repetitivo, con una mecánica cansina y que no aportará novedades a aquellos que hayan disfrutado con él en alguna otra ocasión. A este respecto debemos destacar las novedades que un título para el S.O. Symbian llamado Explode Arena ha sabido añadir basándose en las premisas clásicas del juego de Hudson. Comparando ambos títulos, Bomberman saldría muy mal parado a pesar de su mayor duración; su escasa adaptación a los nuevos tiempos le pasan factura y de qué forma...

Estos aspectos negativos, tales como el flojo apartado gráfico, la lentitud de movimientos o la escasa IA de los rivales, han menguado considerablemente el resultado final del juego. Creemos que con algún mes más de arduo trabajo en el tema gráfico y en el tema multijugador para poder competir 4 jugadores, aparte de alguna mejora más, podríamos estar hablando de un gran juego para el catálogo de la portátil de Nokia. Lamentablemente no ha sido así y el resultado final dista mucho de la perfección. ¿Vale la pena la compra? Os toca decidir a vosotros pero pese a sus aspectos más negativos, hay que destacar su excelente jugabilidad, su excelente modo multiplayer a dos jugadores y sobre todo su precio, que para ser una novedad no está nada mal.

l o    m e j o r