APACHE vs. HAVOC - Enemy Engaged
- PlataformaPC8
- GéneroSimulación
- DesarrolladorRazorworks
- TextoEspañol
- VocesEspañol
Enviado del infierno
El Apache Longbow AH-64D y el Havoc B Mil Mi-28N son para las fuerzas armadas de EE.UU. y de la ex URSS respectivamente el equivalente volador de un vehículo blindado con gran potencia de fuego.
Con campañas en Cuba, Georgia (ex-República Soviética) y el Triángulo Dorado (Laos/Tailandia), pilotaremos nuestros aparatos sobre terreno variado y de notable complejidad visual. Por fín, tenemos la oportunidad de desenvolvernos sobre terreno boscoso tupido (algo que muchos simuladores han eliminado o simplificado, quitándole al combate sobre helicópteros uno de sus alicientes) además de misiones marinas. El enfrentamiento es, invariablemente, EE.UU. vs Comunistas. Si nos decantamos por el lado estadounidense (azul), el Apache. Del lado Comunista (rojo), el Havoc. El juego está muy equilibrado y estos dos aparatos tienen un role muy similar en el conflicto. Un poco más de agilidad por el lado americano y más potencia de fuego por el lado ruso, sus únicas y casi inapreciables diferencias.
A nivel técnico, como ya se ha dicho, Apache vs. Havoc destaca por su perfección y preciosismo a todos los niveles. Desde la simulación puramente dicha, pasando por el comportamiento de las unidades controladas por ordenador, el diseño del terreno y las zonas de combate o los efectos de las armas sobre las estructuras. No se le pueden sacar apenas fallos a este juego si exceptuamos su dificultad, algo que al fin y al cabo viene implícito a los aparatos simulados y es consecuencia del extenso trabajo de documentación y fidelidad al original que parece haber sido nota dominante de este proyecto.
Los combates y escaramuzas son extremadamente realistas en todos los sentidos, pues además de sentirnos envueltos en un campo de batalla real, la acción se sigue desarrollando más allá de nuestro campo visual. Decenas, cientos de unidades luchan a la par que nosotros, pugnando por ocupar posiciones o inhabilitar emplazamientos estratégicos enemigos. Y luchan con ferocidad; de manera inteligente. Los ejércitos están tratando de ganar esta batalla y nosotros sólo somos un elemento más en el engranaje de la maquinaria bélica. Tanques, blindados, transportes de tropas, aviones de todo tipo, otros helicópteros, emplazamientos de artillería, antiaéreos...
Especial comentario se merecen las ciudades. En Razorworks no han escatimado detalles a la hora de conseguir el que probablemente sea el combate urbano más realista que hay en el mercado de la simulación aérea. El nivel de detalle es asombroso, aunque bien es cierto que admirar el paisaje es la mejor manera de encontrarse tragando plomo y con el trasero en llamas. El ataque a edificios es simplemente brillante; un espectáculo visual en el que asistiremos a interesantes efectos de pirotecnia y contemplaremos en todo su esplendor la devastación provocada por nuestro armamento. Las estructuras acusan el daño revelando sus entresijos y el efecto causado en paredes y techos por la deflagración.
Otro factor muy importante es la climatología, pues al fin y al cabo el Apache y el Havoc son los vehículos de elección cuando un ataque es imperativo y el tiempo no acompaña (momento en el que los cazas más caros y sofisticados son virtualmente incapaces de realizar un bombardeo en condiciones, como el conflicto de los Balcanes nos demuestra día a día). Si creíais que pilotar un helicóptero era difícil, probad a hacerlo en medio de una tormenta.
Los helicópteros que pilotamos han sido diseñados con lo que no puede ser calificado de menos que mimo y el resto de las unidades son también extremadamente realistas. El terreno es algo para ver (especialmente las endiabladas zonas boscosas y las ciudades -que marcarán un hito en el género-. No se puede dejar de mencionar también el apartado climatológico, en el que Apache vs. Havoc se lleva un sobresaliente merecido (y que será un importante factor a tener en cuenta cuando pilotemos nuestro aparato sobre territorio hostil).
Aprovecha la maniobrabilidad de tu helicóptero para atacar y destruir; para que no sepan qué es lo que les golpeó. No dejes a las baterías antiaéreas hacer blanco (serán el primer objetivo a destruir, pues una vez el enemigo esté inerme ante tí, será como aplastar hormigas). Y sobre todo, no vayas a lo loco. Tienes objetivos bien definidos y rutas de vuelo; síguelas, están para algo. Vagabundear puede acabar conduciéndote a un nido de helis enemigos (desengáñate, el Apache y el Havoc pueden dar mucha guerra en un tète-a-tète, pero en inferioridad numérica estás frito casi seguro). En definitiva: esto es la guerra real; el enemigo ahí fuera tiene el armamento necesario (y muchas ganas) para ponerte fuera de circulación. Tu objetivo es hacérselo a ellos antes de que ellos te lo hagan a tí.
Qué demonios; por si no lo he dicho bien claro, este juego es el simulador de helicópteros que estabas buscando.
NOTA: Inicialmente este juego tenía una nota de 9,3, pero tras hacer un análisis más profundo se ha rebajado a un 8 para estar más de acuerdo con lo que el título realmente ofrece.
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del género. Está bien cuidado a todos los niveles. Cómpralo.