Cecilia Castro, bronce mundial en un año “intenso”

De Manchester a Guadalajara (México). Seis meses y casi 9.000 kilómetros después, Cecilia Castro se mantiene en lo más alto. En mayo, la madrileña de 25 años, de San Agustín de Guadalix, lograba el oro en los Europeos de taekwondo; la pasada madrugada (del martes al miércoles) subió al podio de los Mundiales. Bronce en -67 kg y la culminación a una temporada brillante. “Dios, lo hemos conseguido”, pensó tras certificar su presea continental. Le saltaron unas lágrimas (”soy muy emotiva”, admite) que han encontrado continuidad.

En el pasado ciclo olímpico, Cecilia, estudiante de Psicología y gran aficionada a la lectura, trabajó mucho hacia un desenlace cruel: se quedó a un solo punto de poder participar en los Juegos de Tokio. París no se puede escapar. Lo merece y lo persigue. “Ha sido un año intenso, así lo definiría. También muy satisfactorio, porque he disfrutado mucho. Hacía bastante que no disfrutaba tanto. Volver a disfrutar, con mejores resultados, con mejores sensaciones que nunca…”, explica la madrileña a AS desde México, donde, pese a no alcanzar la final, sintió el oro muy cerca. “La final la olí dos veces. Al final del segundo asalto y del tercero… Me sentía casi campeona. Se me quedó un sabor muy agridulce, porque estaba muy bien y muy enchufada. Mi objetivo era una medalla, pero luego me veía mejor todavía. En ese momento sentía que podía tener más”, se sincera.

En Guadalajara, sólo la local Leslie Soltero, a la postre campeona, pudo frenar a la madrileña. Y por seis segundos. Castro, que terminó cayendo por 2-1, se agarró con todo a su segunda final internacional en una temporada que, pese a terminar cediendo, sigue siendo de oro. Antes, superó a la dominicana Madelyn Andrea Rodríguez por 2-0, resultado que repitió ante la alemana Vanessa Koerndl y, ya en cuartos, ante la francesa Magda Wiet Henin. Con mucha autoridad, la que ahora mismo desprende, hasta Soltero, que llegó al cajón más alto tras imponerse a la serbia Aleksandra Perisic. “Viví la semifinal con mucha alegría, porque estaba con ganas, tensa, concentrada, muy enchufada y sabía que el público estaba en mi contra. Me gustó, hizo que me viniera arriba. El arbitraje, en muchos momentos, no fue correcto, creo, pero, pese a ello, hice muy bien mi papel y estoy muy contenta con mi trabajo”, valora. Sigue hacia París.

Adriana Cerezo cae en cuartos

Otra alegría personal y otra alegría para la delegación española, que salió de Manchester con nueve medallas y que ya lleva dos en Guadalajara. El lunes, Jon Andoni Cintado, con una plata en -80kg, estrenó el contador, que no han podido ampliar ni Adriana Cerezo ni Javier Pérez Polo. La subcampeona olímpica, primera cabeza de serie en el cuadro de -49 kg y vencedora ante la puertorriqueña Rosado (2-1), no pudo pasar de cuartos tras caer ante Abutaleb (2-0). El madrileño, por su parte, que partía como segundo favorito en -68 kg, se ha despedido en su debut ante el coreano Kwoon (2-0).