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BOXEO | FIB DEL PESO LIGERO

George Kambosos: de sufrir bullying por sobrepeso a campeón del mundo

El australiano, excampeón unificado del peso ligero, se enfrentará al ucraniano Vasyl Lomachenko por el cinturón de la FIB la madrugada del sábado al domingo (04:00, Fight Sports) en Perth, Australia.

El excampeón George Kambosos con sus cinturones del peso ligero.
Instagram: @georgekambososjr

George Kambosos (21-2-0, 10 KO) siempre muestra una imagen de guerrero en el ring, pero, años atrás, fue un niño que sufrió bullying por su sobrepeso. El australiano empezó a boxear a los 11 años por el acoso que recibió en la escuela y terminó haciendo sparring con Manny Pacquiao y proclamándose campeón unificado del peso ligero. La madrugada del sábado al domingo (04:00, Fight Sports), se enfrentará al ucraniano Vasyl Lomachenko (17-3-0, 11 KO) por el título de la división de la Federación Internacional de Boxeo (FIB) en Perth, Australia.

Me hicieron bullying cuando era un niño. Tenía sobrepeso y era el último en todo lo que hacía y en lo que participaba. Siempre traté de hacer todo con mi esfuerzo al 100%. Jugaba al rugby y luchaba por mantenerme al día con el equipo porque mi estado físico era muy malo, por lo que mi padre y yo decidimos probar el boxeo en la temporada baja. Rápidamente, me atrapó, perdí 14 kg y trabajé para convertirme en un boxeador”, reveló Kambosos en una entrevista con The Sun. Cuando cumplió 13 años, le prometió a su padre Jim que lograría ser campeón del mundo.

El australiano probó el surf y fue socorrista, mientras seguía practicando boxeo y jugando al rugby. Llegó un momento en el que tuvo que escoger un deporte, y se decantó por el pugilismo, por su espíritu guerrero. Kambosos es de ascendencia griega y siempre se ha sentido muy ligado a sus raíces. “Realmente creo que debería haber nacido en los tiempos del 300. Ese es el tipo de salvaje que soy. Traigo esa cruda agresión al ring de boxeo. Matar o morir”, aseguró el excampeón, que tiene toda la espalda tatuada con espartanos.

“Trabajé duro, me sacrifiqué mucho y mi disciplina es insuperable. Me concentré en el objetivo y nunca dejé de creer en mí mismo, y se convirtió en una realidad y sucedió. Aprendí desde muy joven que hay que sacrificarse, dedicarse al deporte y entrenar duro todos los días para alcanzar tus sueños”, explicó el australiano. Kambosos y su padre, que es su entrenador y le ha acompañado en su carrera, viajaron a Estados Unidos para entrenar en el gimnasio de su compatriota Justin Fortune e impulsar internacionalmente la carrera de Ferocious. Ahí conoció a Manny Pacquiao, con quien hizo sparring en varias ocasiones y formaron un vínculo de amistad.

En noviembre de 2021 cumplió su promesa. Kambosos derrotó a Teófimo López (20-1-0, 13 KO), contra todo pronóstico, por decisión dividida y le arrebató sus coronas AMB, OMB y FIB del peso ligero, además de su invicto. Pero no le duró mucho la alegría, ya que perdió los cinturones en su primera defensa, siete meses después, ante Devin Haney (31-1-0, 15 KO), que también se impuso en la revancha que protagonizaron en octubre de 2022. A pesar de las duras derrotas, el australiano volvió para proclamarse campeón IBO al ganar al británico Maxi Hughes (26-7-2, 5 KO) por decisión mayoritaria.

Ahora, Ferocious está ante la oportunidad de recuperar uno de los títulos que le quitó Haney, que quedó vacante en su asalto al peso superligero, pero no será ante un oponente fácil. Lomachenko fue el dueño de los tres cinturones que se ciñó Kambosos. El ucraniano era el campeón unificado hasta que Teófimo se cruzó en su camino y se los arrebató por decisión unánime. Kambosos fue el verdugo de López, y pretende ser el de Loma también para volver a la cima.

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