BloodRayne (Xbox)

Tras la escultural Buffy, una nueva heroína cazavampiros se acerca a Xbox. Su nombre en clave es BloodRayne, es una agente especial equipada hasta los dientes y si tus aficiones son coleccionar ataudes y beber de los cuellos de vírgenes, más te vale permanecer lejos de ella.

"Año 1932: Una adolescente americana fue arrestada en Europa después de haber dejado tras de si un camino lleno de horror y destrucción. Rayne, que así se llamaba la joven, justificó su barbarie sosteniendo que todas las personas que había asesinado y mutilado eran vampiros, incluido su padre, al que no había conseguido doblegar. Antes de que se pudiera contrastar y averiguar más información acerca de la misteriosa joven,  toda evidencia física de su existencia desapareció de forma inesperada.

Estos confusos datos son la única información hecha pública acerca de estos escabrosos sucesos. Nuestra organización secreta, la sociedad Brimstone, se ha hecho cargo desde ese instante de la Dhampir Rayne, fruto de la salvaje violación que sufrió su madre a manos de un vampiro. Adiestrada y entrenada en las artes de la fraternidad para combatir y acabar con cualquier ente sobrenatural, la agente BloodRayne protege a personas inocentes de acontecimientos en los que no deberían verse envueltos.

En este oscuro pasaje de la historia en el que, por desgracia, nos hallamos, se le ha encomendado una difícil misión. La codicia de un hombre que intenta extender el dominio de Alemania sobre el resto de naciones haciendo uso de las artes oscuras, pone en peligro el equilibrio mundial. Nuestra aguerrida amazona deberá infiltrarse en el cuartel general Nazi con el objetivo de poner fin a tan descabellados planes de megalomanía. Su camino no estará exento de enormes peligros y dificultades pero confiamos en la capacidad y habilidades sobrenaturales de nuestro agente para superar cualquier tipo de obstáculo."

Con esta premisa, ciertamente poco original, como punto de partida, el estudio americano Terminal Reality nos presenta su nuevo trabajo en forma de aventura que exuda acción por los cuatro costados. Su carta de presentación no puede ser más clara y directa: protagonista de curvas voluptuosas enfundada en un "escueto" traje de cuero negro con ganas de repartir "caricias" y "abrazos" entre los nazis del lugar, un vil enemigo al que vencer, un mundo al que salvar y un color, el rojo, que inundará la pantalla por momentos en este sanguinolento juego. Añade un poco de perspicacia a la hora de robar hallazgos formales de películas populares, como en su día hizo Max Payne, y tendrás este BloodRayne que intenta asimilar una serie de clichés de consabida eficacia en el mundo de los videojuegos al mismo tiempo que se distancia de los mismos gracias a una estética gótica un tanto peculiar y cuidada.

La estructura de juego descansa en gran parte en un cuidado y variado sistema de combate del que haremos uso a la hora de vernos las caras con los engendros del lugar. Los objetivos a cumplir no serán especialmente difíciles de acometer ni involucrarán una resolución de enigmas excesivamente complicados a la hora de avanzar sino todo lo contrario. Serán bastante directos en su resolución y consistirán principalmente en eliminar a determinados enemigos, realizar tareas sencillas como colocar bombas en sitios estratégicos, encontrar la forma de llegar a la próxima localización o fase del juego, etc. Por supuesto, en nuestro camino podremos encontrar algunas pequeñas y bienvenidas variaciones como la posibilidad de manejar a un gigante engendro mecánico o disfrutar con las encarnizadas luchas que tendrán lugar con los jefes finales de determinadas fases. Sin embargo, el plato fuerte de BloodRayne será las eficaces y variadas formas con las que podremos afrontar y encarar a nuestros enemigos que, en la mayor parte de las ocasiones, nos asediarán en cantidades que podrán superar la decena.

Nuestra heroína se moverá con gran precisión y agilidad gracias a su naturaleza vampírica. Con el stick analógico izquierdo podremos mover a BloodRayne mientras que con el stick analógico derecho manejaremos la cámara así como la dirección de sus movimientos. Para utilizar las dos espadas que lleva equipadas en ambos antebrazos, deberemos presionar el gatillo izquierdo. Haciendo uso de ellas en el momento exacto, nos permitirá descubrir y aprender nuevos movimientos que podremos incluir en los distintos combos que se podrán realizar con estas afiladas gemelas. Además, y con motivo de incentivar al jugador, cada vez que eliminemos a un enemigo con este tipo de ataque se rellenará una barra de energía con la que, una vez que esté completa, podremos realizar el ataque Blood Rage presionando el botón Y. Durante dicho ataque, la pantalla se teñirá de una tenue luz roja al mismo tiempo que todo cuanto se encuentre en la misma se moverá a cámara lenta como ya ocurriera en otros juegos que copiaron este hallazgo formal de Matrix. Gracias a esto, podremos encadenar poderosos combos mientras eliminamos a múltiples enemigos de forma más sencilla.

La agente BloodRayne también podrá hacer uso de múltiples armas como pistolas, rifles de asalto o lanzamisiles. El sistema de armamento será bastante elaborado a la vez que simple y flexible. Para empezar, no será preciso apuntar minuciosamente con las "herramientas", enfatizando la vertiente frenética y arcade del juego. También se nos brindará la posibilidad de recoger cualquier tipo de armas que no encontremos a lo largo del juego ya sea porque tengamos la suerte de encontrarlas o porque se las cojamos prestadas a los distintos enemigos abatidos. En la gestión de nuestro inventario tendremos que tener en cuenta el peso de las distintas armas así como de la cantidad de munición de la que disponen cada una de ellas. Una vez que hayamos gastado todas sus balas, podremos deshacernos de las mismas.

Dado que nuestra protagonista es medio vampira, además del ataque Blood Rage, podremos emplear algunas habilidades exclusivas de estos señores de la noche para acabar con nuestros enemigos. Presionando el botón X, Rayne se abalanzará sobre el cuello de los nazis con el objetivo de chupar hasta la última gota de su sangre. Para añadir un poco más de variedad, mientras chupamos la sangre de nuestros adversarios, podremos usarlos como escudos en caso de que otros enemigos nos ataquen, pues seremos vulnerables durante este macabro ritual. Además, dispondremos de un pequeño arpón con el que podremos enganchar a nuestros enemigos y atraerlos hacia nuestra sexy heroína con el fin de realizar con ellos un pequeño festín. Con este particular a la vez que sanguinolento ataque no sólo acabaremos con nuestros enemigos sino que además nos permitirá regenerar nuestra energía vital, la cual, irá disminuyendo lentamente conforme avanzamos en el juego y de forma más acusada cuando nuestros oponentes nos inflingan graves heridas. También podremos hacer uso de nuestra visión vampírica con el objetivo de abrirnos paso en los parajes más oscuros del juego así como para identificar la posición de enemigos importantes o ver a través de las murallas.

Gráficamente, la gente de Terminal Reality ha tratado de crear un engine sólido teniendo en cuenta la naturaleza multiplataforma del título. Nuestra protagonista gozará de un modelo poligonal bastante detallado y una gran cantidad de animaciones, algunas de gran calidad y otras de una naturalidad más que cuestionable. Los escenarios serán variados y completamente interactivos, alternando la arquitectura gótica de enormes catedrales con la podredumbre de zonas pantanosas o la funcionalidad de las bases nazis. La cantidad de enemigos en pantalla será bastante amplia aunque el detalle de los modelos poligonales de los mismos se resentirá de este hecho así como de la posibilidad de desmembrar y destrozar cualquier parte de sus cuerpos. Se ha implementado una física más o menos realista en el movimiento de la ropa así como efectos de luz en tiempo real que podremos apreciar en la tenue y juguetona luz de las antorchas o en el festín pirotécnico de disparos en el que acabarán muchos de nuestros enfrentamientos. El sistema de partículas dedicado al fluir de los continuos regueros de sangre que inundarán la pantalla se ha cuidado especialmente. Sin embargo, el juego, por lo menos en su versión NTSC, sufre de bajadas frecuentes en un frame rate que se mantendrá estable a 30 fps durante gran parte del juego. Esperamos que en el port a PAL el asunto mejore.

BloodRayne quizás no sea una maravilla técnica ni un cúmulo de propuestas originales a priori pero esperemos que deje más que satisfechos a aquellas personas que busquen un arcade repleto de acción con una gota de terror gótico.