Rahm claudica en Chicago y saca el uno de la FedEx a subasta

No están siendo las mejores semanas, en lo que a nivel golfístico se refiere, para Jon Rahm. La mala suerte ha hecho, además, que este bajón de rendimiento coincida con uno de los momentos clave del año: los playoffs de la FedEx Cup. El vizcaíno no fue capaz de brillar en exceso la semana pasada en el St. Jude Championship y, estos días, se está repitiendo la historia en el BMW Championship, el segundo de los tres torneos finales del PGA Tour. A falta de una jornada, Rahmbo es 38º (de un total de 50 jugadores) con +4 después de una tercera ronda de 71 golpes, uno sobre el par de Olympia Fields (Chicago, Estados Unidos).

Si en el año 2020 Rahm domó a las mil maravillas a este campo (logró el triunfo en el desempate frente a Dustin Johnson), en 2023 se le está atragantado el recorrido diseñado por Willie Park Jr. Lo de este año se puede considerar una anomalía, y es que Rahm siempre ha acabado el BMW Championship dentro del top-10 a excepción de en 2018. De poco sirvió una correcta primera vuelta, de dos bajo par, pues desde entonces Jon no ha hecho más que perder posiciones y está totalmente descartado de la pelea por el título. Y el daño apunta a ser mayor: salvo milagro, perderá el número uno de la FedEx Cup justo antes del Tour Championship.

Este sábado, Jon firmó otra ronda irregular, combinando aciertos y errores, como le viene pasando últimamente. Poco acertado desde el tee (seis de 14 calles cogidas), lo pagó caro a la hora de acercarse al trapo (ocho de 18 greenes en regulación). Las pocas oportunidades que tuvo, eso sí, las aprovechó. Pero los cuatro birdies que se anotó (al 1, 3, 12 y 17) sirvieron de poco frente a los cinco bogeys que cometió (2, 6, 10, 11 y 15). Una montaña rusa que el de Barrika, en ocasiones falto de fortuna, no supo detener. El descalabro pudo ser mayor, pero los 26 putts en 18 hoyos fueron una de las pocas buenas noticias del día.

Sin opciones de lograr grandes cosas en la jornada final, Rahmbo aspira a recuperar buenas sensaciones y le tocará esperar para saber qué ocurre con el número uno de la FedEx Cup que ha sacado a subasta. Llegar como líder en la tabla al Tour Championship es de gran importancia, pues quien tenga el honor comenzará el torneo final del PGA Tour con -10 en su tarjeta (el segundo, por ejemplo, lo hará con -8). Y hay varios golfistas pujando por el trono. En esta tercera ronda, el que más fuerte apostó fue Scottie Scheffler. El número dos en la FedEx completó una sensacional ronda de 64 golpes, seis bajo par, para un total de -11 que hace que sea colíder junto con el inglés Matt Fitzpatrick (cuatro bajo par hoy).

Scheffler, número uno del ranking mundial, ya es virtualmente líder de la FedEx Cup. Incluso la segunda posición podría valerle. Para ello dependerá de lo que hagan otros jugadores todavía con opciones, como un Rory McIlroy que marcha con -8. Se mantiene en la pelea Max Homa, líder tras el viernes, que tuvo una mala tercera vuelta (uno sobre par) que le deja con -9. Por delante, a un golpe de la cabeza, apareció Brian Harman, el campeón del pasado British Open. Y brilló también Sam Burns, que con una vuelta de 62 golpes igualó el récord del Campo Norte de Olympia Fields. La puja por el trono del PGA Tour, al rojo vivo.