Lío en la Ryder: McIlroy casi llega a las manos con el caddie de Cantlay
El norirlandés recriminó con dureza al exportador de palos de Tiger Woods por celebrar de forma demasiado efusiva el triunfo en el último partido.
El golf sigue unas reglas muy estrictas de protocolo y educación, pero los jugadores por mucha experiencia también tienen sentimientos y orgullo. Rory McIlroy acabó enfadadísimo su partido de fourballs, pero no sólo por la derrota sino más bien por los gestos de un miembro del equipo estadounidense. Esta es la secuencia: Cantlay emboca un impresionante birdie desde 14 metros que acercaba el triunfo en el partido final y reducía la renta de Europa antes de los individuales. Y se quedaba mirando fijamente al norirlandés a poca distancia en una actitud desafiante.
McIlroy aún podía empatar el hoyo y el partido... pero falló. En ese momento, el caddie del norteamericano se quitaba su gorra, como el resto de miembros rojos, y la agitaba con efusividad. Entre ellos también Joe LaCava, caddie de Cantlay y exportador de la bolsa de palos de Tiger Woods. El problema es que tras el fallo de Fitzpatrick que daba la victoria al dúo Cantlay-Clark lo hizo a apenas metro y medio de McIlroy encendiendo al jugador europeo. Miradas, palabras y gestos entre ambos, pero aparente serenidad pese a que ya el jugador le había dicho que dejara sus movimientos de gorra.
Pero no acabó ahí la historia. En el parking, McIlroy ve a LaCava y se dirige hacia él de forma brusca señalándole con el dedo y diciéndole cosas de forma directa. En ese momento aparece el caddie de Justin Thomas, Jim Mackay (ex de Phil Mickelson), que ejerce de parapeto y detiene el avance del norirlandés, que es agarrado y llevado de nuevo a su coche por su compañero Lowry, hacia LaCava. Pocos minutos después, Luke Donald (capitán de Europa) reconocía en rueda de prensa que Rory estaba muy enojado y que incluso llegó a pedirle que dejara de hacer esos gestos en el green del 18... algo que LaCava ignoró.