Remontada Mundial de Chingotto y Galán
Segundo revés consecutivo para Tapia y Coello que, además, ahora ven comprometido su posición de primeros del ranking.
¿Sorpresa? Casi, porque Coello y Tapia ganaron el primer set de un a manera insultante, con un dominio absoluto, sin dar opciones a Chingotto y Galán más allá de hacer dos juegos testimoniales: 2-6. Pero en el pádel nada es lo que parece, y cuando se encuentran las dos mejores parejas mundiales cualquier cosa puede ocurrir. Y lo que pasó fue que Fede Chingotto y Ale Galán sacaron fuerzas de flaqueza, para remontar y ganar el tercer set en plan exhibición y proclamarse campeones del Mundo.
Fue una final que se pareció mucho a la del P1 de Milán, donde comenzó la mejor racha del año de los nuevos campeones, que allí cerraron el partido con un 6-0. Esta es la segunda final consecutiva que Ale y Chingo ganan a Tapia y Coello, en su mejor sucesión de la temporada, con 15 victorias.
El primer set fue una exhibición de Arturo y Tapia, con Galán controlado, con su remate romo, y con Chigotto sin acertar con el globo, que o se quedaba corto se iba al cristal. “Está claro, la clave es el globo”, decía Galán en el banquillo, sobre todo porque la pegada no podía ser óptimas desde cualquier parte en esta pista lenta.
Reaccionaron Fede y Ale, porque en el segundo set defendían su saque, no sin agobios, pero se llegó al 4-5, y ahí hicieron tres juegos seguidos: los dos con su saque y la ruptura, la única. para el 6-5 y acabar con 7-5 con un Galán desatado.
El desenlace lanzó a los campeones mientras que hizo mella en Arturo Coello y Agustín Tapia, que perdían la alegría de su juego en la pista, con demasiados errores no forzados. Tapia se reprimió en la pegada al comprobar que se vendía; Coello lo intentaba todo, pero para entonces Chingotto era un correcaminos que llegaba a bolas imposibles y encontraba una vía de escape que le pagaba muchos puntos, directos o para que los terminase ejecutando un Galán que sacaba su cañón en la pegada: Tapia y Coello no encontraban la manera de controlar los tiros por el medio. De ahí, el 6-2.
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La victoria tiene un premio extra, que se traspasa a la lucha por el primer puesto del ranking. que se rebaja en 800 puntos por jugador, con lo cual la diferencia está en menos de mil, por lo que la lucha de los campeones del Mundo por ser los mejores de 2025 ya no es una entelequia.
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