Controla el Entorno

Desde que PC Fútbol abandonó nuestros quioscos y tiendas de ventas, todos los aficionados a los manager de fútbol nos hemos quedado un poco huérfanos. Suerte  que la serie de Codemasters Manager de Liga está ahí para intentar cubrir el hueco...

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Los rivales a batir por este ya clásico han sido el PC Fútbol y el Championship Manager, y ahora que ambos están en horas bajas (el PC Fútbol simplemente desaparecido y el Championship Manager cambiando de desarrolladores y creando las típicas dudas de dicha situación), Codemaster pretende sacar partido y llevar a su terreno a todos los usuarios sedientos de sensaciones fuertes.

Sin duda, Manager de Liga va dirigido a todos aquellos jugadores que disfrutan de la planificación de los partidos, de la teoría del fútbol (sin que esto implique su destreza a la hora de pulsar combinaciones de teclas), de su criterio a la hora de elegir a los mejores jugadores para su estrategia deportiva, y los más hábiles planes económicos para sus finanzas. Si quieres convertirte en un director deportivo, este es tu juego.

En el caso del Manager de Liga de 2004 ésto se ha llevado a cabo de forma impecable. Más allá del menú principal  transparente sobre una bonita y onírica imagen fija de un estadio de fútbol cubierto por unas velocísimas nubes de color naranja- en el que daremos comienzo a la partida (o cargaremos una previamente guardada en nuestro disco duro o tarjeta de memoria), descubriremos el verdadero interfaz de juego. Éste está resuelto en dos niveles; en la fila superior elegiremos la opción general (Equipo, Información, Mercado de Fichajes...) y en la fila inferior se desplegarán todas las opciones a las que podremos acceder dentro de la opción general que hayamos seleccionado.

Con un sencillo sistema de tecas (los cuatro disparadores en el caso de PS2 y los disparadores y el stick derecho en el caso de Xbox) podremos movernos rápidamente entre la cantidad ingente de opciones que el juego nos ofrece y que, en caso de haberse resuelto el acceso de peor maner, hubiese resultado un verdadero caos para el jugador.

Los colores empleados para los menús serán predominantemente de la gama de los azules, aunque dependiendo de los colores del equipo que hayas decidido dirigir, el interfaz sufrirá ligeros cambios, quizá para que nos sintamos más implicados con el proyecto del que acabamos de tomar las riendas. En el mundo del fútbol todo es posible con un poco de pasión.

Es por eso que los aficionados a estos juegos esperan que cada vez se mejore un poco la representación de los partidos, de forma que verlos se parezca cada vez más a los momentos que pasamos con amigos o familiares viendo los partidos de nuestros ídolos del balón (en este caso con el aliciente de estar dirigidos por nuestra batuta). La calidad gráfica, como es obvio es uno de los puntos críticos en este apartado.

Pues bien, el Manager de Liga 2003 cubre con notable las expectativas. No vamos a caer en las odiosas comparaciones (que tampoco son necesarias), pero cabe comentar que con una calidad gráfica inferior a la de los grandes gurús de la simulación futbolística (PES y FIFA), consigue sin embargo que el desarrollo de movimientos, pases y acciones de los jugadores sean más creíbles que muchos de los juegos de manager que a priori cuentan con mejor calidad técnica.

Los detalles como las gotas de lluvia sobre la cámara que graba el partido (nuestra pantalla de televisión, claro está), las sombras de los jugadores, o los muchos movimientos que estos desarrollan durante los múltiples lances del partido, son en cualquier caso los encargados de involucrarnos aún más en lo que ocurren en el terreno de juego.

Se echa muy en falta la voz de un comentarista (que sólo aparece en las repeticiones ofrecidas en el apartado Football One) que amenice los largos partidos y que, aunque en otros juegos se hacen repetitivos, hemos comprobado en otros que pueden llegar incluso a resultar creíbles y útiles a la hora de conocer las pautas del partido. En su defecto podremos escuchar la voz del entrenador cada vez que decidamos hacer un cambio de juego. Comentar que en la versión Xbox dichas voces están en español, pero en PS2 vienen en inglés. Un detalle sin mucha relevancia, qué duda cabe.

Ambas opciones tienen su encanto, ya que puede resultar igual de gratificante crear tu propio equipo de cero y elevarlo a las más altas categorías, que seleccionar el equipo del que seas fan y convertirlo en campeón de liga con una buena gestión deportiva y económica. En cualquier caso resultará toda una recompensa a una labor bien realizada.

En lo deportivo, podremos modificar las tácticas y alineaciones, las técnicas de entrenamiento, tanto globales como individuales, tomar decisiones sobre el tratamiento a lesionados, fichar y deshacernos de los jugadores que creamos convenientes... Por supuesto, incluso una vez empezada la partida, podremos delegar muchas de estas responsabilidades en nuestros empleados: manager adjunto, fisioterapeuta, etc.

Pero aquí no acaban nuestras responsabilidades. El club tiene una infraestructura y una economía que respalda toda la sección deportiva del club, y es necesario que goce de buena salud para que el equipo siga adelante. Podremos para ello decidir la publicidad que más nos convenga para nuestras camisetas y las vallas publicitarias, y una vez que tengamos el dinero suficiente, podremos optar por una ampliación del estadio que quizá nos dé muchas alegrías en el futuro.

Quizá es en esta gestión económica dónde se encuentra uno de los principales escollos del juego, ya que las opciones que tenemos son escasas y la dificultad para mantener el club a flote no es poca (sobre todo en el caso de comenzar un equipo de cero) por lo que en muchos casos es aconsejable ceder esta responsabilidad al director comercial... aunque estemos perdiendo gran parte del atractivo de un juego de estas características.

Siguen habiendo defectos (jugadores que no se mueven a pesar de que el balón que va a salir por la banda fue tocado por ellos mismos, otros que corren tanto en una dirección que acaban por salirse de los límites del terreno de juego) pero en líneas generales resultan bastante entretenidos para lo que hasta ahora nos tenían acostumbrados estos juegos. El sistema de órdenes por las que cambiaremos la táctica durante el partido, y la IA de los jugadores ha sido claramente mejorada respecto a la versión 2003.

Durante estas simulaciones disponemos de una interesante opción visual, la opción Rastro de Balón, con la que podremos ver una estela de color verde fosforescente que nos facilitará el seguimiento del balón. Por último añadir que tras cada partido tendremos una serie de opciones (Repetición de las mejores jugadas, Análisis del encuentro comentados por J.J.Santos, Resultados y Clasificación de Liga), todas ellas englobadas bajo el título Football One.

Ésto quiere decir que tu vinculación con el club no es de por vida, y que a pesar de que acabes cogiendo cierto cariño al equipo que has conseguido ascender desde los puestos más bajos de la tabla, pronto recibirás ofertas (como cualquier triunfador) de otros clubes más importantes, o de otros pequeños equipos que deciden realizar un desembolso importante confiando en tu capacidad para salvarles de su situación. En tu mano estará aceptar o no el reto que más te convenza.

La opción Código de los Bonos se nos facilitará un ID único a través del cual y siguiendo unas instrucciones alojadas en una de las páginas webs de la compañía Codemasters, obtendremos (previo pago de 4.60€) unos códigos para desbloquear características especiales del juego. Una táctica comercial sin duda controvertida. Eso sí, si procedemos a registrar nuestro juego en la web se nos regalan dos códigos... hay que ver.

Una vez comience la temporada la gestión por parte de cada uno se hará por turnos; primero el jugador 1 será el que haga los cambios pertinentes, y después, cuando éste decida continuar hacia el próximo partido, será el turno del  jugador 2. Se podrá variar el turno a través del menú principal en el momento que queramos, así como retirar a alguno de los dos jugadores.

Un juego tan largo como queramos que sea y que nos irá descubriendo nuevas facetas a medida que avancemos. Por supuesto cuenta con la licencia de la Liga de Fútbol Profesional, por lo que estamos en disposición de dirigir a nuestro ídolos.

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